Miércoles 24 de Junio
El vuelo a Seoul tiene una escala de 23h y 45' en Roma. Llego a Roma a las 15:15 y el vuelo a Seoul sale a las 15:00 (evidentemente del siguiente día). Aunque puede parecer un fastidio, a mí me ha venido de perlas... pues puedo dedicar un día a revisitar algunos puntos concretos de una ciudad que no había vuelto a pisar desde que mi viaje de novios en 2001.
Ha salido de bilbao sin contrariedad, en un avión no completo, pero bastante lleno. Puntual, nos han dado snack y bebida gratis ... y cabías de sobra en los asientos... Ya podían aprender los de Vueling.
El mayor contratiempo ha sido que en Bilbao me han dicho que no podía facturar la mochila hasta Seoul porque el vuelo a Corea salía el jueves. Al menos me han dado la tarjeta de embarque para el trayecto de Roma a Seoul y me ha elegido un buen asiento.
La contrariedad de la mochila ha hecho que haya tenido que esperar a la salida de la misma en Fiumicino (es la primera vez que facturo la mochila... esta vez es gratis y llevaba los palos de senderimo). En resumen, que llegaba tarde al bus Terravisión que te lleva a Términi (4€ por internet, terminal 3). Menos mal que esto es Italia y el bus ha salido con unos 12 minutos de retraso (1 minuto después de que yo llegara). Me ha dejado en Termini en unos 55 minutos.
El hostel discovery lo tenía al lado de la estación (10 minutos andando). Es una zona un poco fea, sucia,... típica de barrios próximos a las estaciones de tren y bus principales de otras ciudades europeas. Pero por lo demás está bien. Dos dormitorios de 6 personas, cocina equipadita, café gratis, wifi,... 18€/noche + impuesto municipal de 3'95€)
He llegado sin problemas (bendito GPS), he dejado las cosas y he ido directamente a un par de sitios que quería ver: Basílica de San Clemente y Basílica de San Pietro in Vincoli. Ambas cerraban hacia las 18:00 y ambas son de acceso gratuito.
En la primera, no dejan hacer fotografías (eso es algo que me pone del hígado), hay una parte arqueológica de pago en los subterráneos, que por falta de tiempo no he visto. Sí se pueden contemplar algunos frescos muy bien cuidados, así como algunas pinturas mosaicos, del estilo de las de iglesias cristianas ortodoxas. Para mi gusto lo más chulo.
Alguna foto sacada de internet:
Sin embargo, como tenía muy poco tiempo, he ido directo hacia la de San Pietro in Vincoli. Es muchísimo menos ostentosa que la anterior; no es que esté poco recargada, sino que parece una iglesia desacralizada por el régimen comunista. No hay apenas nada de lo que esperas en una iglesia... salvo la obra maestra de Miguel Angel: MOISES
Es simplemente la hostia.
No sólo la estatua, sino el conjunto arquitectónico en sí mismo:
Las fotos, por desgracia, no son muy allá, pues me dejé la cámara de fotos en el hostel y he tenido que recurrir al móvil, que no sé configurar para ajustar la calidad de las imagenes.
Como he dicho antes, la entrada a ambas iglesias es gratuita. En el caso del Moises, se puede echar un euro y se ilumina (mejora mucho) durante un minuto aproximadamente. La verdad es que la gente continuamente volvía a encender las luces.
Entre ambas basílicas se encuentra el ingente Coliseo de Roma... Es espectacular (y sólo lo he visto por fuera). Hace un mes volví a admirar el acueducto de Segovia, que nunca me deja de emocionar. A otro nivel, el Coliseo me produce la misma sensación.
Aún no me he hecho con el famoso palo de selfies, así que recurro al clásico "could you take me one photograph, please?".
Para entrar en ambiente he elegido a algunos orientales, con la esperanza de que fueran coreanos... voila, a la primera. Después de saludarles en su idioma, les he pedido que me sacaran una foto con el móvil... pero ha sido imposible. Les tendía mi móvil para que me fotografiaran, pero no sé qué entendían, que al final se han ido pitando (sin mi móvil, claro). Yo creo que me habrán confundido con la gente que va disfrazada y permite que te retrates por unos euros con ellos (claro que yo no llevaba gladio ni coraza). Total, que a cabezota no me gana ni Dios, y al final lo he conseguido.
El plan del día estaba completo, pero he recibido un mensaje de un host de CouchSurfing para dar una vuelta por su barrio (Burgo), junto al Vaticano. Así que he aprovechado y, en vez de descansar, he cogido el metro en Coliseum, llegando en menos de media hora a mi destino.
Allí he contemplado la plaza de San Pedro. Seguramente se trate de algo muy personal, pero no me emociona especialmente. A pesar de ser monumental con la pérgola semicircular de hasta cuatro enorme pilares formando el corredor... no me llena. Hay otras plazas que me gustan muchísimo más (San Marcos, Wroclav, Sevilla....)
El barrio próximo a San Pedro es otro mundo. Edificios preciosos (parece París), mucha vida en la calle (pero de gente con pasta), limpieza...
Le he dejado reunido a Mario con una cena de trabajo y me he vuelto en metro al hostel, donde planifico el día de mañana, antes de coger el bus de terravisión (12:35)
El plan pasa por visitar el Foro romano y el Palatino fundamentalmente.
JUEVES 27 DE JUNIO
En efecto, como tengo un ratito a la mañana, he dejado la mochila en el hostel y me he acercado andando (20') a la zona del foro.
Como había leído en la página, para comprar entradas para el coliseo es mejor hacerlo en el foro. La entrada, 12€, es conjunta para el interior del Coliseo, para el Foro y el Palatino. Si tienes que comprarla en el coliseo, yo estimo que hoy hubieras tenido para unos 50 - 60'.
Ya que he comprado la entrada en el foro (no había NADIE delante mío), he comenzado la visita por ahí. Llama la atención el espacio tan grande que es, en medio de una ciudad, como Roma, donde seguro que los constructores se matan por el metro cuadrado.
La visita al foro y a la Palatino se puede hacer, si se tiene prisa, en unos 90' sin problema. Por supuesto, si se va en visita guiada se aprenderá mucho más; ya que, por desgracia, las ruinas no permiten hacerte una idea real de lo inmenso y laberíntico que imagino que sería aquello.
Desde allí se tienen bonitas vistas del Arco de Constantino y el Coliseo. A donde me he dirigido. La cola para entrar era de varios cientos de metros, pero avanza rápido y en 10-15' ya estaba dentro.
Por dentro impacta verlo, imaginar cómo sería cuando lo construyeron (aún recuerdo pasajes de la última trilogía de Posteguillo). Sin embargo, a mí me sigue emocionando mucho más su estructura exterior.