TAILANDIA Y CAMBOYA POR MENOS DE 1000€, VIAJE MARCA DE LA CASA ✏️ Blogs de Tailandia13 días completos y 15 de viaje en estos dos países que tanto habíamos soñado visitar. Organizado todo por nuestra cuenta, sin prisa pero sin pausa.Autor: MarinaW Fecha creación: ⭐ Puntos: 4.8 (19 Votos) Índice del Diario: TAILANDIA Y CAMBOYA POR MENOS DE 1000€, VIAJE MARCA DE LA CASA
01: Razones, preparativos, presupuesto e itinerario
02: Dia 1 - Llegada a Bangkok
03: Día 2 - Bangkok Completo: 7 Templos, MBK y Mercado Patpong
04: Dia 3 - Ayutthaya, masaje y la mejor azotea de Bangkok
05: Día 4 - Llegada a Camboya con visita a Beng Mealea
06: Día 5 - Templos de Angkor desde el amanecer
07: Día 6 - Últimos templos en Angkor y Muay Thai en Chiang Mai
08: Día 7 - Chiang Mai: Woody Elephant, Tiger Kingdom y Night Market
09: Día 8 - Chiang Mai: Templos en moto y Sunday Night Market
10: Día 9 - Llegada a Koh Phi Phi y primer contacto
11: Día 10 - Koh Phi Phi Leh (Maya Bay) en Long Tail y View Point
12: Día 11 - Llegada a Ao Nang y... Monzón
13: Día 12 - Railay y más lluvia
14: Día 13 - Phuket, despedida y conclusiones
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Etapas 1 a 3, total 14
Recuerdo que la primera vez que oí hablar de Tailandia tendría unos 9 años. Los padres de una compañera de colegio se habían ido de viaje a ese lejano país que en aquel momento me sonó a hecho de oro. Cuando tenía 15, fue mi madre la que tuvo la suerte de visitarlo; vino maravillada, hablando de otro mundo. Desde entonces mis ganas de viajar a esas tierras no han hecho más que aumentar. Los años pasaban y veía como otros familiares y amigos partían hacia el país de las sonrisas, pero mi momento no llegaba. Mi chico compartía ese deseo y el año pasado decidimos que de éste no pasaba.
Fue a principios de enero cuando vi los vuelos Madrid-Bangkok por 399€ y sin dejar pasar la oportunidad, aligeré los trámites en el trabajo para tener las fechas definitivas de vacaciones y poder reservar. Sabemos que verano no es la mejor época para visitar el país, pero es la única en la que podemos hacerlo, por tanto, aquello no nos iba a detener. Finalmente, compramos los vuelos días después pero nos pareció mejor la opción de volver desde Phuket y ahorrarnos tiempo y un vuelo interno. El itinerario lo teníamos claro. Queríamos ir a Bangkok, disfrutar de la naturaleza en Chiang Mai y acabar con una semana de “semi-relax” en las costas del mar de Andaman. Sí, las playas del golfo tienen mejor pronóstico para esta época pero yo no contemplaba la posibilidad de quedarme sin ver Maya Bay. También teníamos muy presente la opción de Camboya. Nos parecía un pecado estar tan cerca de los templos de Angkor y no visitarlos, por lo que decidimos dedicar unos días a esta maravilla aunque eso supusiera apretar un poco más el itinerario. Hoy no podemos estar más felices de haber tomado esta decisión; fue lo mejor del viaje. Teniendo claro cuanto tiempo aproximado le queríamos dedicar aquel lugar, compramos los vuelos internos y cerramos el planning definitivamente. Todo nos ha cuadrado a la perfección. A priori puede parecer poco tiempo para cada ciudad pero os aseguro que cumplimos con creces con todo lo que llevábamos en nuestro cuaderno. Sábado 25/06/2016: Salida de Madrid Domingo 26/06/2016: Llegada a Bangkok Lunes 27/06/2016: Bangkok Martes 28/06/2016: Bangkok Miércoles 29/06/2016: Siem Reap Jueves 30/06/2016: Siem Reap Viernes 01/07/2016: Siem Reap – Chiang Mai Sábado 02/07/2016: Chiang Mai Domingo 03/07/2016: Chiang Mai Lunes 04/07/2016: Koh Phi Phi Martes 05/07/2016: Koh Phi Phi Miércoles 06/07/2016: Ao Nang Jueves 07/07/2016: Ao Nang Viernes: 08/07/2016: Ao Nang – Phuket Sábado 09/07/2016: Phuket - Madrid Vamos con los