Buscando la China más tradicional. ✏️ Blogs de China

SEGUNDA ETAPA ---YUNNAN 11 dias por el pais del Sur de las nubes.


25 de julio ---

Nos despertamos ilusionados en la pequeña habitación. El dia promete.
Recogemos nuestras cosas y sacamos las maletas como podemos del pequeño, encantador y poco práctico Lost Garden.
En la calle ya nos espera la confortable sonrisa de Wang. Hoy toca long travel y parece que el desayuno va a tardar un poco, asi que maletas al coche y despedimos este entrañable rincón que ha sido nuestra casa en Kunming.
Mucho tráfico y muchos semáforos para salir de la ciudad. Pero ya en la moderna autopista los kilómetros empiezan a pasar muy deprisa. Pronto estamos entre verdes montañas con cultivos de arroz, tabaco, hortalizas y mucho maiz en los pequeños valles. Es un placer contemplar el paisaje desde la comodidad del coche. Y una maravilla cuando empiezan a aparecer las antiguas casas con las paredes decoradas según la tradición local.
Hacemos dos paradas para toilette ( que estaban muy limpias ) y para un buen desayuno de fruta, té y tortas recien hechas muy buenas.
Dejamos la autopista que sigue hasta Dali y viajamos más de 1 hora por carreteras locales que serpentean por el precioso paisaje. Todo muy verde y con el sol alternandose con brumas y algun chaparrón.

Son casi la una cuando llegamos al objetivo : Los Templos Taoistas de Weibaoshan.
No queremos perder tiempo comiendo y, con unas galletas que compramos en la autopista, comenzamos la excursión sin tener muy claro lo que ibamos a ver.
La montaña de Weibaoshan es el más importante centro taoísta de Yunnan y uno de los más importantes de China. La tradición habla de la presencia de monjes ya en el siglo II. Y también se habla del fundador del Reino de Nanzhao que recibió la ilumunación del Venerable Supremo Soberano ( una de las principales deidades taoístas). Parece clara la relación del Reino de Nanzhao y el taoismo.
La montaña en si misma es preciosa. Cubierta de antiguos y frondosos bosques que protegen los misterios del pasado. Y con un camino muy bien pavimentado que te acompaña a cada uno de los templos. Si dispones de todo un dia y el tema te apasiona, se pueden visitar hasta 15 templos . pero la ruta más habitual se limita a 6. Esto hicimos nosotros y tardamos más de 4 horas.


No voy a escribir más datos históricos ni a describir cada uno de los templos. Esto al final se acaba olvidando.
Pero seguro que nunca olvidaremos la vida, el arte, las emociones y devociones que han dejado aquí antiguos devotos, artistas y pensadores. Todo se manifiesta en los extraños dioses, en los tejados oscuros, en las pinturas de las paredes, las viejas maderas, los exquisitos y humildes jardines y las antiguas cerámicas.



El primer templo está dedicado a los Reyes Nanzhao. Todos tienen su imagen en el templo. y rodeados de una explosión de formas y colores, de jardines y humedades, esculturas y pinturas, olores de incienso, escaleras que suben y bajan y fanalitos rojos.



El segundo templo dedicado a la sabiduría y por tanto a todos los estudiantes.
Y el tercer templo, el de la gran camelia que tiene 400 años.



Y seguimos subiendo por el bonito camino. Despacio con la conciencia de estar en un lugar único.
Todos los templos tienen a alguién que cuida su mantenimiento. Sea una pequeña comunidad de monjes en los más importantes o sea una pareja de menudos ancianos que parecen estar aqui desde siempre en los templos más pequeños.


Ya en el último templo, las brumas se acercan y se convierten en una tormenta de verano con rayos y truenos y un buen chaparrón. Estamos un rato solos, refugiados bajo la vieja puerta , junto a dos expresivas ( por no decir otra cosa ) imágenes, escuchando la tormenta y realmenta nos parece estar en una antigua película china. Perfecto.


