11 de Septiembre - Mexican Hat - Monument Valley - Antelope Canyon - Kanab
Hoy iba a ser un día muy bonito, aunque realmente cada día lo estaba siendo. En este motel no entra el desayuno así que madrugamos, echamos gasolina enfrente mismo del motel y nos pusimos rumbo hacia los Meandros del Río San Juan, con las indicaciones de la carretera no tiene pérdida. Llegamos, era prontísimo y no había nadie, solo un coche caravana a lo lejos, pudimos tirar fotos tranquilamente, al poco rato llegó una señora inda navaja con su ranchera y empezó a montar su paradita de collares, pulseras y demás abalorios, nosotros nos sentamos en una de las mesas de picnic y desayunamos unas galletas y zumo.

Ahora tocaba ir hasta Monument Valley, teníamos aprox unas 25 millas, me gustó mucho el paisaje durante este trayecto, la típica carretera recta infinita, con los monolitos al fondo, precioso, además que como se puede apreciar en las fotos, no había demasiado tráfico.


Pagamos los 5$ por persona y nos dieron un mapa que encontré algo escaso, pero te dice el nombre de los monolitos. El circuito se puede hacer con tu propio coche o contratando un tour de los navajos, preferimos hacerlo con nuestro coche. Hay que tener mucho cuidado y conducir súper despacio, pero con un turismo normal se puede hacer.
Un ejemplo de como está la carretera:

A mi la visita me pareció impresionante, además no había demasiados coches y se podía ir con tranquilidad, paramos bastantes veces para echar fotos y disfrutar del paisaje.




El mercadillo navajo:

En total estuvimos unas dos horas y algo. Cuando acabamos pusimos rumbo a Page, queríamos ver el Lower Antelope Canyon, ya que según se dice está menos masificado y es bonito de ver también. Así que mapa en mano y para allá, como ya dije al principio, viajar sin GPS no ha supuesto ningún problema, ya que con un buen mapa de carreteras se encuentra todo a la perfección y a la primera, así que si no se lleva de casa, según yo no vale la pena gastarse el dinero en alquilar uno.
Bueno, pues tardamos unas dos horas y cuarto en llegar a Page, esto está antes de llegar al pueblo, están uno enfrente del otro, así que aparcamos en el Lower y preguntamos por la siguiente visita, no llevábamos nada contratado y tuvimos que esperar 45 minutos que aprovechamos para comernos unos bocadillos. Éramos poca gente, creo que unas 8-10 personas en total, el guía era un joven indio navajo bastante agradable, se iba parando para que hiciéramos fotos y él se ofrecía para hacer fotos donde sabía que iban a salir bien, todo esto se agradece, lo que pasa es que de tanto parón, la visita al final se me hizo un poco larga, más de una hora.





El cañón es impresionante, no se como será el Upper pero el Lower me pareció magnífico, una pasada.
Una vez finalizada la visita, como íbamos bien de tiempo, quisimos ir hasta el lago a ver si nos podíamos dar un chapuzón, así que cogimos la misma carretera de entrada al Lower Antelope Canyon y seguimos la indicación de “beach”. Antes de llegar al aparcamiento tuvimos que enseñar el pase anual de los parques para que nos dejaran entrar, me pregunto si la gente que vive en la zona tendrá entrada gratis o ya sabrán accesos al lago sin tener que pagar, en fin, aparcamos y primero inspeccionamos el sitio, seguidamente nos pusimos los bañadores en el coche y bajamos por las rocas hasta encontrar un sitio donde quedarnos un rato y bañarnos, hacía tanta calor que ni me lo pensé dos veces, me metí en el agua corriendo, fue un momento delicioso!


Nos quedamos ahí un rato, más o menos una horita, nos quedaba todavía una última visita ese día, así que nos volvimos a cambiar en el coche y nos marchamos en dirección a Horseshoe Bend. Tuvimos que coger la carretera en dirección a Flagstaff y tirar hasta encontrar, al lado izquierdo, una gran P blanca pintada en las rocas, a continuación a mano derecha ya había el desvío, era sobre la milla 545. Una vez en el aparcamiento hay que caminar un rato, unos 15-20 minutos, estábamos tan cansado de todo el día y con ese calor que se hizo muy duro, una vez llegas el esfuerzo vale la pena, el paisaje es precioso e impresionante, unas fotillos y de vuelta al coche, otra vez fue muy duro.

