Por el desierto a El Fayum ✏️ Blogs de Egipto

Por el desierto a El Fayum + Alejandría

Proyecto.-


Primera parte.-

Circunvalación del llamado Oasis de El Fayum, partiendo de Cairo, viajando en vehículo 4x4 por la ruta del desierto, pasando por el poco conocido Valle de las Ballenas, por los lagos salados de Qarun, por diferentes templos y pirámides, así como por las únicas cataratas existentes en Egipto.

Segunda parte.-

Alejandría, la capital mediterránea, visitando al completo sus lugares mas significativos para terminar posteriormente en Luxor, después de viajar en tren cama.


Primer dia.-

Vuelo MS768 de Egyptair, encuentras vuelos mas económicos, pero no con la ventaja de que en solo cuatro horas te pones en la capital cairota.


Se nota la reactivación del turismo, desde 2011 , fecha de la revolución árabe en Egipto, hemos viajado 11 veces desde entonces y ha sido la primera vez que largas colas nos han recibido para pasar la aduana, una vez adquirido el visado y cambiado algo de dinero, atravesamos el hall de la terminal numero 3 de llegadas internacionales del aeropuerto, pero sin pisar la calle y mediante un puente, llegamos a nuestro alojamiento para esta noche, el Le Meridiane Airport Cairo, un cinco estrellas muy nuevo, situado en el mismo aeropuerto.

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Son las 6 en punto de la mañana, así de puntuales han sido nuestros acompañantes de esta nueva aventura por tierras egipcias, Khalil nuestro amigo de penurias en varios viajes , nos presenta al que será nuestro: Conductor + cocinero + solucionador + pertrechador + y casi beduino, porque aunque cairota , este cristiano ortodoxo, con su bagaje de excelente conductor, perfil griego, hablante de cinco lenguas, y con un buen sentido del humor, transmite seguridad y serenidad por su conocimiento de estos desolados y bellos parajes del Sahara, no olvidaremos fácilmente a Raafat, nuestro ángel de la guarda.


Un Toyota Land Cruiser 4x4 de 4500 cc, de doble deposito de carburante, completamente equipado para la ruta que nos espera, GPS, herramientas, víveres, fogones, sacos de dormir, tiendas, agua abundante, una verdadera caja de sorpresas que fuimos descubriendo en el trascurso del viaje.



Después de las presentaciones, emprendimos el camino rodeando la ciudad del Cairo hasta alcanzar la carretera al sur, del oeste, una autopista construida por el ejercito egipcio, la cual abandonamos después de unas dos horas, dejamos atrás el asfalto para adentrarnos el Sahara, previamente Raafat deshincho los neumáticos para ganar adherencia al tiempo que descansamos tomando un agradable té recién hecho.


Desheret

Los vientos Etesios, son los vientos periódicos del norte, vientos generados, por el calentamiento y enfriamiento del desierto de Libia, en los mares del Egeo. Son los vientos que empujan las velas río arriba, son los vientos que hacen que el Nilo sea de terciopelo por las tardes, son los vientos que dan forma a esta parte de mi querido Egipto.

El Sahara se presenta majestuoso, impresionante, realmente te sientes pequeño ante tanta belleza, como un punto en este espacio (al parecer desolado) en realidad lleno de vida, la evidente y la que nosotros también consideramos así, las formaciones geológicas, caprichosas a veces, las que son resultado de actividad volcánica o los restos de un mar mediterráneo que llegaba a estas tierras situadas hoy a kilómetros de distancia, y que todavía nos muestran este legado marino, los antiguos egipcios lo llamaban: Desheret, la tierra roja, en oposición de la tierra negra o cultivable de la orilla del Nilo: Kemet.

Acabas amando el desierto "engancha" como se suele decir, así es, si sabes o quieres mirar, cada detalle, cada referencia en el horizonte, las huellas de anteriores viajeros, las pistas sobre maderas hoy petrificadas que sirvieron de camino a canteros de basalto u otros minerales hasta el hoy alejado lago Qarun, las cuevas utilizadas por eremitas de primeros del cristianismo en su aislamiento, ascetas que sobrevivieron gracias a su fe en la dureza de estos sitios, también sorprende contemplar lo que fueron bosques, ahora petrificados, fósiles de animales extintos, inalcanzables valles que fueron mar, ahora océano de arena, nada de esto puede ser relatado, ni siquiera fotografiado, con justicia.

