Después de visitar Buda, tocaba visitar Pest.
Teníamos reservada la visita al Parlamento de las 11:30, así que hasta esa hora, decidimos hacer dos visitas: La sinagoga y la catedral de San Estebán. La primera no pudimos, ya que abren a las 10:00 y cierran los sábados, así que nos dirigimos a la Catedral. Es una iglesia bonita, quizás bastante diferente a la de Matias. Aquí es característico el ver el antebrazo?? de San Estebán, que está expuesta en una urna en el interior.
Tras salir de aquí, nos dirigimos al famoso puente de las cadenas, previo paso por el exterior del palacio Gresham, justo enfrente del Puente. El puente de las cadenas es una maravilla, pero le pondría un pero, imposible, pero un pero al fin y al cabo, y es que si fuera peatonal, ganaría mucho. Sí, ya se que es muy dificil, pero bueno, por pedir...
Directamente vamos a la entrada, enseñando nuestra hoja de reserva. LA visita es gratuita y a ser posible hay que reservar, puesto que si en febrero ya no había sitio por la mañana, no me imagino lo que será eso en Agosto...
LA visita, aunque corta, por lo menos te da una impresión de lo que es y ha sido este edificio del XIX. Las escaleras, la corona real, el hemiciclo, los puros... nuevamente todo lo que ya se ha explicado por aquí. De salida, nos dirigimos a la plaza en la que queda el monumento a los caidos del regimen comunista, aunque antes paramos en a estatua del puente de Imre Nagy.
Antes de ir a comer, decidimos ir a ver el homenaje a los judios en las orillas del Danubio: Una serie de zapatos. Es curioso y la verdad que impacta a la vista, más sabiendo lo que significa. Eso sí, esta escondidillo y te juegas literalmente el pellejo para poder llegar a él.
Después, a comer, como no. Este día comemos en un típco restaurante hungaro, de los que va la gente de a diario, pues esta al lado de la Universidad Europea. Muy barato, la comida más barata de todo el viaje, si bien el trato de la dueña es un poco, no se, grosero por decirlo de alguna manera.
Una vez comidos, nuevo paseo por Vaci Utca y al hotel, a vestirnos que nos vamos a la Ópera!! Una vez arreglados, nos vamos andando para poder ver la calle Andrassy y sus tiendas de lujo y sus palacios. A las 19:00, ópera: Il Barbieri di Siviglia. Cogimos las entradas de 13€, pero una vez dentro, merece más la pena sacarte las entradas de 1 o de 3€, porque se ve casi igual, y enterarte te enteras más o menos de lo mismo, así que si podeis, las entradas de gallinero que estan pegaditas a la "valla". Con todo, ele spectaculo es digno de ver y muy bonito, aunque no te enteres de mucho
Una vez fuera, a cenar, aunque ya no queda mucho abierto. Nos metemos en un Pizza Hut, que no es como los que conocemos aquí, sino que son más tipo restaurante normal. Pizza y ensaladas y a dormir, que otra vez el día había sido otra vez muy largo
Teníamos reservada la visita al Parlamento de las 11:30, así que hasta esa hora, decidimos hacer dos visitas: La sinagoga y la catedral de San Estebán. La primera no pudimos, ya que abren a las 10:00 y cierran los sábados, así que nos dirigimos a la Catedral. Es una iglesia bonita, quizás bastante diferente a la de Matias. Aquí es característico el ver el antebrazo?? de San Estebán, que está expuesta en una urna en el interior.
Tras salir de aquí, nos dirigimos al famoso puente de las cadenas, previo paso por el exterior del palacio Gresham, justo enfrente del Puente. El puente de las cadenas es una maravilla, pero le pondría un pero, imposible, pero un pero al fin y al cabo, y es que si fuera peatonal, ganaría mucho. Sí, ya se que es muy dificil, pero bueno, por pedir...
Directamente vamos a la entrada, enseñando nuestra hoja de reserva. LA visita es gratuita y a ser posible hay que reservar, puesto que si en febrero ya no había sitio por la mañana, no me imagino lo que será eso en Agosto...
LA visita, aunque corta, por lo menos te da una impresión de lo que es y ha sido este edificio del XIX. Las escaleras, la corona real, el hemiciclo, los puros... nuevamente todo lo que ya se ha explicado por aquí. De salida, nos dirigimos a la plaza en la que queda el monumento a los caidos del regimen comunista, aunque antes paramos en a estatua del puente de Imre Nagy.
Antes de ir a comer, decidimos ir a ver el homenaje a los judios en las orillas del Danubio: Una serie de zapatos. Es curioso y la verdad que impacta a la vista, más sabiendo lo que significa. Eso sí, esta escondidillo y te juegas literalmente el pellejo para poder llegar a él.
Después, a comer, como no. Este día comemos en un típco restaurante hungaro, de los que va la gente de a diario, pues esta al lado de la Universidad Europea. Muy barato, la comida más barata de todo el viaje, si bien el trato de la dueña es un poco, no se, grosero por decirlo de alguna manera.
Una vez comidos, nuevo paseo por Vaci Utca y al hotel, a vestirnos que nos vamos a la Ópera!! Una vez arreglados, nos vamos andando para poder ver la calle Andrassy y sus tiendas de lujo y sus palacios. A las 19:00, ópera: Il Barbieri di Siviglia. Cogimos las entradas de 13€, pero una vez dentro, merece más la pena sacarte las entradas de 1 o de 3€, porque se ve casi igual, y enterarte te enteras más o menos de lo mismo, así que si podeis, las entradas de gallinero que estan pegaditas a la "valla". Con todo, ele spectaculo es digno de ver y muy bonito, aunque no te enteres de mucho

Una vez fuera, a cenar, aunque ya no queda mucho abierto. Nos metemos en un Pizza Hut, que no es como los que conocemos aquí, sino que son más tipo restaurante normal. Pizza y ensaladas y a dormir, que otra vez el día había sido otra vez muy largo