detalles: VUELOS Los buscamos con la opción de multidestino de Skyscanner y reservamos a través de Edreams tras comprobar que comprando directamente los mismos en la página de Qatar Airways el precio se disparaba a casi el doble. Es cierto que los horarios no eran los mejores para aprovechar al máximo pero la diferencia de precios con otros era abismal. Al menos, las escalas eran cortas y el servicio de Qatar, excelente. Vuelo Internacional MADRID – BANGKOK (Escala en Doha) y PHUKET – MADRID (Escala en Doha): 481,46 €/ persona. Vuelos Internos Los buscamos con Skyscanner y los reservamos a través de la página de Air Asia. Al facturar maleta y pagar con cualquier tarjeta el importe final difiere bastante del inicial, pero aún así sigue siendo bastante económico. Escogimos los horarios que nos permitían aprovechar más el día. BANGKOK – SIEM REAP: 64,99 €/ persona SIEM REAP – CHIANG MAI (Escala en Bangkok, no hay vuelo directo): 141,50€/ persona CHIANG MAI – KRABI: 50,84€/ persona Como he dicho, se incluye en el precio una maleta facturada por persona. Total vuelos: 738,79 € / Persona HOTELES Contentísimos con todas nuestras elecciones. Escogimos hoteles de 3-4 estrellas, económicos, bien situados y asegurándonos que contaban con piscina y aire acondicionado en las habitaciones. Los reservamos a través de Booking con la opción de “sin pago por adelantado” o al menos no hasta que se fuera acercando la fecha. A excepción del de Krabi, todos los pudimos pagar allí con tarjeta. Nos avisaron desde las recepciones de que el banco nos cobraría un 3% de comisión pero preferimos eso a llevar todo el efectivo. BANGKOK: Rambuttri Village Hotel. 3 noches en habitación doble con desayuno por 93,52€ en total. SIEM REAP: Le Tigre Hotel. 2 noches en habitación doble por 31€ en total. CHIANG MAI: Thana Hotel & Guest House. 3 noches en habitación doble por 37,42€ en total. KOH PHI PHI: JJ Residence. 2 noches en habitación doble por 76,82€ en total. AO NANG: Krabi Heritage Hotel . 2 noches en habitación doble por 49€ en total. PHUKET: Phuket Airport Hotel . 1 noche en habitación doble con traslado al aeropuerto por 50€ en total. Recomendamos todos. Total Hoteles: 168,88€/ persona SEGURO Al viajar a un país tropical en la otra parte del mundo, esta vez no quisimos correr riesgos y cogimos un seguro completísimo con Mapfre que contemplaba cualquier tipo de incidencia médica, y con el equipaje, pasando por catástrofes naturales y pérdida de documentación. Al coger todo con tanta antelación y por circunstancias personales, quisimos contratar un seguro de anulación que cubriera la totalidad de los gastos del viaje y así lo hicimos con este. El total fue de 60€/ persona. VACUNAS Ninguna obligatoria pero todas recomendables. Preguntamos al médico de cabecera, que nos remitió al Centro de Vacunación Internacional. Ahí nos recomendaron la de la Fiebre Tifoidea y la de la Hepatitis A, así como que revisaran si todas las que estaban en el calendario de vacunación estaban al día. Volvimos de nuevo al centro de salud y nos pusieron la de la Hepatitis y recetaron la oral para la Fiebre Tifoidea, Vivotiv. TOTAL DEL VIAJE: 907,67€/ persona Etapas 1 a 3, total 14
Nuestro vuelo salía a las 23:55 del sábado 25 de Junio del aeropuerto de Barajas. Matamos el tiempo y nos nervios previos viendo un partido de la Eurocopa en las pantallas hasta que comenzó el embarque. Volar con Qatar Airways es una maravilla, con todo el sistema de entretenimiento modernizado, infinidad de películas (muchas de ellas recientes), series, documentales, música, juegos y una opción para ir monitorizando el vuelo que a mí me tenía muy tranquila, además de un pack con pantuflas, tapones, antifaz, artículos de aseo y por supuesto la manta.
