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Llegamos a Nairobi hacia las 3:30 de la madrugada. Nada más bajar del avión entramos a la terminal en la que se encuentre en el frente los mostradores para los pasaportes y visados. El visado se puede hacer alli al llegar también, pero si lo llevas hecho más rapido es el trámite. Solo rellenas un certificado similar para declarar tu entrada al país, y ya sabes, fotito, deditos y listo.. ya podemos entrar. No hay muchos mostradores por lo que puede ser que el trámite sea un poco más largo, pero vamos en media hora o así lo tienes resuelto. Nada más pasar por todos estos trámites, salimos y recogemos nuestra maleta que ya estaba esperandonos. Antes de salir del aeropuerto, toca cambiar dinerito. Yo con mis euros, no hace falta llevar dólares, fui a la oficina de cambio. Alli la moneda es el chelín, y el cambio en las fechas de mi viaje estaba a 1,08. yo cambié unos 300 euros, ahí ya depende de lo que pienses gastar. Además en los hoteles también te cambian, es algo peor, pero tampoco un cambio exagerado. Yo cambié en un hotel, en el sarova del mara para ser exactos, y el cambio fue a 1.05, un poco menos pero nada. Si te sobra algo luego también en el aeropuerto te lo compran otra vez, entonces estaba la venta a 1,18. lo ideal es que te den muchos billetes de 100 chelines ya que l00 son unos 0,88 euros y es lo que más se da a los maleteros y tal, no es obligatorio, pero pensando que el salario de esta gente es bajo tampoco es tanto dinero y a ellos les viene genial. Ya con todo cambiado, la maleta lista, salimos del aeropuerto y pisamos suelo keniano. A la salida hay mucha gente de taxis y empresas con sus cartelitos esperando. Andamos y allí está, el cartel de Masikio con nuestro guia detrás, nuestro amiguete Charly. Charly nos dio una cálida bienvenida y tras coger nuestra maleta y ya que era tan temprano, nos acompaña a una cafetería a tomar un café y espabilarnos. Nos sentamos en la terraza, en la que se estaba muy bien, aunque ellos pasan mucho frío, ya que Charly nos recibió con gorro y bufanda! Nos dijo que cuando la temperatura es más baja como su temperatura mínima roda los 15 grados, pues claro, heladitos! Mientras nos tomamos el café, Charly aprovecha para contarnos un poco sobre la organización del país, las diferentes tribus que existen, como los kambas, a la que el señor chengo o Charly para los amigos, jajaja, pertenece. También de las viejas tradiciones que aún hoy persiste, como por ejemplo la de la dote que aún hoy siguen manteniendo, asi que si naces chica la familia dará saltos de alegria, pero si eres chico seguro no tanto, jajaja. Después de pagar, 550 chelines por dos cafes y un chocolate, unos 5 euros, nada caro además viendo las pedazos de tazas que nos pusieron, nos disponemos a encontrarnos con nuestro otro “rafiki”, amigo, el conductor Kasimba. No habla español, solo inglés, pero es un crack de tio, y sus 18 años en turismo se notan como ya vereís a lo largo del diario. Con todo cargado y ya dentro de nuestro coche que nos acompañará por 8 dias, salimos del aeropuerto y de Nairobi por la transafricana. Es muy temprano, sobre las 5:30 pero todo está despierto, la gente yendo a sus trabajos y los niños preparados para ir al cole. Y nosotros más, deseosos de nuestro primer contacto con Kenya. Nos espera un viaje largo hasta nuestro primer destino, Shaba. Mientras vamos recorriendo kilómetros y hablando con Charly sobre curiosidades del país, te vas dando cuenta del estado en el que vive esta gente, ya tienen pozos de agua donde ir a recogerla sin necesidad de hacer 10 kilometros diarios para conseguirla, pero las condiciones en las que viven son precarias.
Ves a un montón de niños solos, y muy pequeños, andando para ir al cole por unos caminos embarrados pegados a la carretera. Cuesta ver este paisaje pero es su vida a la que supongo que estaran más que acostumbrados.
Nuestra primera parada es en la línea del ecuador. Aquí bajamos a estirar las piernas y a ver la demostración para saber xk estás a un lado del ecuador y porque al otro. Esto lo dejo a vuestra sorpresa…pero es muy curioso.
Aquí te ofrecen si quieres comprar un certificado como que has pasado por ahí con tu nombre y tal pero cinco dolares! Después de la parada, seguimos nuestra ruta. Es importante que la idea que siempre tenemos de este pais, es de un sitio seco y nada más lejos de la realidad, tiene una exuberante vegetación. Muchas plantaciones, árboles, cereales, plátanos… plátanos que llegamos a probar ya que Kasimba compró a una chica en la carretera y estaban de miedo. Aunque la mayoría se los comió él, que devorador de plátanos…banana man!
Seguimos y empezamos a ver despuntar el monte Kenya lo que nos indica que nos queda poco. La carretera hasta esta zona es buena, asi que llegamos a nuestro final. Llegamos a la reserva de Shaba, se paga la entrada y comienza uno de nuestros primeros de los muchos que luego vendrían, Kasimba´s masajes! Jajaja . que botes! Empezamos a entrar en una zona boscosa hasta que llegamos a la entrada del Lodge, Shaba Sarova.
