Después de la panzada a andar de ayer, nos concedimos media hora más de descanso y no fué hasta las 10 que salimos del hotel. Tampoco teníamos mucha prisa porque habíamos previsto hacer el tour del Madison Square Garden y sabiamos que no empezaban hasta las 10:00. Además nosotros andando lo teníamos de nuestro hotel a menos de 15 minutos. Y necesitábamos descansar.
Estuvo bien. Es un pabellón guapísimo. Empezamos viendo el vestuario de las chicas de basket que están ahora jugando .Recorrimos las distintas alturas que tiene. También visitamos un palco vip. La visita terminó con la aparición de una cheerleader que dijo cuatro palabras pero eso sí, iba monísima.
Estuvo bien. Es un pabellón guapísimo. Empezamos viendo el vestuario de las chicas de basket que están ahora jugando .Recorrimos las distintas alturas que tiene. También visitamos un palco vip. La visita terminó con la aparición de una cheerleader que dijo cuatro palabras pero eso sí, iba monísima.


De ahí fuimos al portaaviones Enterprise. Es una oportunidad única de ver como es un portaaviones por dentro. Lo tienen como museo aéreo y del espacio. Junto a él tienen anclado uno de los primeros submarinos en llevar misiles nucleares, y empezamos ahí la visita. Antes de bajar al submarino había una prueba para ver si podías pasar por sus puertas, porque una vez abajo, eran los pasillos tan estrechos que ya no había vuelta atrás.
Terminada la visita al submarino (era muy pequeño y acababas pronto) pasamos al portaaviones.
Te hablaba de la vida a bordo, y a la vez en cubierta tenían expuestos aviones de distintas épocas desde MIG rusos, hasta F14 Tomcat (famoso por la peli Top Gun, donde por supuesto me hice una foto). Lo malo era que en el exterior hacía un calor de morirse, y en el interior tenían el aire acondicionado a 10 grados como máximo. No sé como no nos cogimos una pulmonía. También tenían en exposición el Concorde. Un avión que tardaba 2 horas y media en cruzar el Atlántico ( de París a Nueva York). Eso sí, debía ser incomodísimo porque los asientos eran superestrechos y no hablemos ya del pasillo. Como no, algo cayó en la tienda de regalos. Unas viseras.
Terminada la visita al submarino (era muy pequeño y acababas pronto) pasamos al portaaviones.
Te hablaba de la vida a bordo, y a la vez en cubierta tenían expuestos aviones de distintas épocas desde MIG rusos, hasta F14 Tomcat (famoso por la peli Top Gun, donde por supuesto me hice una foto). Lo malo era que en el exterior hacía un calor de morirse, y en el interior tenían el aire acondicionado a 10 grados como máximo. No sé como no nos cogimos una pulmonía. También tenían en exposición el Concorde. Un avión que tardaba 2 horas y media en cruzar el Atlántico ( de París a Nueva York). Eso sí, debía ser incomodísimo porque los asientos eran superestrechos y no hablemos ya del pasillo. Como no, algo cayó en la tienda de regalos. Unas viseras.



Comimos en un restaurante que había en la bahía del Hudson (menú variadisimo, hamburguesa de ternera, de pollo o de pavo) y,como estábamos cansados y hacía mucho calor, aprovechamos para hacer un crucero por la bahía que duraba 3 horas. Vimos todo Manhatan desde el río y lo que es mejor, sin dar un solo paso.



De camino al hotel teníamos que pasar por Times Square, así que entramos al Enorme Toys`r Us (no es broma lo de enorme, incluso tiene dentro una noria) donde hicimos unas compritas para nuestro futuro sobrino. Teníamos tanto calor que compramos una ensalada y fruta para llevar y cenamos en el hotel.