Tuvimos 3 servicios de comida, toda bastante buena y entre tanto trajín y alguna que otra cabezada, llegamos a Doha a las 07:00 de la mañana. El aeropuerto esta completamente preparado para el tránsito de pasajeros y no tardamos nada en llegar a la puerta de embarque de nuestro siguiente vuelo, que salía a las 08:35. Si el primer vuelo fue bueno, éste fue aún mejor. El servicio era el mismo, pero cambiaba el modelo de avión: el gran Airbus A380. Ni se movió durante todo el trayecto, una maravilla. Aterrizamos en Bangkok 6 horas y media más tarde, a las 19:00 hora local. Pasamos los controles y recogimos las maletas sin incidencias. Lo primero que hicimos fue bajar a la zona donde se coge el BTS para cambiar dinero en la oficina de Superrich, que ofrece el mejor cambio de Tailandia según habíamos comprobado. Cambiamos tanto Bahts como a dólares para nuestra visita a Camboya y subimos de nuevo a la parte de arriba a buscar transporte. Nuestro hotel estaba en Kao San Road, la zona de los mochileros, por lo que no tenía ningún sentido ir en metro ya que luego habría que coger un transporte adicional. Preguntamos a los taxistas y todos los pedían 400-500 THB y se negaban a poner el taxímetro, así que nos decidimos por la opción de una furgoneta compartida que nos dejaba directamente en Kao San Road por 100 THB cada uno. Tuvimos que esperar varios minutos a que apareciera algún viajero más y tras media hora nos adentramos en esta metrópolis comprobando por primera vez la imprudente forma de conducir de los tailandeses. Eso sí, no vimos ningún accidente durante todo el viaje. La furgoneta nos dejó prácticamente en la entrada de nuestro hotel, el Rambuttri Village Plaza, un resort para presupuestos mochileros, como rezaban los carteles. La verdad es que o tenemos ninguna queja, limpieza, buenos servicios y buena ubicación. Para no llevar tanto efectivo, pensamos realizar el pago de todos los hoteles con tarjeta, pero nos avisaron que el banco cobrarían un 3% de comisión. No nos importó. Tras una ducha rápida y el aviso a la familia, fuimos a por nuestro primer contacto con esta ciudad en la que tantas veces nos habíamos imaginado. Paseamos por la siempre bulliciosa Kao San Road, plagada de puestos callejeros, pubs con música de todos los estilos en directo, tiendas de souvenirs y hordas de turistas jóvenes. Era tal y como la habíamos visto miles de veces en los programas Cuatro, que son muy de recurrir a esta zona. Después de recorrer la calle en ambos sentidos, nos dirigimos a la paralela Rambuttri para cenar. Esta calle, si bien también está llena de puestos, locales de masaje y bares, es mucho más tranquila que la anterior. Aquel día necesitábamos sentarnos para cenar y observar tranquilamente, dejando que nuestra mente se fuera haciendo todo lo que nos rodeaba. Lo hicimos en la terraza de Magic Thai Food, donde degustamos piña con arroz, pad thai de pollo y tres bebidas por un total de 146 THB ¡Viva Tailandia! Nos encanta la gastronomía y somos asiduos de restaurantes asiáticos, especialmente tailandeses, allá a donde vamos. El pad thai nos vuelve locos y teníamos claro que en Tailandia iba a caer uno casi a diario. Estábamos deseando comprobar si el autóctono era mejor que las versiones preparadas en Europa y de momento no defraudaba. De postre quisimos probar el dulce callejero más famoso del país: el rottee. Es un crepe de masa muy fina que puede ser dulce o salado y con distintos aderezos. Su preparación es todo un espectáculo, los cocineros hacen unos malabares la mar de vistosos con la masa. Compartimos uno de crema de cacahuete y plátano por 45 THB y regresamos al hotel para por fin, descansar bien. Prácticamente sólo teníamos un día para ver Bangkok y nos lo íbamos a comer. GASTOS DEL DÍA PARA 2 PERSONAS Van del aeropuerto a Kao San Road: 200 THB Cena: 146 THB Rotee de postre: 40 THB TOTAL: 386 THB Etapas 1 a 3, total 14
