La ciudad de Bariloche seria el punto de partida de uno de los buceos más particulares que nos ofrecen los espejos de agua de la Cordillera de los Andes en la Patagonia Argentina. Luego de preparar con Andrés nuestros equipos de buceo y fotográfi cos nos encontramos con nuestro anfi trión y guía local Juan Carlos Mazzola, director de la operadora Aquanauta Charter Boat. Cargamos todos los equipos a su camioneta y nos dirigimos hacia nuestro destino de buceo: el Lago Traful. Luego de dos horas de marcha llegamos al imponente lago. De un inconmensurable color azul profundo, forma parte del Parque Nacional Nahuel Huapi, el mayor y más antiguo parque de la Republica Argentina (705.000 hectáreas).
El ambiente en los alrededores del lago es propio de los bosques subantárticos: árboles como el cohihue, cipres, ñire, radal y arbustos como el sauco, retamo y la caña colihue. Apenas la primavera derrite la nieve que uniforma el paisaje, las praderas y el bosque estallan en multicolores fl ores silvestres, notros, mutisias, mosquetas y la simbólica amancay, que se suma al violento amarillo de las retamas, dando un encanto particular a este lago enclavado en los Andes. La Villa Traful esta ubicada en la parte sur del lago, ofrece un aspecto simpático y pintoresco. Las construcciones son típicas de montaña, la mayoría de ellas de madera con techo a dos aguas y amplios jardines con cercos naturales integrados perfectamente al paisaje circundante. El buceo en lagos y embalses de montaña es una actividad muy difundida en Europa Central principalmente entre suizos, italianos y alemanes.
En nuestro país es una variedad relativamente nueva, no porque no se practicara, sino porque no existía una adecuada infraestructura que ampare a los visitantes. La época de inmersiones más recomendables en el Traful es durante el verano. El lago se halla a 764 msnm y pocos paisajes de nuestro país tienen la transparencia de este espejo. La costa es de fácil acceso, se pueden bajar embarcaciones neumáticas en forma manual sin mayores inconvenientes. Un detalle para tener en cuenta, que en casi toda la costa supera los 45 grados a solo unos pasos de la orilla aparecen profundidades superiores a los 15 metros. Para buceo en las frías aguas de los lagos de montaña es ideal el uso de trajes secos. El lago traful se halla a 764 msnm.
EL BOSQUE SUMERGIDO
Partimos del puerto de la Villa, y luego de unos 20 minutos de navegación llegamos a la margen norte del lago, en la bahía inmediata a la Península Grande. En este lugar se encuentra, sin dudas, uno de los puntos de buceo más bonitos y particulares de la Argentina: “El Bosque Sumergido”. El bosque está compuesto por unos 50 o 60 ejemplares de cipreses completamente secos y desprovistos de hojas cuyo fuste se yergue desde el lecho del lago rozando la superfi cie y afl orando sus pináculos en algunos lugares. El color de los árboles es gris claro y semejan agujas de gran tamaño. En el año 1960, durante el terremoto que sufrió la región de Osorno en Chile, una parte de las laderas de este sector del lago Traful se deslizó en un movimiento de dislocación hasta alcanzar la costa arrastrando parte del bosque y su vegetación. Esta es la razón por la que hallamos árboles que descienden hasta 30 metros de profundidad, desde sus raíces hasta alcanzar la superfi cie con sus copas.
Troncos y ramas contrastan con el azul intenso de la profundidad. La sensación en esta zona se asemeja más a volar que a bucear, tal es el dominio del paisaje, que es como sumergirse desde las nubes. Los árboles se asientan sobre un fondo barroso con rodados, se viven imágenes oníricas al desplazarse entre los árboles y sentarse en la rama de alguno y ver pasar truchas en lugar de aves. Un boque encantado en el que todo está invertido: el agua supera los árboles y nosotros parecemos volar de rama en rama como si fuéramos pájaros.
Es fascinante ver las grandes raíces de los árboles todavía fi rmes en el fondo, partir desde ellas y comenzar a ascender por gruesos troncos, del que van saliendo, abriéndose ramas, dándole una forma de cono… ver cómo se va afi nando, después de ascender 15 0 20 metros, ver su copa saliendo al exterior como queriendo ganar la superfi cie. Las formas y tamaños de los troncos son infi nitos, el paisaje subacuático es muy distinto al marítimo, pero nada deja de ser impresionante. La temperatura del agua ronda los 16 grados centígrados y la visibilidad sobrepasa los 20 metros.El bosque termina aproximadamente a los 30 metros en unas grandes piedras sobre el fondo de barro.
La ictiofauna del lago es pobre en diversidad pero abundante en número. En 1904 fueron introducidos algunos salmónidos que se encuentran perfectamente adaptados en muchos puntos de la Argentina, pero no se debe olvidar que son especies foráneas. El salmón encerrado (salmón salar sebago) originario de los Estados Unidos se ha adaptado a la zona del Lago Traful. Este salmón tiene marcadas diferencias con el resto de los sembrados en la provincia de Neuquén por poseer la aleta caudal más delgada y en forma de V y manchas negras en forma de cruz.
Otra de las especies introducidas es las trucha arco iris (S. garnerii) que se distingue por sus tonalidades azuladas o verdosas en el lomo que hacia los fl ancos se torna plateada poseyendo una franja rojiza iridiscente. Dentro de las especies nativas se encuentran el puyen, la perca y el pejerrey patagónico. El puyen (Galaxis sp) es olivaceo salpicado de mancha irregulares negras. Se oculta entre piedras o maderas o se apoya en el fondo. La perca (Percychthys sp.) trucha criolla, son de aspecto macizo de color dorado pálido a rosado. Alcanzan hasta los 40 cm., son voraces predadores. Experiencia vivida de la mano de Extremo Viajes, que lo disfruten....