Buenos días.
Ayer estuvimos en Trillo. Desde hace tiempo teníamos ganas de ir para ver las cascadas del río Cifuentes a su paso por el pueblo. Y con las pasadas lluvias, pues nos animamos al fin. Todo un acierto. Estaban impresionantes, con una cantidad de agua pasmosa. En esta localidad, este río también se une al Tajo, igualmente supercrecido. La ruta de las cascadas es cortita pero preciosa, se accede mediante escaleras a ambos lados. También merece la pena entrar a la Iglesia para ver el Retablo.
Es un momento estupendo para visitar Trillo, aunque en fin de semana supongo que habrá mucha gente. Comimos en el Mesón Góngora, junto a las cascadas, un menú de 13,50 euros, muy correcto por el precio.