Crater Lake Game Sanctuary ✏️ Diarios de Viajes de Kenia

Amaneció en el lago Naivasha y al estar prácticamente solos, lo único que se escuchaba en el camping era el sonido de los habitantes del lago . Desayunamos unos crepes y un café en el bar-restaurante, había que coger fuerzas para el nuevo día .
Hoy tocaba volver a Nairobi y despedirnos de nuestro Mitsubishi Pajero .

Recogimos la tienda de campaña y fuimos a visitar Crater Lake Game Sanctuary, un cráter con un lago en su interior donde se pueden realizar diferentes trails y observar muchas especies de aves y algunos mamíferos entre otros.

La entrada para los dos costó 4500 KES, nos parecio bastante caro para lo que era, pero está claro que el negocio, es el negocio. Existen diferentes recorridos por los alrededores, nosotros nos decantamos por uno que roedaba el lago. Era muy fácil de seguir, en el suelo había flechas blancas pintadas que no daban lugar a equivocación. No vimos muchos animales pero las vistas eran espectaculares.

Después de dar la vuelta entera alrededor del cráter, bajamos al lago y nos topamos con un restaurante, donde nuevamente, no había ni un solo cliente. Decidimos comer allí unos platos de pasta, que tardaron medio siglo en preparalos. Como nos habían avisado que iban a tardar mucho, nos fuimos a dar un paseo junto al lago, con la gran suerte de toparnos con estos preciosos colobos.

Después de comer pusimos rumbo a Nairobi, esa tarde tocaba nos tocaba despedirnos del Mitsubishi Pajero , que buenos momentos nos había dado!! Exceptuando el otro Pajero que nos dejó tirados cerca de Narumoru, el resto de los días no tuvimos ningún problema.

A la salida de Naivasha nos paró la policía en lo que parecía un control rutinario. Nos pidieron la documentación del vehículo, lo revisaron y al poco tiempo nos dijeron que prosiguieramos.

Un par de horas más tarde llegamos a las oficinas de Concorde. Revisaron el estado del vehículo y vieron que nos habíamos pasado unos kilometros de lo contratado, no recuerdo la cifra, pero tampoco eran demasiados. Al haberse roto la correa del anterior pajero y haber estado "tirados" tantas horas, dijeron que no nos cobrarían los kilometros extra realizados por el incidente. Nos pareció bien.

Cogimos un Uber para ir al hotel y tardamos lo que no está escrito en llegar por los grandes atascos que había en Nairobi. Una ducha, un ratito de descanso...Y como muchos otros turistas, fuimos a cenar al Carnivore. Es un restaurante muy famoso donde pagas un precio fijo y puedes repetir tantas veces como quieras. Puedes probar diferentes tipos de carnes "exóticas" y más normalitas también.Yo no amorticé la cena....¡¡¡Pero Álvaro lo hizo con creces!!! ¿Cómo pudo comer tanto? .