JORNADAS DEL LECHAZO DE ARANDA DE DUERO
Una cita ineludible con el sabor más auténtico de Castilla
Durante el mes de junio,
Aranda de Duero vuelve a vestirse de tradición para celebrar la
24ª edición de las Jornadas Gastronómicas del Lechazo Asado, reafirmando su condición de capital indiscutible del lechazo.
Siete asadores de prestigio ofrecerán a locales y visitantes una experiencia única a través del
Menú Jornadas Gastronómicas del Lechazo Asado, diseñado en exclusiva para esta ocasión. Por un precio cerrado de
55 € por persona, los comensales podrán saborear una propuesta donde el respeto por la tradición y la calidad del producto son protagonistas absolutos.
El ritual del horno y la cazuela de barro
Elaborado con cuartos de
lechazo IGP (Indicación Geográfica Protegida), el plato principal de estas jornadas rinde homenaje a la cocina más auténtica. El proceso, inalterado por el tiempo, comienza con una cazuela de barro, un fondo de agua, unas gotas de limón y sal. La carne se introduce en un horno de leña de encina, lentamente calentado hasta alcanzar los 180 ºC. Tras una cocción de hora y media y un dorado final al fuego directo, el resultado es un manjar de textura crujiente y sabor profundo, capaz de emocionar desde el primer bocado.
Creatividad al servicio de la tradición
Cada uno de los siete asadores participantes complementa el plato principal con una cuidada selección de entrantes, en perfecta armonía con vinos de la
D.O. Ribera del Duero. Estas son algunas de sus propuestas:
El 51 del Sol: esférico de queso de cabra o cigarritos de morcilla IGP de Burgos con manzana.
Casa Florencio: crema de pepino y aguacate con langostino o lasaña de lechazo.
Hotel Montermoso: vichyssoise con salteado de setas y mollejitas de lechazo, o morcilla de Aranda en texturas.
El Lagar de Isilla: brocheta de riñones con mahonesa de mostaza a la naranja o garbanzos de Valseca con manitas de lechazo.
El Ventorro: canelones de cordero al chilindrón con bechamel y cremoso de queso churro, o paté de hígado de lechazo con seta de cardo y mermelada de ruibarbo.
Restaurante Aitana: huevo a baja temperatura con micuit de pato y Pedro Ximénez o escabeche de mollejas con setas.
Asador Tudanca: empanada de morcilla con manzana o puerro asado con virutas de torrezno.
Una celebración que va más allá del plato
Visitar Aranda de Duero en junio es mucho más que sentarse a la mesa. Es formar parte de un homenaje colectivo a un producto que, aquí, es sinónimo de identidad. Durante estas jornadas, la ciudad no solo huele a lechazo: respira historia, cultura y pasión gastronómica.
Si el aroma no puede cruzar fronteras, la invitación sí: ven a vivirlo, a saborearlo, a sentir el calor del horno y la hospitalidad de una tierra que presume, con razón, de su lechazo.
Más información:
→ www.asohar.es
→ www.lechazo.es
→ www.arandadeduero.es