Bangkok. 07:00 de la mañana. Suena el despertador. Si había algún ápice de cansancio o jet lag estaba bien escondido entre nuestras ganas de descubrir la ciudad. El Palacio Real abría a las 8:30 y queríamos ser los primeros. Ducha, mochila y bajamos a disfrutar del desayuno incluido en el precio del hotel. Fue una gozada poder hacerlo en la terraza del restaurante y junto al estanque. Nosotros cogimos un poco de todo: fruta, tostadas, bollos y arroz frito (sí, arroz frito).
Antes de salir preguntamos en recepción cuanto nos pediría un tuk tuk por llevarnos hasta el palacio. Nos dijeron que unos 400 THB, nos pareció demasiado comparándolo con el precio que pagamos el día anterior para venir del aeropuerto, pero efectivamente comprobamos que era así. Preguntamos a varios taxistas y nos daban el mismo precio, negándose a poner el taxímetro hasta que uno joven y sensato accedió y en pocos minutos nos dejó en nuestro destino por 40 THB. Como podéis ver, la diferencia es abismal. Llegamos justo cuando estaban abriendo, así que compramos nuestras entradas sin cola por 500 THB cada uno y comenzamos a explorar Wat Phra Kaew, el templo del buda esmeralda, con una efímera tranquilidad. Y digo efímera porque pocos minutos después, el recinto comenzó a llenarse y no os quiero ni contar como estaba una hora después. Poco más que contar de este lugar que no se haya dicho. Vivos colores, formas espectaculares e innumerables rincones únicos que nos dejaban con la boca abierta. Todo era nuevo para nosotros y lo disfrutábamos como niños. Pasamos al área del palacio real justo cuando se estaba realizando el cambio de guardia ¡menuda suerte! Esta parte es mucho más tranquila y menos transitada que la anterior, pero también menos vistosa. En cualquier caso, a nosotros todo nos parecía precioso. Nos sentamos unos minutos a reponer líquido en un pequeño bar del interior antes de poner rumbo al siguiente destino: Wat Pho. A la salida nos encontramos con los típicos transeuntes que nos decían que Wat Pho estaba cerrado. Ni caso. Fuimos caminando y llegamos en pocos minutos. A la entrada, nos encontramos con un simpático local que nos preguntó sobre nuestro viaje e itinerario de forma desinteresada, fue muy amable! Compramos las entradas por 100 THB cada uno y nos adentramos en este nuevo templo. Vimos un gong enorme cerca de las taquillas y no pudimos evitar hacerlo sonar. Las vibraciones que emitió fueron estremecedoras, pero hay que admitir que hay mucho de zen en ese sonido. Salvo la parte del buda reclinado, el templo estaba prácticamente desierto. Nos gustó mucho poder recorrerlo en medio de esa tranquilidad, recreándonos en sus filas de budas dorados y en los pequeños azulejos que decoraban sus estupas. Este templo alberga una escuela importante de medicina tradicional y masajes y pudimos ver a sus estudiantes recorrerlo. También nos encontramos a un pequeño monje que recolectaba donaciones y quisimos colaborar. Para finalizar, dejamos la parte más famosa y a la vez concurrida: El Buda Reclinado. Sus 46 metros de largo y 15 de alto dejan boquiabierto a cualquiera. A pesar de la multitud, recorrimos toda la figura alucinados. Habíamos leído que sus pies, con preciosas incrustaciones, habían estado cubiertos por remodelación recientemente. Por suerte, pudimos verlos aunque no todo lo cerca que nos hubiera gustado. Muy satisfechos con lo que hasta entonces estábamos viendo, seguimos