La película acaba, la tormenta cesa y hacemos el camino de vuelta en silencio ordenando sensaciones en el corazón.
Debo decir que en toda la tarde no hemos encontrado más de 20 personas. todos turistas chinos. Uno de ellos, un chico que viajaba con sus padres, nos preguntó amablemente y con mucha curiosidad porqué visitábamos estos templos y cómo sabíamos de su existencia. Después de nuestras entusiastas respuestas nos dió las gracias porque ,según dijo, ahora iba a valorar mucho más su patrimonio. Conmovedor !!!.

Ya en el parking, Wang contempla aliviada nuestra cara de satisfacción. Estaba un poco preocupada pues la lluvia había sido muy intensa. Y realmente en los 10 kilómetros que nos separan de Weishan vemos muchos desprendimientos en la carretera. Pero nada grave y las panorámicas del valle de Weishan nos parecen preciosas.



Son poco más de las 6 cuando llegamos a Weishan. Es un pueblo antiguo pero todo está muy conservado, pulcro y reluciente como si fuera nuevo.
Tenemos el hotel en la zona peatonal y nos vienen a recoger las maletas al parking como es habitual en los pueblos antiguos de Yunnan.
El hotel Sheng´Anju es una maravilla. Casa antigua exquisitamente restaurada toda de madera y muy bien decorada. Junto a la Torre Norte.



Rapidamente nos instalamos en la cómoda habitación. Y salimos expectantes a la calle bajo la luz del final de la tarde. Las calles del viejo Weishan son rectas, bien pavimentadas y con casas bajas de madera alrededor. En cada puerta una tienda de artesania local o una pequeña casa de comidas : en la entrada la olorosa parrilla y en el interior las grandes ollas con los caldos de verduras, carnes y los eternos fideos. Todo en un ambiente muy tranquilo y acogedor donde todos te saludan pero nadie te agobia.
La zona peatonal está limitada por las dos torres antiguas de la ciudad. Al norte la Torre Gongcheng y al sur la preciosa Tore Wenbi.



Hacemos alguna inevitable compra ( tacitas de té, vestidos para las niñas y un bonito cuenco de madera de bambú ). Y cenamos en un pequeño local de una amable familia ( carnes, verduras, patatas, queso ) Todo hecho a la parrilla al momento. Con 2 cocacolas 48 yuanes y un buen recuerdo.
En la calle ya estan las luces encendidas y las viejas torres lucen preciosas. Estamos un ratito andando de la torre norte a la torre sur saludando a los tranquilos vendedores que ya nos reconocen.
Y con la convicción de haber vivido un dia perfecto nos retiramos al precioso refugio.

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SEGUNDA ETAPA --- YUNNAN 11 dias por el pais del Sur de las Nubes


26 de julio ---

Hoy nos despertamos muy tranquilos y con la convicción de estar en la China que estamos buscando. Ayer fué un dia maravilloso, pero aún nos quedan muchos por delante.

Vamos a dedicar una parte de la mañana a conocer un poco más de Weishan.
Desde la terraza del hotel las vistas de la torre norte y los tejados del pueblo son perfectas. Y el desayuno incluido muy especial. Una exquisita selección de platos locales desconocidos y sabrosos nos regalan un rato inolbidable.


Ya en la calles relucientes por la fina lluvia volvemos a encontrar la vida tranquila y la belleza de un pequeño pueblo chino.
Las tiendas ya están abiertas y es muy fácil admirar las artesanias de la zona. Artesanias en madera, cerámica, los famosos tés de Yunnan ( siempre presentes ) y los preciosos tejidos de la zona. Pañuelos, ropa muy actual y los variados trajes y accesorios tradicionales.



Nos salimos un poco de la zona peatonal para descubrir la vida cotidiana. pequeñas fábricas de fideos, motocicletas transportando pollos, olor de parrillas calentandose y hombres y mujeres afanandose en las tareas cotidianas. Todo a pie de calle y con mucha tranquilidad.



Pero mi debilidad por la arquitectura me lleva de rincón en rincón descubriendo y fotografiando las casas tradicionales con los preciosos murales en blanco y azul típicos de estos pueblos de la etnia Bai. Es totalmente nuevo para nosotros y supone un maravilloso descubrimiento. El contraste de blancos, grises y azules contrastando con algun fanalito rojo es de una belleza perfecta.



Acabamos subiendo a la torre norte ( Gongcheng ) y estamos allí un buen rato grabando en la memoria las imágenes de Weishan que nos han llegado al corazón.


