Pues ya estamos de vuelta.
Han sido 17 días increíbles con sus respectivas “no noches”, en un país que aunque sabíamos que nos iba a sorprender, nos sorprendió aún más.
Han sido solamente dos intensos meses de preparación antes del viaje, poco tiempo sobre todo para conseguir “buenos precios” o mejor dicho, precios mas ajustados en alojamientos, quedaba poco y caro pero salvo alguna excepción, la gran mayoría fueron un acierto. También nos pilló el toro en lo relativo al alquiler del vehículo, suben de dia en dia, cuanto antes lo alquiles mejor.
En cuanto a precios en general, lo que ya sabemos todos, son muy elevados. Si queréis abaratar viaje, en los supermercados no hay tanta diferencia de precio con España, es más caro pero tampoco hay que asustarse, nosotros, como la mayoría de la gente que vamos por nuestra cuenta llevamos comida de España (½ litro de aceite, pasta, preparados de pokes, sopinstant, jamón serrano, lomo, queso, latas de atún…) y creo que nos equivocamos, nos sobró bastante comida, la gran mayoría de las cosas las puedes comprar allí, ahora sabiéndolo solo llevaría el aceite, latas de atún y algo de fiambre. El bonus es el más económico pero tiene poca variedad, nos gustaron más otros como el Netto y Kronan. Es difícil encontrar pan como lo conocemos aquí, de barra, o vas a primera hora o se acaban y solo hay tipo molde y la leche es complicadísimo encontrar brik que no sea fresca. En cuanto a cerveza, compramos varios botes en el aeropuerto de keflavik en el duty free que está justo al lado de las cintas donde se recoge el equipaje, es un supermercado sobre todo de alcohol, no recuerdo el precio de las latas pero creo que eran algo más económicas que en el Vinbudin, el único sitio donde luego se pueden comprar. En el Vinbudin salen aproximadamente a unos 4 euros la lata si no, os las van a vender en los hoteles a 10 €, como las llegamos a pagar nosotros.
El tiempo..., menos calor, nos ha hecho de todo. Llover, por suerte, muy poco pero tuvimos un día con mucha niebla (el que subimos al volcán FAGRADALSFJAL) , vendavales casi todos los días, tormenta de arena y bastante frío en general, entre 4 y 13 grados hemos rondado los 17 días, pero no nos podemos quejar ya que hemos podido seguir los planes que llevamos pensados.
Ropa hemos usado solo de montaña, pantalones de trekking, camisetas térmicas, forros, plumas y chaquetas de goretex para la lluvia y el viento…y para las cascadas que te empapas en casi todas. Zapatillas de montaña. Indispensable guantes, gorro de lana y sobre todo braga-buff para la cara. Ahh, recomendable llevar escarpines si pensáis bañaros en ríos termales o hot pop naturales.
Hemos reservado todos los alojamientos (menos uno que fue con airbnb y resultó ser el peor con diferencia) a través de booking, todos con baño privado y desayuno incluido en todos los que había opción. La gran mayoría han sido hoteles porque es lo que más quedaba, también hemos reservado algún apartamento entero y alguna guesthouse, en general todos muy bien, limpios y a destacar la comodidad de las camas.
Como veréis no hablo en el diario ningún día de sitios donde hemos comido... porque no comíamos

si hubiéramos parado a comer no habríamos hecho ni la mitad de lo que hicimos, desayunábamos bien y con algún fruto seco, barrita energética o un caldo caliente que venía de maravilla, tirábamos hasta cenar. Por cierto, un gran acierto fue llevarnos un termo. La cena la hacíamos en el alojamiento, con la comida que llevamos desde Madrid y la que compramos allí en los supermercados. Solo comimos fuera el último día en Reykiavik.
Paso a detallar nuestro viaje por si a alguien le puede servir. Una vez terminado creo que ha sido un poco exigente en cuanto a kilómetros (unos 4000), ha habido días demasiado cargados y cosas que hubiera quitado pero es muy complicado ajustar que da tiempo a ver cada día, cuántos kilómetros hacer y encontrar los 17 alojamientos, pero en general, estoy contenta con lo planificado.
