Bueno, pues este era nuestro último día completo en Budapest, ya que al día siguiente nos salía prontito el avión.
Nos levantamos muy animadas ya que hoy también teníamos previstas muchas visitas


La primera parada era la visita a la sinagoga. Qué sitio tan impresionante!!! Con la entrada, tienes opción a una visita guiada así que nosotras ni lo pensamos. He de decir que fue el sitio en el que vimos más aglomeración de gente, y eso que eran las 10, cuando abren.
Como todos sabéis es una sinagoga muy peculiar. Es la segunda más grande del mundo por detrás de la de Nueva York.
Se construyó en cinco años siendo inaugurada en 1859 aunque durante la 2ª guerra mundial fue seriamente dañada. Por suerte fue restaurada y a día de hoy se puede disfrutar de esta maravilla.
Es conocida como la sinagoga católica por la cantidad de características en común con las iglesias católicas. Tiene dos púlpitos, un altar y un órgano. Fue una de las formas que los judíos tenían para integrarse en el pueblo húngaro. Aunque muchos judíos más extremistas nunca la consideraron como una verdadera sinagoga, por ello se puede encontrar otra sinagoga más pequeña a pocos pasos de ésta.
Lo más extraño de esta sinagoga es su cementerio, ya que es algo que va en contra de la religión judía. El motivo de esta excepción, es que ahí fue donde aparecieron multitud de cuerpos de judíos asesinados por los nazis y como no podía salir del gueto no tenían otra forma de honrarles, por lo que les enterraron en el patio. Junto al cementerio hay fotografías de personas que ayudaron a liberar el gueto judío. Es un sitio tremendamente emocionante.
Pero la visita no termina ahí, ya que a continuación se encuentra un patio exterior donde se pueden ver varios homenajes tanto a caídos como a personas que ayudaron a la salvación de un gran número de judíos.
Hay una lápida con los nombres de personas que ayudaron a numerosos judíos a escapar del gueto. Entre esos nombres está el de un español, Ángel Sanz Briz más conocido como "El Ángel de Budapest". Era un diplomático que entregó más de 5000 pasaportes haciendo pasar a los judíos por sefardíes aunque fueran originarios de otros lugares.
Aquí no hay flores, hay piedras, costumbre judía, ya que éstas últimas no se marchitan.
También hay un mosaico de vidrio que simboliza el holocausto. Lo siento, pero de esto no encuentro la foto.
Y aquí encontramos el conocido árbol de la vida, en cuyas hojas se encuentran los nombres de los judíos asesinados en el Holocausto.
Para mi es una de las visitas imprescindibles en Budapest. Creo que contribuye a no olvidar la historia, para así no volver a repetirla.
Cuando terminamos la visita, nos fuimos en metro hasta la plaza la zona de la plaza de los héroes. La plaza es inmensa!!! Pero coincidimos con un grupo numerosísimo de japoneses que salían en todas las fotos

Desde aquí fuimos caminando hacía el castillo Vajdahunyad, pero antes nos paramos a ver cómo patinaba un montón de gente en una pista de hielo. Había verdaderos profesionales!!!

Seguimos hasta llegar a la zona del castillo. Estaba bastante descuidado, la verdad, pero tiene su encanto.
Aquí es donde se encuentra el poeta anónimo. Nos dijeron que si frotas el lápiz que sostiene en la mano vuelves a Budapest así que yo como buena guiri... sigo la tradición!!
La siguiente parada del planing eran los baños Szechenyi. Resultó ser la siguiente y la última!!! Estábamos tan a gusto que cuando llegó la hora de irse para continuar las visitas (nos quedaban la casa del terror y la ópera), decidimos que como era el último día nos merecíamos un descanso. Así que ya tengo la excusa perfecta para volver a Budapest!! Me quedaron dos cosas muy importantes sin ver



Los baños es verdad que pueden parecer un poquito anticuados, pero la verdad que están bastante bien, o al menos yo estuve en la gloria

La idea era comprar dos entradas con cabina, pero no tenían cabinas así que nos conformamos con unas taquillas.
Antes de nada os pido perdón por la calidad de las fotos, pero están hechas con un sj4000 que era la primera vez que utilizaba

Dentro hay bastantes piscinas con distintas temperaturas, saunas, pozas con agua fría,... también hay grifos donde la gente llena botellitas de agua, baños, duchas,...
Pero para mi lo mejor de todo fue la sensación de salir en bañador a las piscinas exteriores con el frío que hacía ese día en Budapest!!! Fue una gozada, porque no notamos tanto frío como pensábamos.


Os dejo un par de videos (son los primeros que hago así que no quiero comentarios de lo cutres que son



Cuando salimos de allí ya era de noche, sobre las 17:15 más o menos. Así que con ese relax que teníamos en el cuerpo decidimos bajar por la avenida Andrasy dando un agradable paseo. Por cierto, estábamos tan a gusto en los baños que hasta se nos pasó la hora de comer

Cuando llegamos a Deak tere, decidimos que haríamos merienda-cena y nos zampamos un pedazo bocadillo con una salchicha enorme dentro

Para muestra, un botón.
De aquí nos fuimos al apartamento a pegarnos una ducha y a preparar la maleta. Se acercaba el fin de nuestra maravillosa visita a Budapest


Después de recoger todo nos fuimos a tomar nuestro último vino caliente para despedirnos de esta gran ciudad que es Budapest.
A la camita y a soñar con todas las cosas que habíamos visto y las experiencias que nos llevábamos.
Al día siguiente la vuelta al aeropuerto fue según lo previsto y sin ningún inconveniente. Salimos puntuales y aterrizamos un poco antes de lo previsto.
Tocaba volver a casa, aunque por poco tiempo. Florencia nos esperaba.
