Parece que esto se acaba… así que recogemos todos los aparatejos y los bajamos al coche. Como hoy toca empezar a cruzar Francia de nuevo para bajar hacia España antes de salir del hotel nos tomamos un café y un colacao en el mismo bar del hotel que nos cuestan 5 €. Tras hacer el check out y dar las gracias por todo tomamos rumbo hacia Burdeos que será la parada intermedia de vuelta a casa. Tenemos casi 900 kilómetros por delante y cerca de 9 horas. Así que sobre las 8:15 decimos adiós a colmar y a nuestra estancia en la Alsacia francesa. Y como no podía ser en Francia de otra manera al poquito de salir de colmar empezamos con las dichosas paradas en los peajes. Cómo puede costar tantísimo atravesar Francia con el coche.! Y encima muchas puertas de peaje teniendo que parar para pagar 2 € a lo mejor y así un montón de veces. Pero bueno no queda otra. Sí a la hora de comer paramos en una zona de servicio para tomarnos un sándwich y seguir camino. Así que poquito después de las 5 de la tarde estamos llegando a Burdeos. Y ya se va notando que vamos bajando hacia abajo y madre mía qué calor que hace. 30 y pico grados! Ya que Burdeos es una ciudad muy grande cuando elegí hotel decidí quedarme en las afueras en algún hotel que estuviese bien comunicado para llegar al centro para no meternos en todo el bullicio. Y el elegido fue el hotel Ibis Bordeaux lac. Lo cogí a través de booking. Y una noche nos costó 55 € contando ya las tasas turísticas. El hotel está justamente ubicado al lado del lago. Tiene parking gratuito privado al que solamente se puede acceder con el código que nos dan en recepción. Hacemos el check-in y como ya está todo previamente pagar a excepción de las tasas subimos a la habitación. Como hace tanto calor en la calle decidimos a guardar un poquito a que baje un poco la tarde. Y por fin una cama buena! Qué gustazo de cama y qué blandita! Al igual que la anterior Ibis que tuvimos en el Périgueaux la cama con un topper viscoelástico !La habitación del hotel sin muchos ornamentos pero lo suficiente para pasar una noche. Muy limpia.
Y como ya os digo sobre todo la cama buenísima! Vamos que nos tumbamos un rato y mi marido prácticamente se quedó Roque. Hacia las 18:30 o así decidimos ponernos rumbo hacia el centro de la ciudad. Como ya os dije este hotel está lejos del centro pero está genialmente ubicado para coger el transporte público. Según se sale del hotel a mano izquierda bordeando el lago a no llegar a 200 metros está la parada del tranvía. Las máquinas para sacar los tickets tienen opción en español y se puede pagar con tarjeta incluso un billete que vale poco más de 1 €. Compramos dos billetes de un viaje cada uno por 1,50 el billete. Importante que aparte de comprar el billete cuando se entra al tranvía hay que validarlo. Desde aquí hay que coger la línea c del tranvía en dirección Gare de begles. Y para llegar al centro de la ciudad bajar en la parada Quinconces. En una media hora o así estamos en el centro.
Solamente al meternos en el tranvía ya podemos ver lo cosmopolita que es esta ciudad y la cantidad de gente distinta y razas que se encuentran en ella. Así que llegamos a la parada del centro de la ciudad y bajamos. Es una ciudad super bulliciosa con gente por todos sitios, y nos damos cuenta que por desgracia es lo que no nos gusta a nosotros y nos vamos a encontrar por doquier. Decidimos ir lo primero a buscar dónde cenar ya que como aquí cenan tan pronto para que no se nos haga muy tarde. Mirando en Internet durante el viaje hacia allí había visto que hablaban muy bien del restaurante Melodie. Así que nos decidimos a ir a buscarle. Se encuentra en una estrecha calle peatonal justo detrás de la plaza de la bolsa. Una calle estrecha y llena en ambos lados de mesas y terrazas de restaurantes y más restaurantes. Llegamos y como es pronto tenemos sitio y nos sentamos en una pequeña mesita en la calle. Nos decidimos por el menú que tienen de 20 €. De primero foie micuit que estaba muy rico y de segundo pato aunque habiendo comido pato en otros sitios de Francia no era nada reseñable el de aquí.




