Riviera Maya 2010 ✏️ Blogs of Mexico

Poco antes de mi cumpleaños conseguí persuadir a mi marido y me dejó reservar los vuelos Santander- Madrid- Santander con Iberia por 50€/pers, que es un precio muy bueno. Y ya empecé a concretar ofertas.
La verdad es que elegir este destino un año antes no me lo hubiese planteado, pero mi madre fue el año anterior (justo antes de mi boda) y volvió encantada, así que me dio envidia y dije: “Lo quierooooo”.
Desde entonces pasé mucho tiempo preparando el viaje, eligiendo lugares a visitar y demás.
A través del foro contacté con gente que iba las mismas fechas que nosotros y nos organizamos para realizar las excursiones por libre, en vez de ir a una agencia a contratarlas, que sale más caro, o coger las que promocionan en el hotel, que sale mil veces más caro aún.
Una vez reservado el paquete Hotel+Vuelos+Seguros ya sólo quedaba esperar a que se acercase la fecha, y mientras lo hacía yo iba planeando qué hacer cada día para aprovechar al máximo nuestra estancia allí.
La experiencia que tengo con la gente que quedamos en vernos allí fue maravillosa, la verdad es que nos lo pasamos en grande y eso hizo que las vacaciones fuesen más enriquecedoras.

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El día antes salí de trabajar a las 18:30, quedé con unas amigas para tomar algo y luego con Iván. Después me fui a dormir a casa de mi madre. A las 6:30 am vino Iván con mi cuñada a buscarme y nos fuimos al aeropuerto de Santander, llegamos 450 min antes del vuelo, facturamos y entramos a esperar. En principio salíamos a las 7:30 am.
Primer problema: retraso del vuelo casi 2 horas. Por suerte, el vuelo de Madrid no salía hasta las 14:30, así que aunque llegamos bastante tarde a Barajas tuvimos tiempo de aburrirnos por allí.
Nos pusimos a la cola de facturación prontito, así que conseguimos asientos en ventanilla y nos deshicimos de las maletas para poder deambular tranquilamente sin más trastos que el equipaje de mano.
Tanto nos evadimos que cuando nos dimos cuenta quedaban 30 min para el embarque. A todo meter a buscar la puerta de embarque y tonta de mi, me fié de mi marido (que la verdad, no es experto en esto de aeropuertos), así que acabamos justo en la otra de donde deberíamos estar. TE MATO!!!
Si antes fuimos rápido, ahora ya volábamos, 10 minutos para cerrar la puerta y nosotros a medio camino. El flato no me dejaba ni respirar y con la lengua fuera llegamos al autobús que te deja en la puerta del avión.
La gente nos miraba al subir, pero aún no nos movimos. Al poco subió otra pareja y 5 minutos más tarde la última. Al menos me consoló que no nos estuvieran esperando sólo a nosotros.
El avión despegó con 15 minutillos de retraso.
Teníamos 9 horas de vuelo por delante, que nos amenizaron con “Eclipse” (cuando lo anunciaron un grupo de chicas dieron grititos de ilusión y mi marido renegó de verla, me moría de la risa!!) y otra que no recuerdo, porque me quedé dormida a ratos.
La comida no estuvo mal, lo que eché en falta fue que pasaran más a menudo con bebidas, quizá porque cuando fuimos a Tailandia cada poco nos ofrecían... No sé.

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Cuando llegamos al México esperamos pacientemente a las maletas, que salieron de las últimas y nos pusimos a la cola para la comprobación de pasaportes. Sello y adelante, siguiente cola: la de comprobación de equipaje. Verde y a fuera!
Allí estaba una persona que nos indicó a que nº de autobús teníamos que dirigirnos, dependiendo del hotel.
Al salir del aeropuerto notamos ya el calor y la humedad. Eso, y que desde que habíamos bajado del avión hasta que salimos de los trámites había trascurrido el tiempo suficiente como para hacerse de noche, y tan sólo eran las 7 de la tarde!!!
Por suerte nuestro autobús sólo hizo una parada rápidisima para que bajaran 4 personas en un hotel anterior, ya que todos íbamos al mismo: Catalonia Yucatán & Riviera.
Respecto al hotel, la verdad es que no es el mejor del mundo, pero los servicios que presta están muy bien, y a nosotros lo que más nos interesaba era la situación para las excursiones y poco más. Desde luego si la intención que tenéis es quedaros en el hotel, éste tiene de todo, per los hay mucho mejores. Nosotros es lo que buscábamos y nos encantó.
Durante el camino nos repartieron las famosas pulseras del TI y unos vales de descuento para diferentes servicios del hotel. También nos comentaron la hora a la que había que estar en el hotel para la famosa reunión y la venta de sus excursiones/puyazos, a la que por supuesto ni nos presentamos.
Cocktail de bienvenida y alojamiento.
Cuando entramos en la habitación sorpresa! Era de 2 camas!!! pero bueno!!! A recepción a pedir cambio y ya puestos, decidimos subir de “nivel” la reserva. El cambio nos lo harían al día siguiente, así que nos tocaba dormir por separado.
Tal y como habíamos quedado, cada forero me envió un sms con el hotel y nº de habitación y yo me puse en contacto con el taxista, con el que ya había hablado mediante mails desde casa y con quien habíamos pactado un itinerario por un precio.
Nuestro primer día de viaje ya se había acabado, y aún no habíamos empezado... Pero cogeríamos fuerzas para el día siguiente.

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