Son casi las 12 cuando dejamos el hotel y subimos al coche de Wang para otra nueva etapa.
Vamos camino a Dali, la ciudad més importante de la minoría Bai. Pero de camino queremos visitar otro pueblo especial - Dong Lian Hua - .Este pueblo está habitado principalmente por musulmanes de la etnia Hui. Se sabe que viven aquí desde que Kublai Khan conquistó esta zona y como buenos mercaderes comerciaron con éxito con el té y los caballos que tanta fama y riquezas han dado a esta parte de Yunnan.
El pueblo de Dong Lian Hua es tranquilo y silencioso. Está muy bien conservado lo que, según he leido, le ha valido muchos premios de patrimonio.
Nos llaman mucho la atención las largas paredes de adobe sin ventanas y de un color rojizo que, salvando las distancias, nos recuerda a la querida Marrakech.




Visitamos la casa tradicional mejor conservada que ahora es un museo. Tiene los típicos patios de una vivienda musulmana pero con tejados chinos. Una combinación deliciosa. Conserva, además una buena colección de cerámicas, muebles y objetos de uso diario que hacen muy interesante la visita.



Andamos un rato por el laberinto de calles solitarias ( casi olvidamos estar en China ) buscando la antigua Gran Mezquita de madera. Es impresionante la belleza de la vieja construcción. Por desgracia a esta hora está cerrada y no podemos ver el interior que seguro vale la pena.



Ya en el coche encontramos a Wang muy ilusionada . Ha descubierto que entre hoy y mañana se celebra la Fiesta de la Antorcha. Por lo visto es una fiesta muy importante para la etnia Bai que vive en esta zona de Yunnan. Wang es de Guilin y, aunque ha hecho bastantes rutas por aqui, nunca coincidió con la fiesta.
Nos habla de la fiesta con tanto entusiasmo que ya tenemos un objetivo más para mañana.

El camino hasta Dali es muy corto. Pronto estamos cruzando el nuevo Dali. Nos parece una ciudad bastante grande ( China ). Esto si, aquí los edificios no son grises sino blancos. Creo recordar que BAI significa BLANCO.
Detrás de los edificios vemos las primeras imágenes del lago Erhai, el lago de Dali. Todo bañado en una luz grisacea pero intensa que hace destacar los verdes de los campos con una perfecta armonía.
Un poco más al norte y llegamos al viejo Dali. Aquí vamos a vivir dos dias y ahora pienso que podíamos haber estado mucho más.
Son las 3 de la tarde cuando llegamos al Yunxi Boutique Hotel. Es un hotel moderno y luminoso muy bien atendido por unos encantadores jóvenes. Lo mejor la ventana de la habitación frente a la Puerta Este que con sus fanales va a iluminar nuestro descanso nocturno.


Despedimos a Wang hasta mañana. Ella va a investigar cómo vivir la Fiesta de la Antorcha. Y nosotros salimos buscando un lugar donde comer. Sabemos que ya ha pasado la hora pero entramos sin pensarlo mucho en un restaurante donde la amable familia se desvive ( otra vez ) por servirnos una exquisita comida. No hablan inglés pero nos preparan un plato de pescado del lago con verduritas y fideos muy bueno. Y para esperar una especie de crepe- tortilla de patata exquisita. Todo entre sonrisas, fotos y miradas de complicidad. Encantador y muy barato.



Ahora vamos a conocer las calles de Dali. Otra vez casas bajas muy bonitas pero aquí se nota que el turismo tiene más importancia. Hay mucho comercio ( más masificado ), muchos restaurantes, mucha gente y un poco más de ruido. Pero tiene el encanto de un especial pueblo de vacaciones. Y a cada paso nos encontramos con los puestos que venden los típicos pastelitos de flores. Los de rosa nos parecieron deliciosos.
Al final de las calles que miran al oeste se ven muy cerca los montes Cangshan, telón de fondo siempre verde de la ciudad.