Además a punto estuvimos de no llegar al segundo ya que es un edificio muy antiguo y empezaron a tener problemas con la luz ya que no hacía nada más que saltarles me imagino que por algún corto. De hecho vino un montón de gente a pedir mesa y les dijeron que no que estaban teniendo problemas. Y aunque tardaron bastante rato al menos no llegaron los segundos y pudimos acabar de cenar. De postre mi marido pidió una tarta muy rica y yo una crema brulée que también estaba muy buena
. El menú con el agua incluida. Obviamente con los problemas de luz no pudimos pagar con tarjeta y pagamos en efectivo. No cenamos mal pero la verdad las críticas tan buenísimas que tenían por internet creo que no se correspondían mucho con la realidad. He comido en otros sitios de Francia muchísimo mejor que aquí. Pero bueno al menos tuvimos que dar gracias que pudimos acabar de cenar porque yo me veía ya yéndonos a mitad de la cena y encima teniendo que buscar un restaurante a una hora ya más tarde que estaba todo lleno así que encima no nos quejaremos. Salimos de cenar y ya que detrás de nosotros esta la famosa Plaza de la bolsa nos acercamos hasta ella. Es una plaza muy grande y seguramente la más conocida de Burdeos dónde se encuentra el edificio de la Bolsa y justamente enfrente la fuente conocida como la fuente del espejo. Es una gran explanada que se encuentra justo al otro lado de la carretera enfrente del edificio y que normalmente tiene un palmito de agua.

De hecho cuando llegamos estaba llena de gente y de niños corriendo por encima de ella. Cuándo va a caer la tarde y el edificio de la Bolsa se va a iluminar y se ve una plataforma en la fuente que la deja plana y sin agua y esto hace que con las luces de la noche el edificio de la Bolsa se ilumine reflejado en ella. Como todavía queda un ratito vamos andando todo el paseo pegando al río. Por aquí pasamos por la puerta cailhu, que era la principal puerta de entrada a la ciudad
. Y casi enfrente el puente Pierre que consta de 17 arcos y que atraviesa todo el río Garona
. Por aquí nos metimos ya hacia dentro por los barrios buscando llegar a la Catedral y las iglesias pero el final nos damos la vuelta. La verdad que no sé si todo Burdeos será así pero esta zona se veía muy sucia y nos pareció un poco insegura incluso a mi marido que siempre es muy echado para adelante y la cagada soy yo y sin embargo vimos más de una pinta bastante rara y decidimos darnos la vuelta. De todas formas lo que pudimos ver de Burdeos no nos llamó la atención para nada. Lo único bonito el edificio de la Bolsa sobre todo al caer la noche al que volvimos andando ya que estaba a punto de hacerse de noche para verlo. Y esto sí es muy bonito….
Pero en general Burdeos no nos gustó y visto lo visto lo que habíamos visto por ese barrio decidimos no seguir mirando….. son sobre las 22:30 y volvemos a la plaza Quinconces para volver a coger el tranvía en dirección al hotel. Aquí tomamos de nuevo la línea C en dirección al Parc des Expositions y nos bajamos en la parada Pallais des Congres. Y de ahí en 200 metros volvemos a estar en el hotel y lejos del bullicio de la ciudad. Dentro de que a nosotros no nos gustan las ciudades grandes pero de todas las que hemos estado creo que está fue la que menos nos gustó ya que estaba llena de gente, de suciedad, todo estaba ya no antiguo sino como muy descuidado, e independientemente de que dentro de la ciudad haya muchas razas conviviendo juntas es que pudimos ver por muchos sitios gente un poco digamos no con muy buenas pintas e insegura así que ya estamos en el hotel y toca preparar las maletas porque esta vez sí que se acabó . mañana vuelta a casa.