El plan para hoy es coger el tren en la estación central de Santa Maria Novella, queríamos ver la iglesia homónima que también tiene mucho que ver, Giotto, Trinidad de Masacio, Capilla Rucellai con frescos de ghilardaio, el crucifijo de Brunelleschi…pero los peques y mi mujer están ya algo cansados y decido dejar la iglesia para otra ocasión, quizás dentro de otros 20 años Para ello cogemos el autobús en una parada cercana que nos deja frente a la estación, bendito google maps.
Sacamos los billetes en la app de Omio y nos vamos a Pisa en el tren veloz, 1 hora, por unos 35€, y alli mismo cogemos la linea Rosa hasta Torre1, que nos deja justo a la entrada de la estupenda Piazza dei Miracoli, los peques reconocen enseguida la Torre Inclinada que han visto en clase:
Como la entrada a la Catedral es gratis, sacando la entrada en taquilla, entramos a ver la catedral, por las puertas de Bronce fundidas en el taller de Giambologna:
en la que Galileo Galilei estudiara los movimientos pendulares con la lámpara que cuelga del techo, si bien la auténtica se encuentra en el Camposanto (7€), que quería visitar junto a la tumba de Fibonacci pero que finalmente no visito por no meter mucha caña a la familia
La Catedral de Santa María Asunta está muy bien, frescos de Cimabué (San Juan, a la derecha del Cristo en el ábside), pinturas de Andrea del Sarto, el magnífico púlpito de Giovanni Pisano de 1310, el Crucifijo y Candelabros con angel de Pietro Tacca:
El altar de la tumba de San Rainiero, santo patrón de Pisa, cuya Puerta posterior de la Catedral, la de San Rainiero, obra de Bonano Pisano (1150-1200) está bellamente decorada con 24 paneles de bronce que representan los hechos más destacados de la vida de Cristo:
Detalle puerta. Última Cena
Herodes y la matanza de los inocentes.
Y sobretodo los espectaculares frescos de la cúpula, obra de los hermanos Orazio y Girolamo Riminaldi (1627-1631) con la Virgen en la gloria y diversos santos de Pisa:
Esta plaza es impresionante:
A mi madre también le encantó Pisa
Comemos en el McDonalds de la entrada de la piazza, descansando al sol del mediodía, hace un día estupendo, compramos recuerdos para la familia y juguetes para los peques, un pulpo para Marco y una cámara de fotos que va pasando fotos de pisa al ir pulsando, y nos volvemos en bus a la estación; nuestra idea es ir a Luca en el tren de las 15:20 pero aparece cancelado, y el siguiente ya se nos haría muy tarde, por lo que nos acercamos a la piazza Vittorio Emanuele II, cerca de la estación, donde hay un mercado de navidad y otro tiovivo (2€ viaje)
Nos volvemos a Florencia, 1h 15′, en el tren de las 16:20, cogiendo luego un autobús que nos deja frente a la misma Via del Agnolo.
Los peques se quedan en el piso descansando, junto con mi mujer, y mi madre y yo vamos al supermercado, pasando por delante de la casa de Miguel Ángel, la Chiesa di Dante y llegando de nuevo hasta la imponente (por afuera) Catedral de Santa Maria del Fiore.
Cogemos más porciones de pizza, saludamos de nuevo a Brunelleschi y a la Roca de Dante y nos volvemos al piso, disfrutando del ambiente animado nocturno de Florencia, aquí no hay pandemia por lo que parece:
Brunelleschi sigue ahí, vigilando su obra maestra, su cúpula.