Esta excursión no te la puedes perder.
Reservamos con Calypso que nos vinieron a recoger al hotel. El barco era una pasada de grande y no había mucha gente. Lo primero dejar las chancletas y coger gafas y aletas. Nos dan una charla y nos dicen que nos van a llevar a bucear a tres sitios diferentes de los arrefices exteriores. Como yo había contratado una bautismo de buceo, me llevan a parte con otros 3 para explicarnos todo lo necesario. Mi inglés no es muy fluido pero se hace entender muy bien. Mientras a los que van a hacer snorkel les juntan para darles otra charla. Durante la media hora que estuve en el agua, una guía estvo en todo momento pendiente de los cuatro. Muy bien. Al subir al barco nos dieron café, té, pasteles y fruta. En la segunda inmersión hicimos snorkel con una guía que nos fué explicando la diferente fauna y flora que se podía ver. Genial. Al subir al barco habían puesto un buffet con la comida. No era muy variada pero había mucha cantidad y podías comer hasta reventar. La última inmerisón fué donde vimos los peces más grandes. En general la experiencia fué muy buena a pesar de que todas las charlas fueran en inglés y que no entendiéramos demasiado. El coral estaba super cerca y se veían un montón de peces de colores. Una fotógrafa estuvo durante las dos primeras inmersionea sacando fotos que luego las podías comprar. Nosotros compramos un USB con todas las fotos del día.

De vuelta al puerto nos dimos un paseo por Port Douglas y fuimos andando al hotel.