Se nos habían acabado las provisiones así que decidimos buscar un supermercado, seguimos las carretera en dirección Page y enseguida vimos uno a la entrada del pueblo, compramos lo que ya venía siendo típico, mucha agua, fruta, embutidos, pan, patatas chips y una tarrina de helado que con ese calor me apetecía un montón. El último destino del día era Kanab, donde nos íbamos a alojar, tardamos más o menos una hora en llegar, serían las 7 de la tarde y ya casi estaba oscuro del todo. El pueblo es pequeño pero creo que fue el que más nos costó encontrar el hotel, el sistema de calles me pareció un poco extraño. Después de 4 vueltas por las mismas calles lo encontramos, el Shilo Inn Suites, hicimos el check in y a la habitación, esta era enorme, también con su microondas, cafetera, estaba súper bien, sin duda repetiría. Después de la duchita y un poco de descanso salimos en busca de algún sitio donde cenar, en la guía había algunos recomendados, cogimos la calle principal y aunque era de noche, veíamos que era un pueblo muy pintoresco, muy a lo oeste, pasamos un restaurante donde tocaban música en directo, pero no nos convenció, al final elegimos uno de los recomendados, el Rocking Café, de fuera tenía muy buena pinta, resultó ser un sitio muy agradable, muy acogedor y comimos fenomenal. Volvimos rápidamente al hotel, había sido otro duro día.
12 de Septiembre - Kanab - Bryce Canyon - Zion Park - Las Vegas
Otro día de madrugón, y hoy íbamos a hacer muchos kilómetros. Desayunamos prontito en el hotel y rápidamente salimos dirección al Bryce Canyon. Primero echamos gasolina en Kanab y aproveché para hacerle algunas fotos al pueblo de día, otra vez me pareció un pueblo muy bonito y tranquilo. Pues bueno, de Kanab a Bryce hay unas 80 millas, creo que no llegamos a las dos horas de viaje, el paisaje se va haciendo más montañoso y más bonito. Cuando llegamos enseñamos el pase anual de los parques y nos dieron el mapa de costumbre. No teníamos mucho tiempo ya que había que ir también a Zion y dormir en las Vegas, pero nos lo tomamos con calma, ya llegaríamos. Aparcamos en el “Sunraise Point”, como era prontito aun hacía fresco y tuvimos que coger la chaquetilla. Primero de todo nos asomamos al mirador para ver la panorámica del Bryce Canyon, a mi me pareció impresionante, como es un parque que no es tan conocido y no suele salir tanto por la tele, me impresionó incluso más que el Gran Cañón, que ya sabes lo que te vas a encontrar.


Ya teníamos previsto hacer el típico trekking que combina el “Navajo Trail” con el “Queen’s Garden”, así que buscamos el “Sunse Point” y empezamos a bajar.




Como es bajada no se hace pesado, pero al rato ya empiezas a sentir calor, íbamos también parando mucho para hacer fotos. Al llegar al fondo vimos el primer cervatillo del viaje, que monos, hay un rato más o menos plano hasta que empieza la subida, como íbamos lentamente admirando el paisaje y haciendo fotos al principio no era pesado, lo peor fue el tramo final que yo ya no podía más, luego cuando acabas te sientes satisfecho, había sido unas 3 millas en total.
Para descansar un poco, nos sentamos en una de las mesas de picnic y picamos algo mientras nos bebíamos unos zumos. Cogimos el coche y antes de salir del parque nos paramos en el mirador Inspiration Point para ver el parque desde ese lado, sigue siendo impresionante.

Al acabar nos pusimos rumbo hacia Zion Park, tardamos unas 2 horas, pero en la entrada estaban haciendo obras y estuvimos un rato parados, pero bueno, de mientras observábamos el paisaje que era muy bonito, este ya era más montañoso. Justo al llegar y aparcar nos comimos unos bocadillos para coger fuerzas para la siguiente caminata. Cogimos el shuttle gratuito del parque y la primera parada fue en “Emerald Pools”, hay un itinerario indicado para ver tres cataratas, la primera estaba a 1,2 millas y es hasta donde llegamos, tampoco teníamos mucho tiempo.
Durante el trayecto nos encontramos con ciervos, el paisaje era muy bonito y el camino fácil, con pocas pendientes, hasta el resto de cataratas no se como estará. Solo caía un hilillo de agua en la primera catarata que sirvió para refrescarnos un poco.



Dimos media vuelta hasta llegar a la parada del shuttle, el siguiente destino era en la última parada “Temple of Sinawawa”, desde ahí empezamos el trekking hasta donde llegásemos, la verdad es que ya estábamos un poco cansados de todo el día, por suerte también es un trayecto bastante plano y que entre el río y los animalitos pasa bastante ameno, al final llegamos hasta donde se acaba el camino y hay que seguir por el agua,


sirvió para remojarnos los pies y descansar, en ese punto había bastante gente, me hubiese hecho gracia seguir pero tampoco íbamos preparados y bueno, ya estaba bien de trekking por ese día, así que dimos media vuelta y llegamos al shuttle que nos dejó en el parking del parque. Por fin en el coche! Este parque también nos había gustado mucho, apuntado para otro año dedicarle más tiempo.
Pusimos rumbo hacia la última parada del día, Las Vegas, eran las 18,30 y nos esperaban 3 horas de viaje. Conforme íbamos aproximándonos el paisaje se iba haciendo más desértico y de repente, a 40km de Las Vegas, aparece de repente las millones y millones de bombillas que iluminan la ciudad, me pareció algo increíble, se decía mucho en el foro lo impresionante que es pero si no lo ves no te lo puedes imaginar.
Llegamos al Strip y ahí empezó el agobio, teníamos que ir al hotel Venetian, lo veíamos y pasábamos por delante pero no había manera de encontrar el parking, y ahí no es tan fácil dar la vuelta en otra calle, fue un rato un poco lioso pero finalmente lo encontramos. Fuimos directamente al self parking. Encontrar la recepción también costó un rato, por suerte el check in fue muy rápido, no había apenas cola.
Este hotel había sido el capricho del viaje, como enamorada de Venecia ni me lo pensé dos veces, además encontré una oferta que incluía desayuno. Tiene 4000 habitaciones y en el check in te dan un mapa de todo el hotel, es que sino te pierdes, para ir a la habitación teníamos que coger 2 ascensores, pero una vez estás en la habitación ya se te pasan todos los males, era una suite enorme, con dos camas grandes y una tele muy grande, su salón con sofá, una mesita y otra tele grande, un baño también mega enorme.
En fin, reventados nos comimos unos bocadillos, descansamos un rato y bajamos a explorar los alrededores del hotel. Había mucha animación, aprovechamos para ver la Erupción del volcán del Hotel Mirage, callejeamos un poco por ahí y ya nos fuimos a dormir.