DIA 19 : UN PEDACITO DE LOS ANGELES, SANTA MONICA Y CAMINO A SOLVANG ✏️ Diarios de Viajes de USA

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Nos levantamos sobre las 8 de la mañana, al no tener desayuno incluido desayunamos cosas que llevábamos y salimos jopando para que diera tiempo al plan. Al salir de la habitación liquidamos la cuenta y le dijimos a la chica de recepción que si podíamos dejar el coche en el parking y ella nos dijo que hasta la hora que llegaban los otros huéspedes sobre las 15h que sin problema.
Dejamos el coche y nos fuimos todo paseo de la fama hacia adelante, al principio es tristísimo ver el paseo de la fama con casas homeless y con las estrellas sucísimas y sin ningún cuidado. Conforme vas avanzando hacia los teatros hay más vida y está más cuidado, hay muchas tiendas de souvenirs y de tours organizados. Hicimos este paseo bien tranquilos pues llevábamos un plano de donde estaba situadas algunas de las estrellas que queríamos ver, Marilyn Monroe, Elizabeth Taylor que esta junto a Richard Burton y muchos más. Nosotros teníamos como meta el teatro chino, cuando llegas al exterior, es curioso ver gente caminando que no mira hacia arriba sino hacia abajo buscando a nuestro ídolo de juventud o actual. Es un teatro donde personajes famosos han dejado sus huellas o algo mas (por ejemplo estrellas del western dejaban las huellas de sus armas), De mi visita destacaría dos curiosidades una lo pequeñísimos que tenía los pies Bette Davies o que los personajes de sagas ponen sus huellas y tod@s en conjunto y se encierra remarcando más el conjunto que el personaje individual, como Harry Potter o los héroes de Marvel
Despues fuimos al teatro Dolby el cual está formando parte de un centro comercial llamado Hollywood and Highland Center, sinceramente no lo sabía, lo cual me dejo bastante sorprendida y por más que imaginaba la ceremonia no veía como colocar lo que se ve en la tele. En primer lugar entras en una galería con una escalinata, la galería está flanqueada por columnas que siguiendo un orden cronológico sostiene el nombre de la película ganadora del Oscar y con el año correspondiente, como anécdota están desde 1928 y hay sitio hasta 2071.
Cuando subes la escaleras se va a dar una puerta que me dejo bastante fría, nadie diría lo que hay dentro. En vez de deshacer el camino, decidimos ir a la derecha y ver el centro comercial con las tiendas y restaurantes, y salimos al exterior atravesando una plaza al aire libre que forma parte del recinto. Deshicimos el camino y volvimos al hotel para coger el coche teníamos varios puntos que queríamos ver, partimos para downtown y vimos el City hall pero al ser sábado no pudimos entrar, pues estaba cerrado. Ah, aparcamos en W 1st St entre el Dorothy Chandler Pavilion y el Walt Disney Concert Hall y no vimos nada para pagar, ni nadie nos dijo nada, había más coches aparcados. Queriamos ver El Walt Disney pero como era normal estaba cerrado totalmente. Estaríamos como hora y media, ir al ayuntamiento pasear por los jardines de alrededor y por los rascacielos de la city, había varios rascacielos interesantes y como soplaba airecillo tampoco teníamos tanto calor.
Pusimos rumbo al Staples center que era lo que queríamos ver, ya sabemos que por dentro no porque había una competición de Monsters trucks y sinceramente jamás me podía imaginar las masas que mueve eso, gente uniformada con los cascos y coreando y animando fuera, no quiero pensar lo que se oiría dentro, si es que oyen ellos algo. El aparcamiento estaba dirigido y como todo son parkings subterráneos aparcamos en La Live parking, nos costó 10 dolares, pero era sin tiempo. Dimos la vuelta alrededor del estadio y nos hicimos fotos con las esculturas de NBA, aunque también hay personajes del mundo de la radio y televisión, boxeadores y jugadores de hockey.
Enfrente del pabellón hay un centro comercial, básicamente con restauración, comimos en el Smash Burger , nos quedamos flaseados pues fue carete para ser tres menús Burger, 81´50 dólares.
Cogimos coche y partimos a Santa Mónica, aparcamos lejos del muelle, como queríamos ir a la playa aparcamos por las calles de Washington, Idaho o montana, ahora no recuerdo creo que lo indiqué en el foro de los Ángeles, lo siento, pero, aunque puedo decir que un señor nos indicó que allí no se pagaba aparcamiento. En fin, nos podían las ganas y allí a trote gorrinera nos cambiamos, nos pusimos los bañadores y a la playa. Bajamos por un puente pasarela, cruzamos un parking y por una pasarela llegamos a la playa. Primero fuimos andando por la orilla hasta acercarnos lo que pudimos al muelle y a lo lejos ver la noria y poco más, volvimos y no me arrepiento para nada del rato que pasamos, aunque queríamos bañarnos y lo conseguimos, no pasamos de la cintura, el oleaje es tan fuerte que da miedo, la playa estaba llena de familias y todos los críos estaban en la orilla enfrascados en “sus tareas”….cuando mi hijo, que es mayorcico, vio que a poco que hundieras la mano, sacabas unos cangrejos que para mí parecían cucarachas marinas, se puso a meter las manos y los sacaba a puñados, pronto vinieron a dejarle cubos y palas y él sacando para todos, luego se metían un poco y los tiraba al mar y vuelta a empezar.
Si vais con chic@s merece mucho la pena. Mientras nosotros hablando con padres y preguntándonos de donde éramos y que hacíamos allí. En fin, hacia las 16´30 dejábamos la playa, pues debíamos dormir en Solvang. Pero aun nos quedarían algunas breves paradas.
Nuestro siguiente punto fue parar en Malibu Lagoon State Beach, la playa tiene una pequeña laguna hasta que llegas a ella. Está considerada como la primera reserva mundial de surf desde 2010 y se la conoce comúnmente como Surfrider Beach.
Continuamos por la Pacific Coast Highway, dejábamos a nuestro paso una variedad de playas que ya nos hubiera gustado parar pero el tiempo apremiaba y queríamos parar en la gran duna de arena, a un lado la playa, en medio la carretera y al lado de la montaña una inmensa duna, la gente se entretiene subiendo y luego baja rodando, nosotros contemplamos la grandeza del paisaje, un par de fotos y al coche.
Ya no paramos en ningún sitio más pues aún quedaban casi dos horas. Cuando llegamos a Solvang estaba anocheciendo ya pero enseguida encontramos el hotel, tiene parking propio. Dejamos todo corriendo y nos fuimos a cenar, encontramos abierto taco Rocco y cenamos allí, pagamos 60´80 dólares de los tres. Volvimos al hotel y oímos bullicio en el jacuzzi, mi marido paso del tema pero mi hijo y yo nos fuimos de cabeza. Otra vez rato súper agradable de charleta con los americanos, a las 23h salíamos del agua, duchita y a la cama. Un apunte, el hotel perfecto, la decoración pega con ese ambiente danés que te envuelve por todo, esa mesita con esos sofás orejeros (que están de lujo para consultar con tu wifi los planes del día siguiente) además de unas camas muy confortables. Día 10, hotel 10 y sueño 10 íbamos acabando y el viaje iba rodado, que más se podía pedir??. El hotel fue el Svendsgaard´s Danish lodge Americas Best Value inn (123´61 dolares)

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