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Tomo el tren hacia Lucerna con transbordo en Olten. Una vez en la estación no hay posibilidad de perderse porque lo primero que se ve tras salir por la puerta principal es el famoso "Kapellbrücke" (Puente de la Capilla) que es la atracción principal de la ciudad. Para interesados, la oficina de turismo está en el lateral izquierdo de la estación; se puede accder desde dentro de la estación (vía 1, al lado del Burger King) o desde fuera.
Con la mochila llena de folletos decido dejar el famoso puente para el regreso y me voy por la rivera izquierda del río. Aún están recogiendo el mercado y es que otra peculiaridad de este país es que a las 12:00 ya están recogiendo los mercados callejeros. Paso por delante de la iglesia de los Jesuitas (Jesuitenkirche) y doy una vuelta por los alrededores del Museo de Historia y el Natural hasta llegar al otro puente de madera de la ciudad, el Spreuerbrucke, que no es tan conocido como el otro, de hecho yo ni sabía que existía xD
Ya en la rivera derecha del río me recorro de arriba a abajo el casco antiguo que es bastante pequeñito y decido subir hasta la muralla de la ciudad. Se puede acceder a ella gratis y simplemente puedes recorrerla o ir subiendo a cada torre por unos escalones de madera antiquísimos y con bastante inclinación. Hay bonitas vistas de toda al ciudad desde estas torres.
Con todo ya más que pateado cruzo de nuevo el río, ahora sí, por el Kapellbrücke que curiosamente, tiene una tienda de souvenirs en todo el medio, la única que he visto en toda la ciudad. De aquí me voy hacia el puerto, al lado de la estación de tren, y pillo información de los cruceros para una próxima visita no muy lejana. El crucero del lago de los cuatro cantones es precioso pero hay que tener unas 5 horas para hacerlo completito... Otra opción (la que yo haré) es iniciar el viaje al Pilatus en barco desde Lucerna hasta Alpnastach y dos pájaros de un tiro.
También es muy recomendable visitar el Museo del transporte que no es muy baratillo que digamos pero merece mucho la pena.
Como sabía que Lucerna no iba a dar para mucho, tenía planeado una visita a Zug asi que me toca hacer un poquito de tiempo hasta que salga el tren directo. Una vez en el tren, veinte minutos más tarde estoy en destino.
Aquí me desconcentro y en vez de salir por la entrada principal en dirección al lago para llegar a la zona antigua,sigo a la multitud y acabo andando más de una hora por sitios sin ningún atractivo... un fallo sin importancia. Después de esa hora andando y dando vueltas, decido volver a la estación y me viene un alumbramiento, me voy hasta el final del andén desde donde veo el lago, por lo tanto el casco antiguo y para allá que me voy.
Una vez en el lago, lo voy recorriendo hasta llegar a la torre del reloj y me meto en el meollo del asunto con un par de iglesias, fuentes y las casas típicas. No empleo ni una hora en recorrer todo esto, menos que lo que he estado dando vueltas... una pena la pérdida de tiempo.
Zug es un sitio pequeño, al menos la zona antigua, pero está chulo. Es uno de tantos pueblos suizos que no tienen renombre pero que son muy bonitos.
Web oficial de Lucerna
Web oficial de Zug
Con la mochila llena de folletos decido dejar el famoso puente para el regreso y me voy por la rivera izquierda del río. Aún están recogiendo el mercado y es que otra peculiaridad de este país es que a las 12:00 ya están recogiendo los mercados callejeros. Paso por delante de la iglesia de los Jesuitas (Jesuitenkirche) y doy una vuelta por los alrededores del Museo de Historia y el Natural hasta llegar al otro puente de madera de la ciudad, el Spreuerbrucke, que no es tan conocido como el otro, de hecho yo ni sabía que existía xD
Ya en la rivera derecha del río me recorro de arriba a abajo el casco antiguo que es bastante pequeñito y decido subir hasta la muralla de la ciudad. Se puede acceder a ella gratis y simplemente puedes recorrerla o ir subiendo a cada torre por unos escalones de madera antiquísimos y con bastante inclinación. Hay bonitas vistas de toda al ciudad desde estas torres.
Con todo ya más que pateado cruzo de nuevo el río, ahora sí, por el Kapellbrücke que curiosamente, tiene una tienda de souvenirs en todo el medio, la única que he visto en toda la ciudad. De aquí me voy hacia el puerto, al lado de la estación de tren, y pillo información de los cruceros para una próxima visita no muy lejana. El crucero del lago de los cuatro cantones es precioso pero hay que tener unas 5 horas para hacerlo completito... Otra opción (la que yo haré) es iniciar el viaje al Pilatus en barco desde Lucerna hasta Alpnastach y dos pájaros de un tiro.
También es muy recomendable visitar el Museo del transporte que no es muy baratillo que digamos pero merece mucho la pena.
Como sabía que Lucerna no iba a dar para mucho, tenía planeado una visita a Zug asi que me toca hacer un poquito de tiempo hasta que salga el tren directo. Una vez en el tren, veinte minutos más tarde estoy en destino.
Aquí me desconcentro y en vez de salir por la entrada principal en dirección al lago para llegar a la zona antigua,sigo a la multitud y acabo andando más de una hora por sitios sin ningún atractivo... un fallo sin importancia. Después de esa hora andando y dando vueltas, decido volver a la estación y me viene un alumbramiento, me voy hasta el final del andén desde donde veo el lago, por lo tanto el casco antiguo y para allá que me voy.
Una vez en el lago, lo voy recorriendo hasta llegar a la torre del reloj y me meto en el meollo del asunto con un par de iglesias, fuentes y las casas típicas. No empleo ni una hora en recorrer todo esto, menos que lo que he estado dando vueltas... una pena la pérdida de tiempo.
Zug es un sitio pequeño, al menos la zona antigua, pero está chulo. Es uno de tantos pueblos suizos que no tienen renombre pero que son muy bonitos.
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Viajar a Suiza en primavera
