Hoy el día ha empezado a las 7 de la mañana y después de desayunar nos ha venido a buscar el taxista de ayer para ir a las cataratas del lado Argentino. Hemos llegado de los primeros, el día promete, ni una nube y aunque aún hace algo de fresco luego calentará. Hemos traído una pequeña mochila con agua, bocadillos y algo de ropa de repuesto por si acaso. La entrada al parque es de 100 pesos.
Primero hemos llegado y hemos contratado "la gran aventura", que consiste en paseo en Jeep por la selva y luego lancha con motor hasta las cataratas. IMPRESIONANTE


*** Imagen borrada de Tinypic ***
En total habrá sido unas 2:30 horas. Luego hemos ido por los diferentes circuitos superior e inferior hasta llegar al tren que nos lleva a "la garganta del diablo". Las vistas espectaculares, el día inmejorable, ni una nube, hay gente viendo pero no está muy masificado.
A las 15:00 horas hemos parado para comer un bocadillo allí mismo, en la garganta del diablo, y la verdad es que mejor sitio para comer no hay. De lujo nos ha entrado el bocadillo.
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Después de un montón de fotos y con mucha pena nos vamos hacia el tren que nos lleva de vuelta a la entrada del parque. Por mucho que os cuente, no hay palabras ni fotos ni videos para describir las cataratas, sólo hay una forma hay que estar allí y sentirlas.
Luego, de vuelta al pueblo, le hemos dicho al taxista que nos lleve al hito de las tres fronteras (Brasil, paraguay y Argentina). No es nada de otro mundo, el hito con sus 3 banderas, el río que delimita a los 3 países y unos pequeños puestos vendiendo bisuteria y varias cosas. Pero bueno por dar una vuelta...

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Después de vuelta al pueblo andando, una media horita con parada para un helado incluida

Un poco más tarde recogemos las mochilas del hotel y vamos hacia el aeropuerto en taxi. Nos despedimos de Iguazú, cuyas cataratas nos han impresionado y siempre quedarán en nuestra memoria.
Llegamos al aeropuerto, tenemos vuelo a las 21:30 horas hacia Buenos Aires donde haremos noche para mañana ir a Ushuaia. facturamos las maletas sin problemas, no hay casi nadie, es muy pequeño el aeropuerto y salimos afuera a cenar un bocadillo ya que hace muy buena noche. cuando quedan 20 minutos nos disponemos a embarcar y de repente en la puerta de embarque nos dicen que se ha cancelado !!


No nos lo podemos creer, vamos rápido al mostrador a ver qué pasa ya qué es el último vuelo del día. Estamos unos 30 reclamando, nos dicen que se ha suspendido por problemas técnicos (no se lo cree nadie), nos ponebn un bus y nos llevan al Hotel Cataratas de 5 estrellas


mañana veremos dónde acabamos.