En seguida dejamos la zona más comercial y vamos buscando rincones históricos de la que se supone es una de las ciudades más antiguas de Yunnan.
Caminando hacia el sur llegamos a la Torre de las Cinco Glorias, centro de la ciudad antigua y donde los reyes Nanzhao celebraban sus ceremonias más importantes, Ya muy cerca esta la Puerta Sur, límite de la antigua Dali.
Ahora está a tope de turistas y fotógrafos tratando de captar el pasado escondido. Pasamos aquí un buen rato contagiandonos del ambiente de fiesta que se respira.




Ahora ha salido el sol y la luz de tarde es preciosa. Andamos poco a poco hasta la Torre Norte. Aquí hay menos comercios y muy poca gente. Asi que subimos al primer piso desde donde vemos por primera vez las 3 Pagodas de Dali en la lejanía.
Nos quedamos sentados en la torre compartiendo lo que podemos con los pocos visitantes. Basicamente familias con niños curiosos y juguetones. Y el cielo se va apagando y viene el guarda que nos dice que debe cerrar la torre.


Caminamos tranquilos y satisfechos hasta el hotel. De camino compramos nuestra indispensable fruta fresca y nos dormimos vigilados de cerca por la Torre Este.



27 de julio ---

El dia amanece muy luminoso en la bonita habitación del DALI YUNXI HOTEL. Un buen desayuno en el pequeño patio bien servido por los risueños anfitriones.
En el vestíbulo ya nos espera Wang con un detallado plano para disfrutar de la Fiesta de la Antorcha. Pero esto será por la noche. Ahora vamos a hacer un prometedor recorrido por los alrededores de Dali.

Salimos por la puerta este y enseguida nos encontramos en pleno campo. Todo está lleno de huertos y cultivos de una gran variedad. Arroz, maiz, todo tipo de hortalizas y muchos campos de rosas para elaborar los típicos pastelitos.
Hoy el cielo está bastante despejado y luce un azul deslumbrante, limpio, propio de las zonas altas.
Olvidé comentar que Yunnan se encuentra a una altitud que va desde los 1.900 metros de Kunming hasta los 3.200 de Shangrila. El valle de Dali donde estamos ahora tiene unos 2.100 metros y se nota en la pureza del aire y la luz.
Nos acercamos al lago Erhai que ocupa una buena parte del valle. Pasamos pequeños pueblos de hortelanos y pescadores con pequeños mercados a pie de carretera donde venden sus productos recien recogidos.
Cerca del lago hay algun resort para turistas muy agradable que no estropea para nada la armonía del paisaje.
Pequeña parada junto al lago Erhai.




Volvemos al interior para visitar el pueblo de Xizhou. Pequeño pueblo donde la cultura y la arquitectura Bai luce en todo su esplendor. Todo el pueblo está lleno de antiguas casas de los señores locales y muchos pequeños templos con una variada iconografía, pues parece que cada pueblo venera sus propios dioses.




Pero este especie de museo costumbrista tiene el plus de estar lleno de vida. Vemos la gente en sus actividades cotidianas conviviendo con los visitantes fotografiando rincones increibles. Muchas de las casas antiguas tienen abiertas las puertas y se te invita a entrar y admirar los viejos patios más o menos conservados.
Pasamos aquí buenos momentos mientras las calles se van llenando de gente y las tiendas abren sus puertas ofreciendo preciosas artesanías. Casi imposible resistir la tentación.






Ahora vamos al pueblo de Zhoucheng. Esta justo al pie de los montes Cangshan y la mayoria de sus calles son un poco cuesta arriba.
Es en este pueblo donde más contacto hemos tenido con la etnia de los Bai. Hay mucha gente en las calles y la mayoria visten su traje tradicional. El ambiente es encantador y la gente muy amable.
Pasamos mucho tiempo en el increible mercado contemplando y fotografiando mercancias y vendedoras.



Contemplando la variedad de peces del lago como van saltando de uno a otro recipiente.




Me pareció muy especial ver como llevan a la espalda la cesta - mochila y la van llenando con sus compras. Sin plásticos ni bolsas. Esto luego lo vimos en todos los mercados. Encantador y sostenible.




Subimos hasta la plaza, centro de reunión y centro de la vida del pueblo.
Hoy está especialmente engalanada para la Fiesta de la Antorcha de esta noche.. Todo tiene un encantador aire de fiesta de pueblo.




