Comienza el día con una resaca muy seria. Los efectos de la fiesta en Santa Clara recorren nuestro cuerpo. Uno de los integrantes de la expedición tiene que hacer uso del Fortasec por primera vez en el viaje. Nuestros caseros nos vuelven a decir que lo de alquilar el coche es imposible, que a ver si en Trinidad o Cienfuegos tienen. Como nuestra prioridad es conseguir un coche les decimos que ese día nos vamos a Trinidad, por lo que dejamos las mochilas recogidas, nos vamos a hacer turismo por Santa Clara por la mañana y luego ya pasamos a recoger nuestras cosas cuando nos vayamos a ir.
Salimos de nuestra casa y vamos a la casa del otro chico a buscarlo. Su casero tampoco ha conseguido lo del alquiler del coche y nos sigue ofreciendo taxi a Trinidad por 70 CUC (65,42 €). Lo primero que hacemos es buscar un lugar donde tomar unos jugos. Entramos en uno y había 3 personas, una chica y 2 hombres tomando un jugo cada uno. Estos son los precios del sitio para hacernos una idea (Están en Moneda Nacional):

Los precios ya los veis, cafés y frituras 1 MN (0,04 €), los jugos 2 MN (0,08 €) y lo más caro la hamburguesa con queso y jamón york que son 15 MN (0,58 €). Los 3 jugos nuestros eran 6 MN (0,23 €) y lo que tenían las 3 personas que estaban allí lo mismo. Y probamos a hacer un experimento sociológico que consistía en invitar a la gente que allí estaba a ver cómo reaccionaba. Así que saqué un billete de 20 MN (0,78 €), y le dije a la camarera, cóbrame todo, me dice 6 MN (0,23 €). Y yo, no, no solo lo nuestro, sino todo, el jugo de esta chica y los jugos de esos 2 hombres, se queda sorprendida, los 3 se quedan diciendo que no hace falta y todos sorprendidos, y yo, no tranquilos, que en nuestro país es típico que el último que llega al bar paga la ronda que haya, le pagué 12 MN (0,46 €) y nos fuimos y las 3 personas y la camarera quedaron incrédulas y sorprendidas sin saber qué hacer ni decir.
Llegamos a la plaza principal y decidimos ir al museo del tren blindado, que habíamos estado la tarde anterior pero estaba cerrado, y negociamos con un señor que tenía una mototaxi cuanto nos cobraba por llevarnos y traernos, 3 CUC (2,80 €) fue lo que pagamos. Llegamos al museo del tren blindado y pagamos 1 CUC (0,93 €) por entrar. A mí me pareció bastante interesante. Cada vagón se centra en un tema. Uno tiene arte, otros elementos que se usaron ese día para el ataque, en otro se explica la historia de la acción. Se ve bastante rápido. Cuando acabamos la visita le fui a preguntar a las 3 mujeres que había vendiendo las entradas varias dudas que tenía sobre ese tren y aún me pasaría hablando media hora con ellas y me resolvieron todas mis dudas con todo tipo de detalles.
Tras la visita volvíamos para la plaza y le preguntamos al de la mototaxi si sabía cuánto nos valdría ir en taxi a Trinidad, que a nosotros nos habían dicho 60 CUC (56,07 €), le dijimos 10 menos que lo que nos habían dicho para ver que contestaba, y su respuesta fue, que caro. Yo os consigo alguien que os lleve por 40 CUC (37,38 €). Dijo que tenía que hacer un viaje con la mototaxi ya planificado y que quedábamos luego y nos enseñaba al conductor y al coche y decidíamos. Quedamos en el mítico bar que teníamos cerca de casa. Nos dejó en la plaza y nos fuimos a nuestras casas a por las mochilas. Uno de los caseros dijo que era prácticamente imposible ir por 40 CUC (37,38 €) hasta Trinidad. El nos ofrecía taxi a Trinidad por 70 CUC (65,42 €), con lo que le interesaba para llevarse su comisión. Cogió uno las mochilas y nos despedimos de su casero, fuimos a la otra casa y nos invitaron a tomar unos cafés artesanos que hacen ellos y después cogimos las cosas nos despedimos de ellos y nos fuimos para el bar a esperar a nuestros contactos. Nuestra estrategia era ver su propuesta, coche y conductor, si nos convencía bien y si no subir a la estación de Viazul ver los precios del bus o coger taxi allí que hay bastantes. Para la espera pedimos unas cervezas y una pizza para los 3.
