Para empezar mostramos el equipaje de nuestro viaje y el coche, un Kia Sedona que nos llevó de manera eficiente y placentera por las carreteras de los estados de California, Arizona, Nevada y Utah.

Después de nuestros dos vuelos, Barcelona-París y París-San Francisco, llegamos a esta última ciudad sobre las 7 de la tarde, todo sobre lo previsto, recogemos las maletas y nos dirigimos al centro de alquiler de coches que se encuentra muy cerca del aeropuerto. Cogimos el Air Train que conecta las diferentes terminales y también lleva al centro de alquiler de coches.
Llegamos a la central de alquiler de coches y nos dirigimos a Alamo, accedemos al mostrador, no hay cola y en cuestión de un cuarto de hora tenemos el GPS , nos dirigimos a recoger el vehículo y nos comentan que tienen a nuestra disposición un Kia Sedona. En ese momento nos surge un dilema ya que el coche que inicialmente habíamos reservado era un Dodge Grand Caravan pero no lo tienen preparado y nos ofrecen este otro argumentando que son el mismo tipo de vehículo. Después de algunas disquisiciones decidimos salir con el Kia Sedona dirección Redwood City, lugar donde tenemos nuestro hotel: Good Nite Inn donde pernoctamos esa noche. el motel resulta algo ruidoso y no tiene desayuno pero si una bien surtida cafetería al lado donde desayunamos la mañana siguiente.
Ya tenemos algo muy importante, la primera toma de contacto con el coche que hace nuestro amigo Paco y también con el GPS, en español y en millas. El coche es automático, por supuesto, en un momento nos hicimos con él.