Los viejos y enormes árboles de la plaza protegen silenciosos a locales y visitantes. Todo el mundo está alegre y con ganas de compartir su fiesta.




Zhoucheng es conocido por su producción artesanal de batik. Las preciosas telas azules que vemos en todas las tiendas de la zona se fabrican aquí. Supongo que el azul estará relacionado con los murales de las viejas casas pero no he conseguido confirmarlo .
Visitamos un taller museo y compramos ( nos vendieron ) batiks en la calle.




Se nos hace muy difícil dejar Zhoucheng. Creo que aquí hemos encontrado mucho de la vieja esencia china que buscábamos en este viaje. Y estas fotos de ancianos revolucionarios son una buena muestra.




Ya son más de las 2 de la tarde. Ya viene Wang a ver donde nos hemos metido. No os olvideis de la fiesta !!!.
Pero todavia nos queda otra esperada visita - El templo Chongsheng y las tres Pagodas -
Recuerdo que fué precisamente por una foto de este templo que supe que queria ir a Yunnan. Ahora voy a descubrir que la foto corresponde a la entrada inferior del templo y es una perfecta reconstrucción ( años 80 del siglo XX ) de una puerta tradicional de arquitectura Bai. Está claro que muy antigua no es, pero en belleza nada la supera.

Wang nos deja en la gran explanada delante las taquillas del templo y quedamos a las 6.30 en el hotel.
Entrada gratis otra vez para mi marido y reducida para mi.
El complejo del templo tiene una estructura escalonada. Amplias escaleras unen los distintos Pabellones de los templos, todos con magníficas imágenes y pinturas de este peculiar budismo local.
Hay muchos visitantes y parecen todos muy devotos. La gente reza, hace ofendas y quema incienso con devoción.

Vamos a empezar la visita por el templo de arriba y para subir tomamos el bus ( de pago ) que hace el trayecto de templo en templo.
Arriba la vista es muy bonita. Detrás de los tejados vemos el viejo Dali y el lago Erhai.



El Gran Pabellón dedicado al Sakyamuni luce espléndido bajo el sol de tarde. Los colores vivos , el olor a incienso y el Om Mane Padme Om llenan de vida al templo.




Dentro del pabellón mucha gente rezando y curioseando. Las imágenes del Buda relucientes. Un budismo de lujo (tal vez demasiado ).



Buscando más calma vamos descendiendo poco a poco las escaleras atravesando Pabellones dedicados a otras divinidades budistas. Recuerdo la preciosa y venerada Guanyin.
La luz sigue siendo espectacular. Creo que era el cielo más azul de todo el viaje.




Y por fin llegamos a la famosa puerta de entrada al recinto que para nosotros será la salida.



Aqui otra vez el bus hasta la otra visita - Las Tres Pagodas- . El símbolo de Dali.
Estan rodeadas por unos refrescantes y cuidados jardines. Un recuerdo para las Pagodas de Xian tan parecidas. Y unas preciosas fotos aprovechando la tarde luminosa.




Ya en el parking recordamos que no hemos comido y picamos unos pinchitos y fruta pues no tenemos tiempo para más. Hoy el dia va siendo más lleno de lo habitual, pero merece mucho la pena.
Dali está muy cerca, pero cogemos un tuc tuc para llegar puntuales a la cita con Wang y la fiesta.

Pequeño descanso en la habitación y nos reunimos los tres y nos cuenta Wang que la fiesta se celebra en muchos sitios simultaneamente. Cada pueblo, cada barrio y hasta alguna calle organiza su propia fiesta.
La Fiesta de la Antorcha parece que está relacionada con el arcaico culto al fuego. Durante el dia se preparan grandes antorchas de madera decoradas con frutas y colorines. Se ponen de pie en medio de la plaza y por la noche se encienden en un ritual para alejar todos los males. Aparte la gente enciende sus pequeñas antorchas y danzan alrededor de la gran Antorcha.
Nosotros durante todo el dia hemos estado viendo el proceso de preparación de las antorchas. Los hombres van atando las maderas, las mujeres preparan la decoración y todos juntos levantan y sujetan el artefacto hasta la hora del encendido. Y esto lo hemos visto muchas veces. en todos los pueblos pequeños y en todas las plazas de los más grandes. Todo el mundo participa.