con nuestro recorrido. Sabíamos que Wat Arun seguía en su profunda remodelación y no nos compensaba visitar el templo en ese estado con la apretada agenda que teníamos, sólo lo vimos desde el otro lado del río. También teníamos pensado hacer un paseo en barca por los Khlongs, pero a mi novio no le atraía nada la idea de ver tantísima suciedad y las miserias de la gente, así que continuamos con nuestra ruta de templos. El siguiente era Wat Saket o Golden Mount. Tuvimos que enseñarle el nombre escrito al taxista porque por “Golden Mount” no tenía ni idea. Con el taxímetro en marcha, nos cobró 70 THB por la carrera. Compramos las entradas por 20 THB cada uno y comenzamos el ascenso por sus largas escaleras. Fuimos parando para ver los pequeños estanques con tortugas que había a los lados y a tocar las típicas campanas sin tener que rivalizar con otros turistas. A pesar de que el templo se encontraba también en remodelación, disfrutamos mucho la visita, entre otras cosas por las panorámicas que tuvimos de Bangkok desde la cima y porque pudimos hacer nuestra primera ofrenda, un momento muy especial con el olor del incienso, el fino tacto del pan de oro y los cantos de los monjes de fondo. En la tienda del templo nos compramos una de las bebidas que nos iba a acompañar durante todo el viaje: Un té helado de limón y miel que nos encantó. 20 THB. Una vez abajo, fuimos andando a un templo cercano, Wat Ratchanatdaram. Me interesaba bastante visitar este complejo porque, con sus agujas negras, me pareció distinto a todos los demás. Lamentablemente también estaba en reformas, pero pudimos hacernos una idea. Nos dirigimos después andando a Wat Suthat y al columpio gigante. Según el mapa, estaba bastante cerca y por el camino pudimos ver además multitud de tiendas de decoración con enormes budas, pero ojo, en los templos te advierten de que es ofensivo usar su cabeza a modo de objeto decorativo, así como para tatuaje. Llegamos al fin al columpio gigante, una estructura de 20 metros de alto en la que muchos atrevidos locales se columpiaban para intentar alcanzar una bolsa de monedas de oro. En 1935 se canceló la ceremonia por el elevado número de accidentes, muchos de ellos mortales. Pagamos la entrada de 20 THB cada uno al templo de Wat Suthat, construido para albergar un gran buda de bronce procedente de Sukhothai. Recorrimos todos los rincones del templo prácticamente en soledad y nos sentamos en el templo principal rodeados de tailandesas para escuchar la ceremonia que estaba teniendo lugar. Una experiencia muy interesante mientras reposábamos al frescor de los ventiladores. Hacía calor y humedad aunque el cielo estaba con una ligera neblina, pero la verdad es que nos lo imaginamos peor. Tomamos un taxi hacía la zona de Chinatown por 67 THB y nos dejó en la puerta de Wat Traimit, el templo del buda de oro. Compramos las entradas por 40 THB cada uno, con acceso sólo al templo y no al museo. El templo de mármol con agujas doradas nos gustó bastante, pero sin duda la joya era el enorme buda oro macizo, 3 metros de altura y 5 toneladas de peso… y la historia que hay detrás de él. Resulta que hace cientos de años los monjes cubrieron esta estatua de estuco para protegerla de los saqueos de los birmanos y con el paso de los años fue quedando en el olvido. Era una estatua más. Siglos después, en medio de la remodelación de un templo en Bangkok, una grúa golpeó accidentalmente la figura y se descubrió que se trataba de un tesoro de incalculable valor. Ya eran las tres de la tarde pero seguíamos sin hambre. Habíamos bebido tanto para apagar la sed que teníamos al estómago engañado. Como estábamos en la zona, decidimos