Suiza. 13 días ✏️ Blogs de Suiza

Decidimos ver Lucerna de camino a Berna. Desayunamos en la estación del tren y nos fuimos a Lucerna. Dejamos las maletas en las taquillas de la estación y en la oficina de Turismo nos indicaron qué podíamos ver en unas cuantas horas. Es una ciudad que parece sacada de un cuento. Los dos puentes de madera son una maravilla. Paseamos por el casco antiguo y subimos a la muralla desde donde se veía toda la ciudad. Sudamos la gota gorda para subir a las torres (por el calor y las escaleras), pero valió la pena. Comimos algo en el Coop y seguimos paseando por el centro. Pasamos un día muy agradable. Intentamos coger un barco pero llegamos tarde para estar en Suiza (a la hora en punto llegamos y estaba saliendo). Sin embargo nos vino hasta bien para la “sorpresa” que nos esperaba en Berna.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Cogimos el tren a Berna (hay con mucha frecuencia y muy puntuales). Llegamos a la estación y fuimos a Turismo a pedir un mapa de la ciudad, recabar información y nos dijeron el modo de llegar al apartamento que teníamos contratado a través de www.airbnb.com. Entramos al piso y no había forma de quedarse! Sucio, no había cerradura.... En fin muy mal. Buscamos (funcionaba Internet) un hotel donde dormir y envié todas las fotos del piso en cuestión a airbnb. Cuento los detalles para explicar que esta agencia funciona muy bien porque me llamaron esa misma noche desde Estados Unidos para decirme que me devolvían el dinero y que además me pagarían una indemnización de 150 dólares. Así lo hicieron. Dormimos en el hotel Waldhorn, muy bien puesto, funcional con el desayuno incluido y el personal era muy atento. Con la indemnización nos salió más barato que el apartamento. Con el alojamiento resuelto dimos una vuelta por la ciudad. Era tarde para Suiza y comimos algo en un pub irlandés (creo que se llamaba Mr. Pickwick) muy animado.

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Como ya teníamos toda la información necesaria, comenzamos a patear la ciudad. Desde el hotel fuimos andando hasta el Jardín de las Rosas desde donde vimos una panorámica de la ciudad.


Bajamos al Parque de los Osos dónde hay osos en un recinto mas bien grande, fue curioso verlos. Luego cruzamos el puente y fuimos hacia la Catedral, donde hay unas vidrieras de Chagall (se entra gratis, para subir a la torre hay que pagar). Siguiendo el recorrido que marcaba el mapa que nos dieron en turismo, pasamos por el Parlamento (desde la trasera se ven unas vistas muy bonitas del rio, etc.) Allí comimos algo en un puesto callejero y las otras calles que cruz de arriba abajo. Hay muchas fuentes, calles casi peatonales... Sacamos la foto pertinente a la Torre del Reloj (Zytglogge), que vale la pena verlo. Es una ciudad pequeña, el ambientillo es tranquilo, no parece la capital. Cenamos en un restaurante italiano que por lo que vimos tenía mucha fama. Comimos una ensalada, una pizza y una lasagna, con cerveza. La pizza y la ensalada estaban bien, la lasagna a mí me supo a “avecrem” que tiraba pa’tras. Unos 70 francos.

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Nos levantamos y nos fuimos a Interlaken (como siempre hay bastante frecuencia y muy puntuales). Al legar, fuimos a turismo y nos indicó exactamente lo que teníamos incluido en el Swiss Pass, nos informaron de la subida la Jungfrau, etc. Interlaken es bastante turístico. La estación Interlaken Ost es mayor que la de West, pero se comunican mucho y caminando están a menos de media hora de distancia. A mi me pareció que está bastante explotado, pero los lagos y las montañas son totalmente alucinantes. Teníamos un apartamento contratado a través de Turismo de Interlaken: Riverholiday. Está un poco fuera de la ciudad, pero se llega bien caminando. En frente de la puerta está el lago.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

El apartamento era bastante pequeño, pero tenía todo lo necesario, estaba impoluto. La conexión a internet era muy lenta, se bloqueaba con frecuencia. La señora era amable y educada. Dimos una vuelta por el pueblo, fuimos al Coop a comprar para los tres días (nos gastamos en total 60 francos para todas las comidas), cenamos, planificamos un poco el día siguiente y nos acostamos.

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