Nos reciben con una toallita húmeda que viene genial para el polvo del camino y un zumo. Nos explican todo lo que necesitamos saber para nuestra estancia, horarios de comidas, piscina y demás y un chico nos acompaña hasta nuestra habitación.
No sin antes ya haber quedado con Charly, nuestro primer safari empezaba a las 15:30. ya en la habitación y con todas las recomendaciones y explicaciones hechas, y dada la primera propina del viaje, 100 chelines. Tras ver la habitación
que tiene unas vistas increíbles, por la ventana de un lado da a los árboles donde pudimos ver a los monos de cara negra hasta cascarse pero bien, y por delante daba al río, una vista increible!
Una ducha rápida que llevamos muchas horas de viaje y a comer. La comida aquí es buffet. Mucha verdura, algunas suyas muy ricas y otras no tanto, arroz, pollo, ternera…los dulces lo más flojo pero en general en todos los sitios, nos son pais de golosos se conoce…. Las vistas son impresionantes desde el comedor, todo al aire, sin ventanas, y frente al río…
Cuando lleguamos traia poco agua y por la tarde noche había subido una barbaridad. Las bebidas es lo único no incluido. Nosotros bebemos agua, y una botella de litro, 271 chelines. Café o te si están en el buffet y además luego debajo, al lado del bar, ponen una mesita con café, te y pastas por si quieres a media tarde. Fueron super atentos los camareros y el staff del Shaba, siempre preocupados de si estabamos bien y contentos. Ya con la tripa llena, damos una vuelta por el hotel viendo sus instalaciones, piscina, bar y un mirador sobre el río que te permite verle a las mil maravillas.
Aquí vimos unos varanos al sol
Y tb los cocodrilos, tumbados tan a gusto al sol
Los monos siguen haciendo de las suyas, y un hombre solo encargado de espantarlos con un tirachinas ya que les encanta coger lo que no es suyo.
A las 15:30 como un clavo estamos en la puerta esperando nuestro primer safari. Salimos puntuales con nuestro techo levantado a la primera reserva que visitaremos, buffalo Springs
nada mas salir, por aqui andan los babuinos, a la sombra
Llegamos a la entrada y mientras pagan nuestros chicos la entrada, sacamos unas fotos
Pasamos y de pie, como estaríamos los ochos dias, siempre de pie, kilómetros y kilómetros, no nos sentabamos nada más que en los trayectos en carretera, como se sorprendia Charly que nunca fuesemos sentados ya que la mayoria de la gente solo se levanta a trozos o cuando se ve algo. Pero el ir de pie, sintiendo el aire y viendo esos paisajes no tiene precio…bueno si, la cantidad de moratones de arrearme golpes..pero sarna con gusto ni pica! Fue una buena tarde, vimos muchos animales..
Impalas
Cebra de grevy que solo se ve en la zona norte del pais, muy graciosa con su tripa blanca
Jirafa reticulada, para mi la más bonita
Orices beisas, muy fotogénicos, les encanta posar
Avestruces, una familia entera con sus crias, la avestruz somali, que tiene las patas y cuello azules
Gerenuk, estirando su largo cuello para comer
chacales
Es increíble estar alli y ver todos esos animales tan cerca de ti, sus ruidos, sus movimientos…el león no se dejo ver esta tarde pero fue una bienvenida muy buena.
Llegamos al hotel sobre las 18:30. en el camino de vuelta, Charly nos pregunta que queremos hacer el dia siguiente, safari de todo el día hasta las 2 o así o en tarde y mañana. Le decimos que mejor partido y asi no estar toda la tarde en el Lodge. Cada día Charly nos preguntaba y nos explicaba el planing del dia siguiente, a ver que nos parecia, si cambiabamos algo o no, y asi todos de acuerdo optabamos por una cosa u otra. Otra cosa buena de un viaje privado, que estando de acuerdo guias y clientes, una combinación perfecta! El safari te engancha, esa sensación del aire en tu cara mientras contemplas esas maravillas, tenemos hambre de animales! Queamos a las 7:30 de la mañana y nos despedimos hasta el dia siguiente. Damos un paseo por el Lodge hasta la hora de cenar.
Y tras la cena, la ducha y el repaso de las imágenes hechas y limpiar la cámara y los objetivos de polvo, porque ojo cuanto polvo, todos los dias, sin faltar uno, pero estamos de safari , es asi! Cuando llegamos a la habitación la cama está abierta con la mosquitera echada y lista para recibirnos,
ya más de 36 horas sin dormir pasan factura! Como aquí anochece muy pronto, a las 19 ya es noche cerrada, parece que es muy tarde ya a las 21, ponemos nuestro enchufe para los mosquitos, que en todos los hoteles los hay, aunque nosotros nos echabamos un poco de relec por la noche por si acaso, aunque tuvimos suerte, no nos picaron… las 21:30 y nos vamos a los brazos de Morfeo!!!
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