A sabiendas, que era nuestro último día entero en el hotel, madrugamos y a las 9 ya estábamos desayunando.
De nuevo, el mismo plan de siempre, el bus hasta el beach club, luego hasta el playacar y tumbona y mar.
Cuando empezó a calentar en serio, a la piscina y a beber cócteles.
Esta vez, decidimos quedarnos en el Playacar a comer. Mas o menos igual que siempre.

Después de comer, decidimos pasar la tarde de nuevo en nuestro hotel, el LUPITA, asi que salimos fuera del Playacar y girando a la derecha, vas caminando hasta la parada del bus en el beach club.
Pasamos la tarde en la piscina, bebiendo y comiendo, vamos, lo de siempre.
Estuvimos pendientes de cambiar las toallas antes de las 18h, que es cuando cierra el tio que las recoge. Le dijimos que nos las cambiara por toallas limpias, ya que al dia siguiente teníamos excursión a chichen Itzá y madrugábamos mucho y a esas horas el no estaría.Aceptó sin problemas.
Tras conectarnos un rato a internet, subimos a la habitación a estar un rato echados antes de la cena.
Hoy había especialidad mexicana en el buffet, asi que tomamos unas fajitas y unos burritos. Muy ricos! Jejeje

Le comenté al cocinero, que como salíamos a las 5 de la mañana del dia siguiente, que si podíamos coger algo para desayunar. Me dijo que tenía que preguntar a no se quien, que volviese justo antes de cerrar el comedor (22:30h) y me decía algo.
Así lo hice. Me dijo que si, que pillara lo que quisiera.
Asi que cogimos pan y un poco de fiambre e hicimos unos bocadillos para desayunar al día siguiente.
Nos fuimos al bar a tomar unos cócteles, pero esta vez a las 23:30 h estábamos ya en la habitación, que al día siguiente teníamos que madrugar, y mucho!