Decidimos no coger el coche pero alejarnos un poco de la zona más turística. Wang proponeir al barrio oeste en la calle que sube ligeramente hacia la montaña. Y asi, cuando el sol se despide nosotros cruzamos la Puerta Oeste y nos mezclamos con la gente ansiosa y festiva.
Pronto empiezan a arder las primeras impacientes hogueras y los juegos de fuego se desbordan.




El sol ya no alumbra pero las calles estan llenas de luz, de cantos y de danzas de los habitantes de Dali.




Acabamos el intenso dia cenando raviolis los tres juntos encantados con las intensas experiencias que hemos vivido entre los Bai habitantes de Dali.

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SEGUNDA ETAPA --- YUNNAN 11 dias por el Pais del Sur de las Nubes.



28 de julio ---

Otra vez el pequeño dolor de una despedida sumándose a la ilusión de un nuevo encuentro.
Supongo que esto está siempre presente en el corazón del viajero.
Pero en el dia de hoy somos más conscientes que otras veces de que vamos a dejar atrás un pequeño rincón de China que aún tiene mucho para ofrecernos. Muy buenos recuerdos y algo de nostalgia cada vez que nos acordamos de DALI.

Hay que seguir. Y bien pronto estamos contemplando desde la ventanilla del coche los verdes campos salpicados de blancos pueblos de la llanura de Dali. Un rato de autopista y pronto encontramos la estrecha y sinuosa carretera que nos lleva al pequeño y escondido valle de Shaxi.

Este es un rincón peculiar por su importante pasado en la ruta del TË y los CABALLOS que tanta importancia tuvo en la economía y costumbres de la zona. La ruta comunicaba Yunnan con el Tibet. Los tibetanos recibían el preciado té de Yunnan y a cambio los valiosos caballos criados en las montañas llegaban a las tierras de Yunnan. Esto abrió una importante ruta desde el Tibet hasta el sur, cruzando todo Yunnan y llegando hasta Birmania, Vietnam y Laos.
Y el pequeño pueblo de Shaxi conserva todo el recuerdo de una de las paradas de esta antigua ruta.

Pero antes de llegar al pueblo tenemos una visita de esas que tanto nos gustan : La Montaña de SHIBAOSHAN y sus antiguas cuevas - templo budistas.
Son poco más de las 10 cuando llegamos al parking de la visita. Otra vez un dia soleado pero con aire fresco de montaña. Compramos la habitual entrada gratis y aqui tambien nos subimos a un pequeño bus que empieza a serpentear despacio por la muy estrecha carretera. Los curiosos turistas locales que comparten el viaje con nosotros nos indican como pueden que no nos bajemos hasta el final. Muy buen consejo pues así nos queda lo mejor para la vuelta.

Llegamos a un amplio parking en plena montaña y gracias a los planos que hay descubrimos que estamos en el inicio del camino al Templo Shizong, el de la campana de piedra.
Andamos como una media hora por un bosque totalmente virgen. Vemos orquideas y flores desconocidas. Grandes mariposas y cantos de pájaros nos acompañan. Algun visitante nos adelanta de vez en cuando y así confirmamos que vamos por buen camino. El último trecho es muy empinado pero ya pronto divisamos las extrañas rocas del templo.


Primero la gran roca en forma de campana y un poco más arriba las cuevas llenas de preciosas imágenes esculpidas.





Vamos pasando de una a otra cueva ( hasta ocho ) contemplando las bien conservadas esculturas de reyes y dioses que tan bien sirven para ilustrar la historia de este pueblo. Datan básicamente de los siglos VIII y IX y son realmente como una fotografía de personajes y vestidos de la época.




Las vistas de la montaña son espectaculares y nos quedamos un buen rato disfrutando este remoto rincón.



El regreso se hace por otra ruta más corta y enseguida llegamos al parking. Los buses van llegando y partiendo continuamente aunque no esten llenos y así pronto nos bajamos donde suponemos estará el otro importante templo : El Templo BAOXIANG.

