Dos semanas en Pirineos franceses ✏️ Blogs de Francia

Los dos días siguientes los dedicamos a conocer Oloron Ste-Marie y los pueblos de los alrededores. Oloron es un pueblo agradable, con un barrio antiguo pequeño, pero bonito. La catedral tiene una portada románica interesante.
Es el pueblo más grande de esta zona y se encuentra bien situado entre los valles de Aspe y Ossau, pero da la impresión de haber tenido tiempos mejores.
*** Imagen borrada de Tinypic ***

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De Oloron nos fuimos a L'Hôpital-Saint-Blaise para visitar su iglesia románica. Tanto esta iglesia como la catedral de Oloron son patrimonio de la Unesco porque forman parte de las iglesias del camino de Santiago.
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Iglesia de L'Hôpital-Saint-Blaise
La sorpresa de este día fue un hallazgo casual. Al salir de L'Hôpital-Saint-Blaise en dirección de nuevo a Oloron nos llamó la atención un alineamiento de placas de mármol y un cartel en el que leímos algo relacionado con republicanos españoles. Se trata de los restos de un campo de concentración, que se encuentra en Gurs. Este fue uno de los campos donde recluyeron a los refugiados españoles que llegaron a Francia al inicio de 1939, tras la caída de Barcelona. Del campo queda poco, pero han preparado un circuito donde explican y se recrean las distintas instalaciones.
Es muy curioso que en toda esta zona del Pirineo francés se encuentran placas y monumentos de homenaje a los republicanos españoles. En España he visto pocas
*** Imagen borrada de Tinypic ***

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El día siguiente decidimos tomarlo con tranquilidad. Subimos al Plateau de Bénou y al col de Marie- Blanque y dedicamos la mañana a pasear tranquilos.
Por la tarde a recoger todo para irnos al día siguiente a nuestra próxima casa en Aspin-en-Lavedan.
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Col de Marie-Blanque
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Placa conmemorativa en el col de Marie-Blanque

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Este día estaba destinado al cambio de casa desde Buzy a Aspin-en-Lavedan, cerca de Lourdes. La casa elegida es la gîte de madame Virginie Fontan, una casa para dos personas, 390 Euros la semana más taxas. Su página web: www.gites-de-france.com/ ...oprietaire.
La casa está muy bien situada para visitar los valles de Azún, Cauterets, Gavarnie, Luz-Saint-Sauveur y el Pic de Midi de Bigorre. Está equipada con todo lo necesario, con jardín, Wifi.
La señora Virginia es portuguesa, encantadora. Nos recibió con unas bebidas frescas en su casa, en todo momento estuvo pendiente de lo que pudimos necesitar, pero sin entrometerse. Habla perfectamente español y lo facilita todo mucho. Al venirnos nos regaló vino de Oporto. En su terraza compartimos alguna tarde de conversación con otros huéspedes franceses, ya que Virginia nos invitó a todos a tomar un aperitivo. Por todo esto la casa es muy recomendable.
Nos decidimos a hacer la carretera del col d'Aubisque, preciosa. Hay que ir con cuidado por la cantidad de ciclistas que suben y bajan.
Col d'Aubisque con las tres bicicletas

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Al llegar a las cercanías de lourdes nos sorprendieron los destrozos de las riberas de los ríos y alguna carretera cortada, debido a las inundaciones recientes. Aún así sólo está cortado el acceso al puerto de Tourmalet y Pic Midi de Bigorre desde Luz-Saint-Sauveur hasta Barèges. Este acceso hay que hacerlo por la carretera de la estación de esquí La Mongie, desde Bagnères de Bigorre.
El día se fue en llegar, ir de compras a un Carrefour cercano e instalarnos. Al día siguiente íbamos a hacer una excursión al Pont d'Espagne, así que nos acostamos pronto.

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El día amaneció soleado y nos pusimos pronto en marcha hacia Cauterets, desde donde se accede al paraje llamado Pont d’Espagne. Nos paramos en Cauterets para comprar unos buenos mapas de esta zona e informarnos en la oficina de turismo sobre el estado de la ruta que pensábamos hacer. Era muy tarde cuando llegamos porque la carretera está desviada por una pista. En esta zona los daños de la riada son importantes, con carreteras casi desaparecidas en algún tramo, pero se puede pasar. El pueblo es muy bonito, con muchos establecimientos termales y hoteles decimonónicos.
Subimos con el coche hasta el aparcamiento del Pont d’Espagne y pagamos los 5 euros por dejarlo 12 horas. En este aparcamiento está la cabina del funicular que sube hasta el puente. Después se puede coger un telesilla que lleva al refugio y lago de Gaube.
Cogimos nuestras mochilas y a subir. El Pont d’Espagne y el lago de Gaube son probablemente uno de los sitios más bonitos que hay en los Pirineos. Se puede hacer una excursión de unas dos horas hasta el lago con niños, la pendiente no es muy pronunciada y al final se puede comer en las praderas de alrededor del lago. Nosotros seguimos en dirección al refugio de Oulettes de Gaube, al que llegamos después de una caminata de unas tres horas. Las vistas del macizo de Vignemale sobrecogen.
El tiempo amenazaba tormenta y decidimos no entretenernos mucho arriba. No nos libramos del agua. Comenzó a llover en el lago y no paró en una hora y media. Al llegar al aparcamiento nos cambiamos algo de ropa seca y de vuelta a la casa. Estábamos cansados y con mucho frío para pasear por Cauterets, que era nuestra intención inicial. Será en la próxima visita. No tenemos fotos del pueblo porque las habíamos dejado para la vuelta.
Llegamos a la casa y gracias al empeño de Virginia las botas, chaquetas y toda la ropa estaba limpia y seca para la mañana siguiente.


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Pont d'espagne


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Lago de Gaube

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Refugio de Oulettes de Gaube

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Macizo de Vignemale

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