Mezquita de Santa Sofía ✏️ Diarios de Viajes de Turquia

Santa Sofía (Ayasofya Camii) es una de las atracciones que uno debe de ver en Estambul al menos una vez, porque si bien por el exterior es bonita pero no es que deslumbre, por dentro es sencillamente espectacular. Toda la zona del hipódromo de Constantinopla, Santa Sofía y Mezquita Azul está delimitado por vallas, teniendo unas zonas de entrada y otras de salida, vigiladas por la policía.
Es sábado y a las 8:45 nos presentamos allí, ya hay una cola que será de unos 200 m. A las 9 abren y por suerte la entrada es más o menos ágil, en la puerta toca descalzarse (llevamos bolsas y metemos nuestro calzado en nuestras mochilas) y nuestras féminas van preparadas con el correspondiente pañuelo para la cabeza.
Durante el viaje las visitas a las mezquitas supondrán un alivio para los pies, andar descalzo en su interior sobre las alfombras es placentero, más si llevas los pies cansados.
Cuando entramos ya están dentro todos los que iban delante, no son pocos, cuando salgamos ya habrá mucha gente dentro, casi demasiada diría yo, muchos se sientan en el interior, en medio, en cualquier parte dentro del espacio permitido para la visita, hay una zona no accesible que debe ser específica para la oración.