17 Julio WILLIAMS – SEDONA – JEROME – GRAN CAÑÓN ( 1h 15 min )
Hoy nos levantamos pronto, queríamos aprovechar bien el día, pero pese a estar a una hora del Gran Cañón, no fuimos directamente, queríamos aprovechar el día para visitar Sedona y recorrer el Cañón Oak Creek.
Ésta zona normalmente se la saltan todos los viajeros que van desde Las Vegas al Gran Cañón, pero nosotros como teníamos tiempo y días decidimos dedicarle medio día y fue un gran acierto. Eso sí, os recomendamos que lo veáis antes, ya que el Cañón Oak Creek es un pequeño adelanto de lo que vais a ver en el Cañón del Colorado y si lo veis después, puede que no os impacte tanto.
Nada más levantarnos nos pasó una de las cosas más graciosas del viaje, íbamos a ducharnos y el agua estaba marrón con una pinta asquerosa, así que bajamos a recepción y para que os hagáis una idea del nivel de inglés que tenemos y con el que nos hemos movido, llegamos y le decimos al conserje. Please I have a problem. My water is Brown !!!!!! a todo esto Rober descojonandose de la explicación, al final pudimos entender que tenían un problema en el pueblo entero y que no sabían cuando lo iban a solucionar, así que sin ducharnos y después de desayunar cogimos nuestro coche y pusimos rumbo a Flagstaff.
vimos un poco por encima el pueblo y pillamos la Red Rock Scenic Byway, que es una carretera panorámica con unas vistas preciosas del Cañón Oak Creek, hay una zonas de acampada donde puedes parar y bañarte en el río, la verdad es que nos encantó.
Vas atravesando un estrecho cañón en el que la carretera circula junto a un río entre bosques de frondosos pinos y bajo unas rocosas montañas rojizas similares a las que podemos encontrar en el Gran Cañón, y después de un rato llegamos a Sedona.

Vistas desde la carretera

Cañón Oak Creek
Sedona es una pequeña ciudad vacacional, con casas de cierto encanto, muy concurrida de turistas en verano, que alcanzó popularidad a partir de los años 60 como centro de actividades artesanales y artísticas.
Dentro de Sedona está Tlaquepaque es una especie de centro comercial que imita a un poblado mejicano con construcciones de adobe, donde se vende todo tipo de artesanía. Lo vimos por fuera y nos dio mucha rabia no entrar,pero como tardamos más de lo previsto en recorrer el Cañón decidimos continuar nuestro camino hacia Jerome.
JEROME es un típico e histórico pueblo minero, cuya calle principal nos permite sentir que estamos en una película del oeste, se encuentra a 47 kilómetros al sur de Sedona. Comimos allí en una terraza y dimos una vuelta por el pueblo, a ver, el pueblo está bien, pero después de ver Calico y Oatman parece que a Jerome le falta algo.
Quizás ahora, pensando que siempre vas ajustado de tiempo, hubiese estado mejor quedarnos en Sedona ya que tenía un ambientazo increíble y haber visto algo más del Cañón, pero bueno que Jerome también estuvo bien.

Jerome
Por la tarde volvimos a Williams y decidimos darnos una vuelta por el pueblo, el pueblo en sí tiene mucha vida y nos gustó mucho, tiene muchas tiendas con cosas muy curiosas de la ruta 66 y después de comparar precios, es un buen sitio para comprar recuerdos.
Tiene varios bares de los años 50. Os recomendamos el Café 66 y el Bar Twister para cenar, están muy chulos y no son caros además el primero tiene música en directo.

Williams

Williams
Después de hacer algunas compras pusimos rumbo a Tusayán que es el último pueblo que hay antes de entrar en el PN del Gran Cañón.
Digo pueblo por decir algo, porque realmente son una serie de hoteles y un par de tiendas y varios restaurantes a ambos lados de la carretera.
Llegamos y nos fuimos directamente al Motel Red Feather Lodge, habitación doble, fumadores, parking gratuito y desayuno por 332,96 $, las dos noches que estuvimos.
El hotel está bien y lo recomendamos, pero si podéis, mejor reservar en el Bright Angel Lodge, en las cabañas que tienen al borde del cañón, a nosotros nos lo recomendaron unos amigos y quisimos reservarlo con 4 meses de antelación y fue imposible, además es barato 72 $ la noche, y encima estáis ya dentro del Parque. De hecho al día siguiente vimos las cabañas mientras visitamos el Cañón y tenían una pinta increíble, fue lo único que nos falló en nuestro viaje.
Después de dejar las maletas, nos fuimos a cenar a un restaurante que creo que se llamaba el Steak House, pero no estoy segura, el sitio no tiene perdida, está en el lado derecho de la carretera antes de que salgas del pueblo en dirección al Gran Cañón, había mucha gente y lo tenían decorado como el Ribs, con cosas del oeste y todo de madera, cenamos genial uno de los mejores solomillos que habíamos comido, y nos sentaron al lado de un grupo de españoles con los que nos pusimos a hablar y luego tomamos café en la terraza. La verdad es que pasamos un rato agradable. Y ya por fín al llegar a la habitación pudimos ducharnos con agua en condiciones y nos fuimos a dormir que al día siguiente nos esperaba el El Grán Cañón.