En este aparcamiento hay unos cuantos chiringuitos que huelen de maravilla. Compramos las típicas bebidas isotónicas que nos devuelven la energía y unas tortas de cúrcuma recién hechas con muy buen aspecto...... Pero nos tendremos que conformar con el aspecto, pues el gran mono que por lo visto nos estaba vigilando se nos llevó la bolsa entera sin darnos tiempo a reaccionar.
Asi que empezamos a subir las escaleras al templo ligeros y bien vigilados por la colonia de monos por si guardabamos más comida.
Aquí es todo cuesta arriba con unas empinadas escaleras. Por suerte estamos a la sombra de unos enormes árboles y el entorno es precioso.
Llegamos al último recodo y la visión es extraordinaria. Una combinación perfecta de naturaleza y arquitectura.



Las gigantescas rocas protegen al templo y a las veneradas imágenes budistas. El Gran Buda, Sakyamuni y sus discípulos, el Buda Feliz y especialmente la adorada Guanyin forman un conjunto imposible de describir.





En el templo hay cantos, rezos y grandes humaredas de incienso y arriba, en la roca una pequeña cascada salpica de humedad y vida este increible rincón.




Y de nuevo debemos hacer el gran esfuerzo de volver atras. Bajar es muy fácil. Y un minibus ( estamos solos ) nos devuelve a la entrada donde, como siempre, aparece la sonrisa aliviada de Wang cuando nos ve llegar tan felices.
Y en 20 minutos ya estamos aparcando en el pequeño pueblo de Shaxi .
Este si es un pueblo realmente pequeño y que conserva a la perfección su vieja esencia. Tanto es así que no se permite ningún tipo de vehiculo en su casco antiguo. Y para llegar al hotel nos toca arrastrar nuestros maletones por unas calles con un precioso ( y poco práctico ) empedrado medieval.
El esfuerzo merece la pena. El hotel SHAXI CATO´S INN es una maravilla. Habitación amplia y un bonito balcón sobre sobre los grises tejados y con el rio y los montes al fondo.
Aunque son casi las 4 de la tarde podemos comer unos bocadillos ( poco chinos ) muy ricos en la plaza del pueblo. Mientras vamos viendo los trabajadores atareados en limpiar con agua a presión los restos de cenizas de la fiesta de la antorcha que celebraron ayer.



Los dos edificios que dan caracter a la plaza de Shaxi son realmente peculiares y únicos.
El Templo Xiangjiao que había pertenecido al budismo Azhali ( tantrismo y chamanismo ). Ahora es como un museo y aún conserva preciosos frescos en sus paredes.



Pero lo que realmente da caracter a la plaza es el extraño edificio del teatro Sideng. No pudimos visitarlo por dentro pero su imagen sugerente será para nosotros el símbolo de Shaxi.




Además de la plaza, vale la pena pasear sin rumbo por las tranquilas calles de Shaxi. Casas antiguas de madera, jardines, canales de limpias aguas y pequeñas tiendas de artesania donde es muy fácil comprar.




Llegamos pronto a las puertas de la muralla y, al cruzarlas ya nos encontramos en pleno campo.




Caminamos hasta el rio y el viejo puente que cruzaron durante años las antiguas caravanas de la ruta del té y los caballos. Ahora cae una fina lluvia y el ambiente es fresco y brumoso. Junto al rio muchos caballos nos recuerdan viejas historias. Vemos algun turista paseando en caballo. Y vemos un verde paisaje de campos de tabaco, maíz y arroz que parece cuidados como jardines. Naturaleza y tranquilidad en este pequeño pueblo.





La luz se va apagando, la tarde se despide y debemos poner fin a esta relajante visita. Volvemos a la plaza, ahora con el teatro iluminado y decidimos cenar en el bonito restaurante con la ventana que da a la plaza, La comida es deliciosa, los camareros muy amables y da gusto contemplar de cerca la vida de la plaza. La gente que pasa nos saluda, nosotros correspondemos. Tan relajados estamos que tardamos en comprender que somos la atracción de la plaza y un buen objetivo de las cámaras de los paseantes. Al final hasta el cocinero deja su cocina y nos pide permiso para hacernos la foto. A cambio nos regala unas deliciosas galletas.




Encantador Shaxi. Muy lejos de la China difícil, hermética o masificada que temiamos encontrar.
Buen descanso en el tranquilo hotel. Mañana tenemos una larga y emocionante etapa.

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