DIA 28 DE AGOSTO
Al día siguiente nos levantamos y fuimos a un rent a car al lado del hotel, el Margaritis rent a car. Alquilamos un Nissan pequeño durante tres días por 120 euros.
Ese día teníamos excursión por la zona suroeste de la isla. Nuestra primera parada fue en Kalathos, desde donde tienes una bella vista de la bahía de Vliha. Nos dimos un baño es su playa formada por piedras de mármol. Estuvimos un rato con las gafas y disfrutando del agua y del paisaje. Kalathos es una playa preciosa, sin casi hamacas, con una gran lengua de piedras de diferentes colores, con un agua clara con pececillos.

Después de refrescarnos seguimos camino hasta Lindos. Aparcamos el coche y bajamos hasta la playa, nos dimos un baño, aunque no es nada comparable a Kalathos, la playa estaba llena, y lo único que tiene de admirable es la vista del castillo. Desde la playa fuimos subiendo poco a poco andando hasta el castillo. La subida es dura, pero a poco a poco se puede hacer y así también disfrutas de la vistas tranquilamente. Se puede subir en burro, pero a mi me dio pena y un poco de miedo. Al llegar arriba estábamos agotados… y sobretodo sedientos. Aprovechamos a tomar un zumo en el bar que hay en la entrada y luego pagamos las entradas y volví a aprovechar el descuento. Me parece recordar que el precio fueron 6 euros y tres en mi caso.



Las ruinas del castillo de Lindo están destrozadas y no merecen mucho la pena, como mínimo para nosotros, aunque hay que reconocer que las vistas son preciosas y por ellas si que merece la pena pagar la entrada.
Estuvimos mucho rato disfrutando de las vistas, haciendo fotos. Y luego bajamos a pasear por Lindos y a comer en un pequeño restaurante. Comimos unos gyros , una cerveza y agua aproximadamente por 7 euros. Después de comer dimos un pequeño paseo. Compramos una bandeja de cristal por 25 euros y un par de imanes por 3 euros.
Lindos es un pueblo bonito, pero si vienes de Milos y Santorini no te parece tan impresionante.
Volvimos al coche y paramos en un monasterio, dimos una vuelta y después volvimos al coche y paramos en Tsampika, otro monasterio que esta encima de la montaña, el monasterio era muy pequeñito y esta muy deteriorado. Existe la tradición de hacer peregrinación para conseguir quedarse embarazada. El camino es duro pero las vistas desde arriba son maravillosas.
Descendimos las escaleras y nos dirigimos a las siete fuentes ( Epta piges) donde hicimos una pequeña excursión. Nos metimos en un túnel súper estrecho y atravesamos de un lado a otro la montaña, a oscuras, sólo se puede ir en una dirección y vas con los pies en el agua. La sensación es bastante claustrofóbica. Después dimos un pequeño paseo por los riachuelos y nos dirigimos a Kalithea ( a las fuentes termales) ya estaban cerrando y nos dejaron entrar sin pagar. Pudimos ver las fuentes y darnos un pequeño baño en la playita.

Regresamos a Rodas ciudad, aparcamos en la playa y fuimos a cenar al Napoleon restaurant. Disfrutamos de la cena, aunque no recuerdo que cenamos exactamente, el precio aproximado fueron 30 euros.