Cuando estábamos acabando de comer la pizza aparecieron Delbi (el de la mototaxi) y Maikel, el que sería el conductor, a partir de ahora “Los Morancos Cubanos”. Nos enseñaron el coche, un Moskvitch, nos repitieron el precio 40 CUC (37,38 €), así que les dijimos que si e hicimos nuestro protocolo de seguridad, fotos del coche y matrícula, fotos de ellos, y nuestro lema del viaje: esto tiene que ser algo que nos beneficie a ambos, en el momento que veamos que ustedes se intentan aprovechar de nosotros el acuerdo se rompe y cada uno por su lado. Les decimos que antes de ir queremos volver por el mausoleo del Che que uno de los 3 no lo vio y estar allí media hora. Dicen que sí. Cargamos las mochilas en el maletero y nos íbamos a despedir del de la mototaxi y dice que no, que se viene que así le indica el camino al otro, algo que no entendemos. En vez de ir 4 en el coche cómodos nos toca ir a los 3 atrás como si estuviésemos en una lata de sardinas. Pero bueno eran 100 kms y pensamos que se llegaría rápido. Error, las distancias en Cuba no se pueden pensar como aquí. Subimos al mausoleo del Che, nos dejan y nos dicen que vuelven en media hora. Vamos al Mausoleo y está cerrado, premio, y encontramos a un italiano que está allí solo en la sombre y nos ponemos a hablar con el. Y allí estamos la media hora hasta que vuelven los Morancos. Lo primero que nos hacen es echar una bronca grandísima, que estamos locos, que porque son ellos, que no se nos ocurra dejar las mochilas en el maletero del coche de cualquiera, que nos pueden robar. Está bien que te lo digan, pero cuando tienes sus fotos, su matrícula, si quieren robarte los más perjudicados van a ser ellos. Nos montamos en el coche y arrancamos dirección a Trinidad con múltiples paradas por el camino buscando comida y bebida. Esta es la foto del coche saliendo del Mausoleo del Che:

Una anécdota muy graciosa. Los Morancos preguntaron por el italiano, que se iba esa tarde desde el aeropuerto de Santa Clara a Italia como iba a subir al aeropuerto desde allí. Y justo vimos un caballo suelto por allí y les contamos que se había alquilado el caballo y se subía montado en el caballo. Se echaron las manos a la cabeza, que estaba loco el italiano, como iba a subir en caballo y 5 minutos hablando del italiano y el caballo.
Pasaban lentamente los kilómetros y decidimos ir parando por los pueblos tomando algo. El asunto a proceder era poco ortodoxo. Llegábamos a un pueblo, un Moranco bajaba del coche y le preguntaba a alguien del pueblo, volvía al coche, íbamos al lugar que nos habían dicho, bajábamos todos y pedía una cerveza, la tocaba, si no estaba lo suficientemente fría la devolvía y nos íbamos a otro lado. Así 3 veces, hasta que le dijimos, aunque no sea cerveza, coge agua o cualquier otra cosa. Pero bueno, llegamos a un sitio que tenían cerveza fría marca Mahou, jajajaaj, si, oyen bien. Cerveza Mahou en un pueblo de Cuba. Nos entró el hambre y les dijimos de parar a comer en un restaurante de moneda nacional, pasamos por 3 y en ninguno de los 3 les quedaba nada de comer. Al final el único sitio donde encontramos algo para comer fue un camping. Paramos entramos en el camping y pedimos unas cervezas y nos hicieron unos bocadillos para los 5. Estuvimos hablando con los del camping y nos dicen que allí ahora en Julio y Agosto los niños que aprueban todo van allí como premio una semana de vacaciones.