ir a dar un paseo por Chinatown. Ahí es donde experimentamos por primera vez el caos tan típico de las ciudades del sudeste asiático. Los carteles de neón, la multitud, la herrumbre cubierta por el humo del tráfico… y pesar de lo mal que suena esta descripción, estábamos fascinados. Era otro mundo. Recorrimos las callejuelas hasta que nos adentramos en un interminable mercado con tiendas de todo tipo, donde hicimos la compra de nuestros primeros souvenirs. Y cuando digo de todo tipo, es de todo tipo, desde mercerías hasta pescaderías, pasando por tiendas de bolsos y de artículos de pesca. A la salida, nos detuvimos a observar los canales de la zona. En ese momento me alegré de haber descartado el paseo en barca. Tomamos otro taxi por 60 THB hasta la zona de Silom. Queríamos visitar el templo hindú Sri Mariamman. La verdad es que me esperaba más, pero quería tener mi primer contacto con la arquitectura hindú. El exterior es bastante curioso, pero el interior me pareció un mercado o un bar, siento si a alguien le ofende. La entrada es gratuita y recomiendo la visita si tenéis tiempo y estáis por la zona. Ibamos muy bien de tiempo y aunque continuamos sin mucho apetito, paramos en un 7/Eleven a comprar varias cosas: repelente para mosquitos (llevábamos de España pero preveíamos que nos íbamos a quedar cortos. Además este es igual de efectivo y mucho más barato, sólo algo más de 1€ al cambio frente a los más de 10€ del Relec), bebidas y unos sandwiches a la plancha de los que íbamos a echar mano varias veces en el viaje. Esta vez cogimos 2 de gambas y carne desmechada con una salsa dulce, muy ricos. Todo nos costó 124 THB ¡Viva el 7/Eleven! Cogimos otro taxi más por 60 THB hasta el famosísimo centro comercial MBK. Todo lo que habíamos leído era cierto: Dimensiones enormes y tiendas de todo. No obstante, no conseguimos grandes rebajas por parte de los comerciantes a pesar de nuestras dotes de regateo, pero nos llevamos una idea general de cómo estaban los precios. Reservamos las compras para el siguiente destino. Taxi de vuelta a la zona de Silom por otros 60 THB para visitar el mercado nocturno de Patpong. Justo cuando llegamos, ya de noche, comenzó a caer una gran tromba de agua, pero gracias a un rudimentario pero efectivo sistema de canalones y toldos no nos mojamos absolutamente nada mientras recorríamos los puestos. Ya podríamos aprender aquí, que caen cuatro gotas y las ciudades se vuelven un completo caos. En esta ocasión si que picamos. Camisetas, zapatillas, pantalones de muay thai… Los precios nos parecieron más económicos que en el MBK y los comerciantes mucho menos peleones en el regateo. Después de un par de horas, cogimos un taxi de vuelta a nuestro hotel. Nos duchamos y bajamos a cenar justo en los locales de debajo más que nada porque estaban echando el partido de España. Pedimos brochetas satay para compartir, arroz frito y tortilla al estilo tailandés, todo nos costó 390 THB. De postre, nos tomamos un dos rotees por 90THB de leche condensada y nutella mientras paseábamos por los puestos de Rambuttri. Los pies ya no nos daban para más y nos retiramos a la habitación más que satisfechos, habíamos recorrido prácticamente todo lo que nos interesaba de Bangkok en un solo día ¿Alguien da más? GASTOS DEL DÍA PARA 2 PERSONAS Entradas al Gran Palacio: 1000 THB Entradas a Wat Pho: 200 THB Entradas a Golden Mount: 40 THB Entradas a Wat Suthat: 40 THB Entradas a Wat Traimit: 40 THB Comida y compras en 7/11: 124 THB Bebidas varias: 117 THB 7 Taxis: 437 THB Cena: 390 THB Rotees de postre: 90 THB TOTAL: 2478 THB Etapas 1 a 3, total 14
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