Llegaba uno de los destinos "fuertes" del crucero, San Petersburgo. Nos apetecía mucho conocer esta ciudad, antigua capital de los zares. Teníamos dos días completos porque el barco hacía noche en el puerto.
¿Problema? Un español necesita visado para visitar Rusia. Hay que tramitarlo con antelación y además es caro. ¿Solución? Ir en una excursión organizada, porque en este caso se obtiene un visado de grupo gratis que permite visitar el país, eso sí en un tour que no se puede abandonar en ningún momento. Una vez claro este punto hay que decidirse entre las excursiones que ofrece la propia compañía, en este caso, Royal Caribbean, y distintas compañías rusas que se pueden contratar por internet. Tras consultar algunos foros y ver que Royal ofrecía una excursión de dos días por nada menos que 329 dólares por persona y además incluyendo menos visitas, la decisión estaba clara: buscar una agencia local.
Al final nos decidimos por Shorex,
www.shorex.ru, una compañía de S.Petersburgo que nos ofrecía dos días de visitas con las comidas incluidas por 152 €/ persona en un grupo de máx. 16 viajeros, si pagábamos por adelantado. Las críticas eran tan buenas que lo hicimos. A través de los foros de
www.viajeros.com podéis buscar compañeros para excursiones bien con Shorex o con otra agencia. Si llegáis a un número considerable de excursionistas conseguiréis un mejor precio e incluso podréis presionar a las distintas agencias para mejorar los precios. Nosotros no tuvimos esa suerte, no encontramos a españoles que quisieran hacerlo en los meses previos al crucero, y eso que en el barco había gente más que suficiente, pero bueno, también tuvo sus ventajas...
La gran ventaja fue que al final nuestro grupo consistió en sólo 6 personas. Fue una gozada porque eso lo hizo mucho más ágil, por ejemplo en el museo Heremitage. Me imagino que mover y controlar a 40 o 50 viajeros por parte de un guía no debe ser tema fácil y se pierde tiempo. Mucha gente del barco contrató los servicios de Royal y otra parte se lo había currado por su cuenta, como hicimos nosotros. Entre la gente que conocimos, un grupo importante lo hizo a través de
www.excursionesparacruceros.com . Llegaron a ser 35-40 y consiguieron un precio de 139 € que también les incluyó la excursión nocturna para ver los puentes levantados. Nosotros la excursión nocturna no la echamos de menos porque no nos apetecía trasnochar y agotarnos aún más, pero valoradlo vosotros mismos: un grupo grande es más barato y puede incluir la excursión nocturna; un grupo pequeño es más ágil.

Opinión sobre nuestra excursión pequeña de Shorex? Bien, estupenda, aunque tuvo algún defecto. Básicamente la guía, un poco "parada" y poco dispuesta a hablarnos de la vida diaria rusa, cosa que a mí personalmente me interesaba mucho. Un día tardamos más de 1 hora en salir de S.Petersburgo para ir al Palacio de Pushkin y no abrió la boca. Me decepcionó un poco. Quizás era novata, a veces pensé que no dominaba perfectamente el español, aunque cuando soltaba sus discursos, éste era muy bueno. Lo que dijo, lo dijo bien, y fue clara, pero me habría gustado un poco más... Pero bueno, he estado en excursiones con guías incomparablemente peores. Y tampoco me gustó que se saltó la visita a la Fortaleza de S. Pedro y S. Pablo, que venía incluida en el programa. Quizás lo hicieran por el exceso de tráfico un día, no lo sé... No hubo explicación oficial. De todos modos, recomiendo la compañía, hay gente en los foros que estuvieron encantados con sus guías...
¿Qué vimos? El primer día tuvimos una visita panorámica en autobús con paradas para ver la catedral de S. Isaac desde fuera, la iglesia de S.Nicolás (preciosa, dentro y fuera) y la catedral de la Sangre Derramada (alucinante, dentro y fuera). También fuimos al Heremitage, donde nos pasamos casi tres horas. Fue muy interesante, pero el museo es tan grande y esconde tantos tesoros, que al final uno se dedica a "correr" por las salas a las que te lleva el guía. Por cierto, estaba a tope, nunca me habría imaginado que S. Petersburgo tenía tanto turismo. ¡Qué agobio! El día acabó con un paseo en barco por los canales que me encantó.
El segundo día lo dedicamos a visitar los palacios de verano de las afueras, en concreto el de Pushkin (impresionante), con paseo por sus jardines incluído, y el de Peterhof (sólo jardines): no tengo palabras. El día lo terminamos viendo un par de estaciones de metro muy bonitas y viajando en él.
Hubo tiempo para compras. Nos pasamos más de 45 minutos en una macrotienda de souvenirs donde la agencia seguro que tenía comisión.

Para mí fue excesivo, pero si preguntáis a otros miembros del grupo os dirán lo contrario. Es lo que tiene viajar en grupo. Nunca llueve a gusto de todos
Balance final: muy positivo. Las críticas os las pongo para contaros que no fue todo perfecto. Valoradlo y tomad vuestras propias decisiones si vais a hacer el viaje. En los foros se leen muchas críticas sobre las comidas de estas excursiones. No os lo puedo confirmar, a nosotros no nos disgustaron las comidas que nos ofrecieron, pero también es verdad que no teníamos las expectativas muy altas. Si hacéis algo parecido en España, los menús del día que os ofrezcan tampoco serán maravillosos... En general, los menús consistieron en un entrante (ensaladilla rusa o ensalada de remolacha), una sopa (de verdura o col roja??), y un plato de carne (Stroganoff, por ejemplo), más un pequeño postre, quizás. Lo dicho, más que aceptable...
Sobre la ciudad, no tengo palabras: alucinante. Los palacios, iglesias y museos son de lo más espectacular que he visto hasta la fecha. Y como además lo vimos con buen tiempo...
Sobre los controles de frontera: "acojonantes", con perdón. Creo que un problema fue que nos metieron mucho miedo en el barco. Eso hizo que nos enfrentáramos a los controles de la terminal de cruceros el primer día con una sensación muy extraña en el estómago... Tardamos entre 45 min y una hora en pasar ese control de pasaportes. Miraban a pasajero por pasajero, controlaban su pasaporte, su visado de grupo y le entregaban un formulario que luego se quedaban al volver al barco. Esa vuelta fue más rápida, pero también hubo control individualizado. El segundo día fue todo más rápido, no hubo comparación.