Arrancamos dirección Trinidad y el camino se hizo interminable, 12 kms por la carretera que podéis ver en la foto que la velocidad máxima debieron ser 20 kms hora. Mucho ojo con la carretera que elijes si alquilas coche, que igual son menos kilómetros pero si son así no merece la pena:

Durante el viaje fuimos hablando absolutamente de todo. Estos incluso nos dijeron que el sucesor de los Castro al frente de Cuba sería uno que se apellida Díaz Cadenas. Luego nos fueron contando sus vidas y mil historias.
Por fin llegamos a Trinidad. Y obviamente Los Morancos no tenían ni idea de la dirección de la casa a la que teníamos que ir, por lo tanto preguntando por todo el pueblo, y alguno de los que íbamos preguntando venía luego detrás del coche, con lo que al final llegamos a la casa un grupo de unos 10, nosotros 3, Los Morancos y 4 o 5 de los que fuéramos preguntando. Salió la casera y nos dijo que ella tenía la casa llena, que la teníamos que haber llamado antes, pero que no nos preocupásemos y ya nos buscaban otra casa. Y fuimos andando a ver varias casas. En alguna solo había una habitación con lo que la descartábamos para dormir los 3 en la misma casa. Alquilamos 2 habitaciones en 1 casa por 15 CUC (14,02 €) cada una. Dejamos las cosas y nos pusimos en búsqueda de coche de alquiler. Imposible, no quedaba ninguno, nos dijeron que en Cienfuegos. Con lo que decidimos quedarnos una noche e ir para Cienfuegos el día siguiente. Le dijimos a Los Morancos, hasta ese momento había sido todo perfecto, salvo lo de ir 5 en vez de 4, bien. Si querían quedarse y llevarnos el día siguiente a Cienfuegos. Dijeron que si. Hacía demasiado calor y nos dijeron los caseros que podíamos ir a Playa Ancón que quedaba a 12 kilómetros de Trinidad que está muy bien. Le dijimos a Los Morancos que podíamos ir a la playa y luego ya quedar a cenar por allí en algún sitio que gestionásemos. Lo que eran 12 kms que debería ser un viaje corto se convirtió en un infierno. Entre la mala suerte y su mal hacer fueron casi 2 horas de camino. Lo lógico sería ir los 12 kms por la carretera mas rápida, llegar a la playa y luego ya allí empezar a ver todo. Pues no, con su frase, os metemos por aquí para que vean y conozcan, los 12 kms pasando por todos los pueblos hasta que nos paró la policía en el medio de uno. Taxi ilegal con turistas, aparte el coche no era de ninguno de los 2, que se lo habían pedido a un tercero. Nos dijeron que si nos preguntaban que uno de nosotros era familiar de el y los otros amigos simplemente. Pero nada, allí parados 15 minutos y no nos dijeron nada y dejaron marchar, y a partir de ahí parando cada 2 por 3 para buscar sitio para cenar y dormir ellos (al ser cubanos pagan mucho menos que pueden usar las casas rojas), por lo que se hizo pesadísimo. Si nos llegasen a llevar a la playa y luego ya buscasen su sitio para dormir todo cambiaría. Llegamos a la playa y estábamos solo nosotros. La única persona que había era la del chiringuito. Los Morancos creo que fue la primera vez en su vida que estaban en la playa y tenían la felicidad de un niño pequeño allí, como muestra esta foto:

Compramos cervezas y una botella de ron en el chiringuito y estuvimos 2 horas allí en la playa bañándonos y bebiendo. Sobre la playa en principio era espectacular, pero después de estar en Playa Esmeralda y Guardalavaca no la apreciabamos tanto. El agua era de otro color mas azul oscuro que el turquesa de las playas de la provincia de Holguín y el agua estaba mucho más caliente, incluso demasiado caliente. Esta es una foto de la playa antes de que se fuese el sol:

Pero aquí vinieron los problemas, cuando a Los Morancos les dio por incumplir las normas. Habíamos acordado 40 CUC (37,38 €) por ir desde Santa Clara a Trinidad y ahora nos decían que nos pedían 80 CUC (74,77 €) por cada día. Ósea, 80 CUC (74,77 €) por traernos a Trinidad e ir a la playa y 80 CUC (74,77 €) por ir el día siguiente hasta Cienfuegos. Le preguntamos los motivos para pasar de 40 a 80 y nos dicen: Bueno, 40 era muy poco, así que 50 Santa Clara-Trinidad y los otros 30 por ir hasta la playa y gestionar la cena (que aparte los invitábamos a cenar y llevábamos todo el día invitándolos a beber). Así que nos reunimos los 3 y decidimos que no, pagarle los 80 CUC (74,77 €) por el día de hoy, cenar y luego dejarlos. Se lo comunicamos y les explicamos nuestros motivos. Que no veníamos en taxi oficial que eran 70 CUC para ahorrar y al final nos salían más caros ellos. Creo que si hicieran las cosas de otro modo, si solo viniese uno solo y fuéramos cómodos en el coche hubiésemos seguido, pero la aventura con Los Morancos llegaba a su fin. Así que nada nos dimos un último chapuzón y nos fuimos a cenar. La cena fue espectacular, yo cené camarones empanados 30 MN (1,17 €) y rueda de pescado 25 MN (0,97 €). La rueda de pescado es como pescado a la plancha. Y para beber piña colada. Durante la cena nos dijeron que querían seguir con nosotros hasta Cienfuegos, que bajaban el dinero, pero les dijimos que no es cuestión de dinero, sino de las formas y de cambiar unas condiciones unilateralmente. Acabamos de cenar, pagamos y nos llevaron hasta la casa y nos despedimos de ellos. Nos dieron sus móviles y dijeron que se iban a quedar a dormir en Trinidad y que si cambiábamos de opinión.
Nos dimos una ducha y salimos a la calle, lo primero que vemos es una casa que hay 3 chicas y un montón de botellas, y entramos y les preguntamos si es un bar, y nos dicen que no que es una casa particular, les decimos si nos hacen unos cubatas, dicen que si, y allí estamos dentro de una casa particular tomando unos cubatas, les preguntamos cuanto es, nos dicen que lo que nos apetezca darles, no sé cuánto les dimos y nos fuimos. Como era el único día que íbamos a estar en Trinidad antes de ir de fiesta decidimos hacer algo de turismo. Así que un paseo por todo el casco histórico que es increíble y precioso. Cuando nos cansamos de andar llegamos a una terraza muy agradable y pedimos una botella de ron. Estábamos tan a gusto allí bebiendo y hablando que se fue todo el mundo, recogieron todas las sillas y mesas y seguíamos allí. Al rato nos levantamos y nos fuimos, de camino fichamos a 2 chavalitos de unos 18 años para que nos guiasen de noche, el acuerdo fue, vosotros nos lleváis de fiesta y nosotros os pagamos lo que bebáis. Nos llevaron a una discoteca dentro de una cueva, Disco Ayala creo que era su nombre y genial, nunca habíamos estado en un sitio así, tenía un montón de estalactitas y había muy bien ambiente y nos quedamos muchísimo rato ahí. Ahí ya nos perdimos todos y cada uno fue a su aire, yo me quedé con los 2 chavalitos hasta que cerró la disco cueva y nos fuimos a comer unas pizzas antes de irnos a casa. Después de comer me despedí de los chavales y el camino hasta la casa aún era un buen tramo. Estaba tan cansado que me senté en un banco del parque principal y me quedé dormido. Vino la policía, me despertó y me dijo que no podía dormir ahí que era peligroso por si me robaban el dinero, me acompañaron a casa y estaba fuera durmiendo en la acera uno de mis amigos, la policía alucinando con nosotros, lo despertamos y dijo que estaba en cama y como no se puede fumar en la casa salió a fumar fuera y se había quedado dormido, el otro al estar mal del estómago se había ido antes. La policía timbró y bajó el casero y hasta que nos metimos en cama no se fue la policía. Jajajajajajaj. Vaya trabajo le dimos. Y así acabó otro día muy intenso en Cuba en el que hicimos tantísimas cosas que nuestras baterías quedaron completamente descargadas.