Plan del día
(Estos "planes del día" que pongo al principio de cada etapa son los que teníamos originalmente pensados, pero varios días no coinciden con lo que luego haríamos, ya fuera porque algún sitio nos gustara más, por el clima o por otras razones. Pero bueno, los pongo igualmente por si a alguien le interesan)
Hoy, por fin, no tenemos que madrugar mucho Tenemos un día tranquilo y con tiempo de sobra para nuestros planes. Nos levantamos tranquilamente a las 8:30 y desayunamos a última hora en el hotel los restos que nos han dejado. Vamos andando ahsta Okachimachi y cogemos la Yamnote un par de paradas hasta la estación de Nippori. Ya que estamos aquí, aprovechamos para comprar los billetes del Keisei Skyliner para ir al aeropuerto el último día (snif, snif, el simple hecho de comprarlos hace que nos demos REALMENTE cuenta de lo POCO que nos queda de viaje....)
Recorrido por Yanaka
Salimos de la estación por el oeste y nos adentramos en el barrio de Yanaka, un remanso de paz dentro de la ciudad de Tokyo, sin centros comerciales ni neones ni grandes calles...es una isla dentro de la ciudad, con pequeños templos y santuarios dispersos, calles estrechas apenas sin tráfico y casas viejas pero con su encanto...
Nada más salir de la estación y subir una pequeña cuesta nos encontramos con el primer templo, el Tennoji. Es temprano y está desierto. Entramos al jardín a echar un vistazo: un césped verdísimo, un par de edificios de arquitectura típica, una estatua de buda, un cerezo en flor, un silencio total....¿qué más podemos pedir para empezar el día?
Al salir del templo estamos ya en el cementrio de Yanaka, con sus miles de tablillas de madera. Damos un paseo por la calle principal, con las flores de los cerezos cayéndonos en la cabeza, nos adentramos por las calles secundarias, nos dejamos perder dos o tres veces...es un lugar que inspira tranquilidad.
Seguimos andando y salimos del cementerio, adentrándonos en el barrio en sí. Vamos viendo las casitas, entramos en alguno de los pequeños santuarios que encontramos por el camino... la verdad es que hemos empezado el día muuuuy relajados...
Calllejeando un poco más, llegamos a la calle más famosa del barrio, la Yanaka Ginza street, repleta de pequeñas tiendas de barrio, donde puedes encontrar de todo: hay perfumerías, pescaderías, supermercados, puestos de comida rápida con rebozados variados...
Tras recorrernos la callecita hasta el final, nos dirigimos hacia la parada de metro de Sendagi, que está cerca. Allí cogemos la línea Chiyoda hasta Nezu. Es sólo una parada, pero no pensamos andar ni un metro más de lo necesario Al salir del metro estamos un poco desorientados y tenemos que preguntar por dónde queda el parque Ueno, pero enseñando el mapita dl parque y poniendo cara de “¿hacia dónde?” nos indican rapidamente.... Ya lo dije en la etapa del primer día: el japonés se habla poniendo caras.
Recorrido por Ueno
Empezamos a andar en la dirección indicada, pero por las calles laterales en vez de la principal, que es más aburrida. Al poco, empezamos a ver el parque a nuestra izquierda, y llegamos a lo que parece una entrada, pero hay un guardia de seguridad y una barrera. Nos paramos y empezamos a mirar nuestro mapa, y claro, el guardia que nos ve no duda en llamarnos, y una vez que nos acercamos saca de la garita unos planitos del parque en los que está marcado dónde estamos y la entrada más cercana, un poco más adelante.... Están en todo....
Así que seguimos un poco más y tras pasar bajo la vía del monorail llegamos, ahora sí, a la entrada. Nada más entrar, nos damos de bruces con el Toshogu, que está de obras por lo que no entramos.
El toshogu en obras...¿a que parece de verdad?
Caminamos por el parque, que está espectacular son sus miles de cerezos en flor. Es uno de los lugares más concurridos de Tokyo en esta época, y está lleno de esos plásticos azules que ponen para hacer sus picnic.
Llegamos a una calle amplia del parque y nos acercamos hasta la gran fuente central, con el Museo Nacional de Tokyo detrás. En este parque hay varios museos (Museo Nacional de Tokio, Museo Nacional de Ciencia de Japón, Museo Nacional de Arte Occidental) e incluso un zoo, pero como hace bueno no nos planteamos entrar a ninguno, lo dejamos para otra ocasión.
Seguimos paseando y llegamos al gran estanque Shinobazu, llegando hasta su isla central con el templo dedicado a la diosa Benten. Sé que me repito, pero esta zona está preciosa con los cerezos en flor....
Cruzamos al otro lado del estanque y lo rodeamos para alcanzar la acera donde está el auditorio y el museo Shitamachi, y salimos del parque para adentrarnos de nuevo en la gran ciudad, y comer algo por allí.
Después de comer, queremos visitar una de las zonas más animadas de la ciudad: el mercado de Ameyoko. Situado practicamente bajo las vías del tren (es la línea roja del mapa de Ueno de arriba), es una locura de lugar, y más comparado con la tranquilidad de esta mañana. Cientos de tiendas, miles de personas, los dependientes gritando y la música a todo volumen.....¿echábamos de menos la ciudad? Aquí encontramos desde zapaterías hasta cerduras, desde caramelos hasta electrónica, desde pescado hasta ropa militar.....Una auténtica locura....que nos encanta!!!
Ameyoko!!
Al terminar la calle del mercado, decidimos saltarnos la última visita de la mañana, que era el Yushima Tenjin Shrine, y cogemos la Yamaonote en la estación de Ueno para acercarnos a Akihabara. Para nosotros no es un barrio estrella, porque no venimos con intención de comprar electrónica ni somos aficionados al manga, pero merece la pena darse una vuelta al menos por allí. Nada más salir del metro parece que estás en otro mundo (de nuevo; y es que esta sensación la tuvimos todos los días en todos los barrios). Tiendas repletas de cacharritos, figuritas, mangas....los dependientes en la acera con megáfonos anunciando a gritos su mercancía, chicas disfrazadas repartiendo panfletos, las baldosas del suelo que representan robots, ordenadores, bombillas... Pasamos un rato por allí y entramos en un Yodobashi a mirar las cámaras, ordenadores y demás....
Akihabara
Cuando nos cansamos de curiosear, nos preguntamos a dónde ir, ya que no era muy tarde aún. ¿Por qué no volvemos a Shibuya? Dicho y hecho, cogemos el tren y nos plantamos allí en apenas 20 minutos. ¿Creíamos el otro día que había mucha gente? Muchachos, hoy es viernes y esto está que arde! Millones o trillones de personas están aquí, esperando con Hachiko a sus amigos, cruzando hacia todas direcciones a la vez, entrando y saliendo del metro.....
Como el otro día vimos las calles, hoy dejamos las chaquetas en una taquilla, que hace calorcito, y nos vamos a ver tiendas. Entramos al Tokyu Hands, al Loft, al Parco....Y bueno, ya sabeis, en estos casos se te pasa el tiempo volando, así que estuvimos por ahí hasta la hora de cierre.... De ahí a cenar y vuelta al hotel, meditando por el camino si pegarnos o no el madrugón mañana para ir a la subasta del mercado de Tsukiji....