Insignificancia la nuestra, a la vez que una inmensa paz la que se vive en el Sahara, en esta parte del planeta, en la soledad de sus imaginarios caminos o bajo el abrumador cielo lleno de estrellas.























Nuestra ruta nos llevo a lugares increíbles que os iré narrando en sucesivas etapas.

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En esta etapa nos acercaremos a la zona norte del Lago Qarun visitando lugares como: Qasr El Sagha + Gebel Qatrani + Dimeh El Siba + Gebel el Mudawara + Bosque Petrificado

Qasr El Sagha

Un templo egipcio probablemente del Imperio medio en la región del Oasis de Fayum, cerca de Dimeh El Siba, edificado en piedra, disponía de siete capillas y no se sabe nada más de él, junto al lago Qarun y del desierto, se cree que no fue nunca terminado. En la construcción, los bloques y las juntas, recuerdan el Osirion de Abidos o del templo del valle en Giza.






Gebel Qatrani

Muy bien documentado y bien presentado, con senderos marcados y rotulación, para que el escaso visitante pueda entender este lugar protegido por la Unesco, reúne información paleontológica y geológica del eoceno y del oligoceno (aprox. 35 millones de años).

Podemos ver restos o esqueletos completos de fauna, como mamíferos de géneros extintos como el Arsinotherium o de primates como el Aegyptophitecus Zeuxis.








El bosque petrificado

Cerca del lugar de Gebel Qatrani y a pocos kilómetros al norte de Qasr El Sagha el desierto nos ofrece los troncos fosilizados de lo que fue hace 35 millones de años un denso bosque, en aquel lejano Eoceno esta zona fue la desembocadura del Paleo Nilo al Tethys, al que hoy llamamos Mediterráneo.

Podemos ver inmensos troncos fosilizados con detalle de su corteza , siendo un sueño para los estudiosos de la dendrocronología.







Dimeh El Siba

Una excursión a Dimeh el Siba, cerca de Qasr El Sagha justo al norte del Lago Qarun es uno de los más interesantes en El Fayum, gratificante y memorable tanto por el paisaje del desierto y el lago como por el interés histórico de los propios sitios . Incluso aquellos que no tienen el más mínimo interés por las antigüedades disfrutarán de este viaje y no dejarán de quedar impresionados por las magníficas ruinas solitarias, de Dimeh. Sin embargo, ten en cuenta que es un lugar aislado, y se realiza mejor con un guía y transporte adecuado.

Dimeh El Siba, (lugar de los leones), fue una ciudad Ptolemaica que se cree que fue fundada por Ptolomeo II en el siglo III antes de Cristo, en un lugar que muestra evidencia de habitación desde el Neolítico. Hoy en día, está más aislada, pero durante la época ptolemaica estuvo a orillas del lago Moeris (entonces mucho mayor), y en el inicio de las rutas de las caravanas en el desierto occidental.

Hay autores que indican fueron los Ptolomeos, que redujeron el tamaño del lago para proporcionar tierras para el asentamiento de soldados macedonios jubilados y sus familias. La ciudad sirvió como puerto, y quizás en algún momento se encontró en una isla, a juzgar por su nombre de Ptolomeo Soknopaious Nesos, lo que significa Isla de Soknopaious (Sobek-en-Pai), la isla del dios cocodrilo. Sin embargo, algunos investigadores sostienen que no fue de hecho nunca una isla. Hoy en día, el lugar está a 2,5 kilómetros lejos del borde del agua.

Dimeh fue habitada seis siglos y finalmente fue abandonada a mediados del siglo III.






Gebel el Mudawara

Lugar situado en la ruta de wadi El Hitan donde podemos ver una verdadera alfombra de Foraminíferos unos fósiles redondos y planos que parecen monedas.

Estos nummulus pertenecen al Eoceno (unos 40 millones de años) cuando el lugar estaba cubierto por el océano Tetis.

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