Por la mañana teníamos a las 10:30 un vuelo sobre la gran barrera desde el aeródromo que hay justo detrás del aeropuerto de Cairns, de hecho, la pista para despegar y aterrizar es la misma. Revisando el ordenador de buceo estábamos limpios desde las 3:00am así que sin problema. Inicialmente habíamos teníamos contratado el recorrido básico, pero una vez allí y viendo que la avioneta iba a ser solo para nosotros decidimos cambiar y hacer el vuelo largo que serían unos 45minutos. Gran acierto!!! Volar la GBR es una experiencia que recomendamos encarecidamente, de verdad. Por mucho que intentara explicarlo no sería capaz de describirlo, es brutal!! incluso puedes ver tortugas y mantas rayas desde el cielo cuando la avioneta vuela bajo.

Con bastante tiempo por delante hasta nuestro vuelo a Sydney (18:30 con Virgin Australia) decidimos exprimir los minutos e ir a Yungaburra. A escasos 30minutos de llegar nos encontramos la carrera cortada, había una concentración de coches deportivos (Ferrari, Porsche... ) y GT, la cual fue curioso de ver pero no era lo que nosotros habíamos ido a buscar. Así que media vuelta y regresamos a Cairns. Encontramos un parque cerca de la oficina de Sixt-East Coast donde hacer tiempo hasta finalmente devolver el coche y que nos llevasen al aeropuerto.

Como curiosidad, fue la primera vez que despegabamos dos veces de la misma pista en un mismo día.
Llegamos a Sydney un poco tarde (21:19h), llamamos un Uber y nos fuimos directos al hotel. Volvímos a alojarnos en la misma zona que en la ida (York St.).