Antes de nada, y como siempre, agradecer a toda la gente que ayuda en el foro y que es de mucha utilidad, en este caso, sobre todo a Pistuka, que nos ayudó mucho en nuestros días en la ciudad.
Nuestro viaje empezaba a las 7:55 en Barcelona. Vuelo Barcelona-Budapest, con escala en Praga. El vuelo todo con Czech Airlines. Muy correcto todo. Puntuales y con un bocadillo en cada uno de los dos vuelos, tampoco se puede pedir más.
A la llegada al aeropuerto, ya nos estaban esperando para trasladarnos a nuestro hotel, aunque la verdad que está muy bien indicado para ir tanto en el bus como en taxi, el Mercure Budapest Museum. Muy buen hotel y muy recomendable. Muy centrico, se puede llegar andando a todos los sitios (o a casi todos). El desayuno bien, sin más, ya que no estaba nada mal, pero era siempre lo mismo.
Una vez llegados, nuestra primera parada: La cafeteria New York, en el hotel Boscolo. Decidimos ir alli porque teníamos que cambiar dinero, y nos recomendaron ir justo enfrente. La verdad es que es de los sitios que mejor encontramos el cambio, aunque es una cosa que tampoco nos tiene que importar mucho, ya que las diferencias entre unos y otros sitios no son muchas (entre 270 y 268 HUF los dias que estuvimos).
El cafe New York, increible, de película. Sólo entrar y la atención, ya se nota que es un sitio especial. Nos pedimos el chocolate con fresas que debe ser pecado porque uff.......
Una vez fuera, decidimos ir paseando poco a poco hasta la calle Vaci utca, la calle peatonal más famosa y con más tiendas. LA verdad que la calle es chula y se le ve que en verano debe de ser una gozada pasear por alli con las terrazas y tal, pero en invierno la verdad que nos dio la impresión de ser un poco desangelada.
Llegamos hasta el mercado y de alli subimos buscando dos objetivos: un sitio para cenar y que además echaran el futbol: es lo que tiene ser un poco friki del futbol
Finalmente, acabamos en una cerveceria irlandesa, el Irish Cat o algo parecido. Alli, la verdad es que cenamos de lujo y por unos 60€ todos (ibamos 6). Aqui ya nos dimos cuenta de que aqui sólo se come un plato por algo, porque las raciones son bastante generosas.
Una vez acabado, fuimos hasta el hotel a descansar, que el día había sido muy largo
Nuestro viaje empezaba a las 7:55 en Barcelona. Vuelo Barcelona-Budapest, con escala en Praga. El vuelo todo con Czech Airlines. Muy correcto todo. Puntuales y con un bocadillo en cada uno de los dos vuelos, tampoco se puede pedir más.
A la llegada al aeropuerto, ya nos estaban esperando para trasladarnos a nuestro hotel, aunque la verdad que está muy bien indicado para ir tanto en el bus como en taxi, el Mercure Budapest Museum. Muy buen hotel y muy recomendable. Muy centrico, se puede llegar andando a todos los sitios (o a casi todos). El desayuno bien, sin más, ya que no estaba nada mal, pero era siempre lo mismo.
Una vez llegados, nuestra primera parada: La cafeteria New York, en el hotel Boscolo. Decidimos ir alli porque teníamos que cambiar dinero, y nos recomendaron ir justo enfrente. La verdad es que es de los sitios que mejor encontramos el cambio, aunque es una cosa que tampoco nos tiene que importar mucho, ya que las diferencias entre unos y otros sitios no son muchas (entre 270 y 268 HUF los dias que estuvimos).
El cafe New York, increible, de película. Sólo entrar y la atención, ya se nota que es un sitio especial. Nos pedimos el chocolate con fresas que debe ser pecado porque uff.......
Una vez fuera, decidimos ir paseando poco a poco hasta la calle Vaci utca, la calle peatonal más famosa y con más tiendas. LA verdad que la calle es chula y se le ve que en verano debe de ser una gozada pasear por alli con las terrazas y tal, pero en invierno la verdad que nos dio la impresión de ser un poco desangelada.
Llegamos hasta el mercado y de alli subimos buscando dos objetivos: un sitio para cenar y que además echaran el futbol: es lo que tiene ser un poco friki del futbol

Una vez acabado, fuimos hasta el hotel a descansar, que el día había sido muy largo