MYANMAR: Un país que disfrutar ✏️ Blogs de Myanmar

Nos levantamos en Yangon sobre las 7:30 y bajamos a desayunar al increíble buffet del hotel ( el mejor desayuno de todo el viaje, sin duda).
Siguiendo la tónica general de los últimos días, estaba lloviendo, pero como era el último día y la lluvia no nos iba a impedir echar un vistazo al centro de la ciudad, cogí un impermeable y mi mujer pidió un paraguas y pidiendo un taxi en la puerta del hotel nos fuimos hacia el centro de la ciudad, buscando el recorrido a pie que aparece en la Lonely Planet.



La lluvia condicionó un poco la situación, ya que en un primer momento nos habíamos planteado coger el tren e ir a Bago o hacer el trozo abierto de la Circle Line, pero al final fuimos a lo seguro y nos quedamos en Yangon centro.

En total, entre una hora y media y dos horas andando bajo la lluvia, con alguna que otra parada para descansar y resguardarnos de la lluvia y donde pudimos observar, como el título de esta etapa dice, que aunque los europeos hace tiempo que se fueron de Myanmar, los edificios aún perduran y se están dedicando a adecentarlos y renovarlos, con lo cual se queda una mezcla de decadencia y "renacer" de la ciudad, que a nosotros nos encantó. Nos gustó mucho más que Mandalay.




Después del circuito, que empezó en la Sule Pagoda y pasó por los edificios más característicos del centro de Yangon, muchos de los cuales son herencia de las construcciones británicas que quedaron atrás y que son utilizados como edificios gubernamentales a día de hoy y están abiertos de cara al público local para realizar sus actividades que toquen a cada edificio, nos fuimos dirección el Mercado de Bogyoke.






Para no ser menos que los otros días, yo que iba con mi impermeable, me calé hasta los huesos. Me calé tanto que en la primera tienda que vendían camisas y camisetas me compré una y me la puse directamente allí ante la atónita mirada de las vendedoras y sus amigas


Después de ésto estuvimos dando una vuelta por el mercado comprando recuerdos para amigos y familia y cruzamos al Nuevo mercado de Bgyoke (como un centro comercial de aquí,con precios de aquí también! totalmente prescindible) donde había unas paradas de comida que se ve era un street food festival y probamos una cosa de allí otra de allá y nos dimos por comidos. Buscamos una parada de taxi y para el hotel, donde nos preparamos la maleta y, aprovechando que había parado de llover y el sol lucía radiante, nos bajamos a probar la fantástica piscina del hotel.

Después, odisea para ir a cenar. Resulta que buscamos en Trip Advisor un restaurante. EL restaurante aparecía en Google Maps en un sitio, relativamente cerca del hotel, sobre 8-9 minutos en coche, pero en la página web se ve que se olvidaron de actualizar la dirección. Total, cuando llevábamos 25 minutos en el taxi se me ocurrió mirar el google maps y descubrí que estábamos a las afueras de Yangon Se lo comenté al taxista pero el hombre decía que íbamos bien (claro, seguía la dirección de la web) yo le decía que no podía ser mostrándole la dirección real...un show para finalizar nuestro viaje
Al final, cuando llegamos al sitio que la página web decía que estaba el restaurante y no encontrarlo, le dijimos que nos llevase al thai que habíamos probado la primera noche y allí que nos fuimos.

Después de una buena cena, ya nos marchamos a descansar para levantarnos prontito y volver a casa!

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A las 6:30h estábamos ya camino del aeropuerto ya que nuestro avión salía dirección Bangkok a las 09:30h

Cuando llegamos a la facturación, la primera sorpresa;no nos dejaban facturar las maletas a destino, es decir, a Valencia. Decían que sólo podían facturarlas a Frankfurt y que ahí, tendríamos que recogerlas en las cintas, pasar otra vez la aduana y volver a entrar. Le dijimos que ni de coña, que en Frankfurt , en teoría, estábamos sólo 1:45 y si hacían eso no nos daba tiempo, y ellos erre que erre. Así que le dije que llamase a su jefe para hablar con él y explicarle la situación. Resulta que había huelga de Lufthansa y desde Lufthansa pedían que no se facturasen las maletas a destino. Nosotros sabíamos lo de la huelga pero en la página web nos mostraba que el avión iba a salir a la hora y eso era lo que le mostrábamos.

Al final y no sin luchar, nos dijeron que bajo nuestra responsabilidad nos mandaban las maletas a Valencia, pero tuvimos que incluso quitar las etiquetas que ponen en las maletas un par de veces porque nos negábamos a que nos las mandasen a Frankfurt.

Finalmente en Frankfurt estuvimos casi 4 horas, porque el avión llegó antes de lo previsto y el vuelo de vuelta a Valencia se retrasó y además iba lleno porque habían juntado 3 o 4 aviones. Que había gente en ese avión que llevaba todo el día en el aeropuerto, así que nos dimos por satisfechos.

Y en Bangkok, lo de siempre, carreritas a tope. Esta vez al menos no estábamos solos ( quién no se consuela es porque no quiere ) porque había otra pareja de alemanes que también iba a coger el mismo vuelo y ahí que nos cruzamos medio aeropuerto echando el hígado. Una bonita forma de empezar la mañana

Menos mal que luego en el avión nos dieron de comer bien (varias veces) y recuperamos fuerzas

Y a las 12 de la noche hora española llegábamos reventados después de tantas peripecias pero con una sonrisa de oreja a oreja por el maravilloso viaje del que habíamos disfrutado.



Estuvimos preparando el viaje durante mucho tiempo y el sabor de boca que se te queda es muy bueno una vez visitas el país. Siempre hay cosas que se pueden mejorar, lógicamente pero a día de hoy, y después de recordar todo el viaje una vez más y volver a ver las más de 2000 !!! fotos que tengo en el ordenador, no cambiaría nada de lo que hicimos allí.

Si te gusta el sudeste asiático, las pagodas, los templos, las "piedras" y la gente muy amable y con una sonrisa en la cara siempre, Myanmar es un país que has de disfrutar alguna vez!!

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