Hoy tocaba Lagos a la que hacía tiempo que no veníamos. Habíamos reservado a través de TripAdvisor el paseo en barca por los acantilados de la Ponta da Piedade, con la empresa “Lagos Grotto Trips”, un recorrido de 1h 15’ por 18€ cada uno. Elegimos...
Hoy tocaba Lagos a la que hacía tiempo que no veníamos. Habíamos reservado a través de TripAdvisor el paseo en barca por los acantilados de la Ponta da Piedade, con la empresa “Lagos Grotto Trips”, un recorrido de 1h 15’ por 18€ cada uno. Elegimos la salida de las 10h porque la habíamos visto recomendada en el diario de “Comiviajeros”, y fue todo un acierto porque la hicimos solos. Es una experiencia totalmente recomendable que no la había hecho anteriormente por considerar que era muy turística, y claro que lo es, pero también es muy hermosa y te permite contemplar los bellos y variados acantilados, donde las rocas calizas toman extrañas formaciones creando arcos y columnas que recuerdan figuras de animales y humanas., entrando en todas las cuevas, al ser una barca pequeña.
La hora nos permitía fotos eludiendo el sol y tuvimos un tiempo inmejorable. Nuestro barquero-guía, Pedro, nos explicó detenidamente la historia del lugar, la morfología y todos los accidentes rocosos que nos íbamos encontrando con sus leyendas y los nombres que se les dan. Un gustazo total que ya repetiremos en otra ocasión al atardecer.
Tras la excursión que nos volvió a dejar en el puerto de donde salimos, dimos un paseo por Lagos. En primer lugar en el magnífico mercado con una gran variedad de pescados y mariscos. Nos encantan los mercados, aunque progresivamente vamos viendo que están disminuyendo por el aumento de las compras en supermercados e hipermercados. La planta alta está dedicada a productos típicos de la zona: higos, almendras, miel… Nos conformamos con comprar piri-piri y frutos secos, porque no nos atrevimos con los pescados que tendrían que estar todo el día en el coche.
El buen museo de Lagos estaba cerrado por restauración, pero sí entramos en la barroca iglesia de San Antonio donde se aloja. Esta iglesia del siglo XVIII impresiona por su barroquismo, en las tallas de madera doradas, angelotes y animales fantásticos. Un paseo por las calles del centro hasta las murallas, que son de origen romano y fueron rebestidas por árabes y cristianos, quedando los restos del Castillo de los Gobernadores, con la ventana manuelina. Al final nos esperaba la Fortaleza de Ponta da Bandeira del siglo XVII construida para proteger el puerto. Tocaba parar con una cervecita en la plaza junto al que fue el primer Mercado de esclavos, en el siglo XV.
Nos dirigimos hacia Meia Praia, que nos había recomendado Pedro, y nos alegramos muchísimos. Es un extenso arenal de unos 5 km entre el puerto deportivo de Lagos y la ría de Alvor. Hay distintos aparcamientos y tras pasar las vías del tren unas pasarelas te dejan en la playa. Hay diversos restaurantes en los accesos a la playa. Hoy llevábamos bocadillos y los frutos secos del mercado. El mar estaba bastante calmo con lo que fue un día playero de disfrute total. En nuestro paseo hacia el este nos encontramos que había una zona donde se estaba practicando nudismo y nos sorprendió porque normalmente dejan lugares de difícil acceso, así que es bueno tenerlo en cuenta a la hora de dejar el coche, sería por la zona de los campos de golf. Nos encantó darnos un buen baño.
Al atardecer recogimos los bártulos y camino de Salema, paramos en un Pingo Doce, que es nuestro super preferido en Portugal, y allí sí que nos compramos unas lubinas, vino, queso que no probé, unos langostinos cocidos y ensaladas, que esta, nuestra última noche en Salema, nos íbamos a dar un homenaje en nuestra terracita.[/align]
Muy buen comienzo. Anímate a continuarlo. Sobre los títulos de las etapas, es mejor poner a la izquierda el destino y a la derecha la fecha. Gracias por compartirlo.
Me interesa mucho mucho porque tengo pensado ir por allí dentro de unos días. Te entrego unas estrellas para animarte a continuar y me quedo a la espera de próximas etapas, agradeciendo de antemano la información que compartes. Saludos
SÃO MIGUEL (AZORES): ESTA ISLA ES LA LECHEUna semana en São Miguel, la mayor de las islas del archipiélago de las Azores...⭐ Puntos 4.94 (49 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 112
Exploremos las desconocidas BeirasVen, súbete en nuestro coche y recorre los 1.500 kilómetros con los que visitamos esta...⭐ Puntos 5.00 (14 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 99
Tienes razón Silvi_1982, sólo hemos encontrado alojamiento en Vila Nova, pero aún así, queremos recorrer los alrededores, así que si me puedes hablar un poquito de lo que podemos ver o hacer en Odeceixe y Aljezur, te lo agradecería mucho.
Para ver más bien playas, las playas de la costa. En Aljezur se pueden visitar las ruinas de un castillo. Y si bajáis, la puesta de sol en el Cabo de San Vicente merece mucho la pena, visitar la fortaleza de Sagres e incluso acercaros u día a Lagos, allí las playas no tienen nada que ver con las vicentinas.
La carretera a la playa serpentea a lo largo de un valle verdeante, acompañando a la rivera de Seixe y a campos agrícolas que van siendo sustituidos progresivamente por tierras anegadizas. En las laderas del valle los bosques de alcornoques dan lugar, más cerca de la playa, a matorrales litorales ricos en plantas aromáticas y melíferas que endulzan el aire. El caserío blanco, encajado entre las rocas, es esencialmente de veraneo. La playa es una gran lengua de arena entre el mar y el río que desemboca en el extremo norte del arenal, en donde se forman varias lagunas de aguas poco profundas, apetecibles para baños tranquilos. También se pueden alquilar barcas y pasear por la rivera, hábitat de animales como la nutria, la garza real o el colorido martín pescador. Las escarpas que ladean la playa son negras, de esquisto y con velos de cuarzo perla, muy estratificadas y hendidas, recordando a las construcciones de Lego.
Al sur de la Praia de Odeceixe, surge una pequeña ensenada, la Praia das Adegas, que es una playa oficial naturista. Cuando hay pleamar, es accesible a través de un camino peatonal que desciende por las rocas junto al mirador (un sendero escarpado seguido de escaleras de madera).
Una ruta por las mejores olas de la Costa Vicentina
De Aljezur a Sagres, la costa occidental del Algarve es un paraíso para surfistas por la espectacular belleza de sus playas y la variedad de fondos sobre los que surfear.