Nos levantamos con horario casi francés dispuestos a asaltar la ribera del rio Dordogne. Desde Sarlat son 15 min despacito, hasta La Roque Gageac. Tenemos mala suerte y por la entrada desde Vezac hay obras. Están reformando el dique delante del pueblo. No hay nadie, lo cual si no tenemos en cuenta la fina lluvia, es un lujo. Aparcamos entre el castillo y el pueblo.
Luego advertimos que si quieres aparcar facíl lo mejor es entrar por Vitrac. Se tarda lo mismo. y el acceso a las Gabarras se encuentra por ese lado del pueblo.
El pueblo es como una postal. La idea era dar un paseito por el pueblo y coger la gabarra en plan safari fotográfico, pero no abren hasta el 1 de Abril. Salvo excepciones, parece que se abre todo el 1 de Abril, importante día para los franceses, que celebran el Jours de Pâque, con los clásicos huevos de chocolate e inicio de las vacaciones escolares. En otra etapa contaré una anécdota a cuenta de este día.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El rio Dordoge impresiona a su paso por La Roque, baja con un caudal extraordinario, y muy rápido. Eso si, se le ve limpio, con vida. Para mi que siempre he crecido a la orilla de un rio, la sola contemplación del mismo es una gozada.
Nos resignamos al paseo por el pueblo. Desde la oficina de correos, siempre hay una en cada pueblo francés, se alza un camino que te sube fácil hasta el segundo nivel. La lluvia empieza a cansar y decidimos ponernos a cubierto. Prometemos volver el dia del regreso a casa.
Rumbo a Castelnaud, decidimos si aparcar abajo y patearnos el camino del pueblo al Castillo ó aparcar arriba, visto el tiempo que hace y esperar a que escampe y visitar mejor el pueblo de Beynac. Elegimos aparcar arriba. El parking es municipal, y lo máximo que pagas es 3 €.
El castillo es privado, la visita está bien diseñada, todo muy señalizado, y se pasa bomba viendo la colección de armas, recorriendo escaleras y pasadizos an algunos casos bastante estrechos, y subiendo a almenas y balcones. Cuidado con las catapultas .La vista sobre el Dordogne es espectacular.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Hay muchos videos, en francés e inglés, y la visita está enfocada a los escolares franceses, aunque se disfruta igualmente.
Nos desplazamos a Benyac y convenimos recorrer un poco el pueblo y los alrededores del castillo. Desde fuera parece más castillo, más real, recio sería la palabra. Tiramos una fotos desde un mirador que se accede desde el camino al cementerio, que por cierto es bastante curioso, y después de hacer un poco el ganso, prometemos volver cualquier noche a recorrer el pueblo con la iluminacion nocturna.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Comida rápida en el Carrefour de la entrada norte de Sarlat, nos da tiempo a alquilar una visita guiada a Sarlat de noche en castellano en la Oficina de Turismo para esa misma noche y enfilamos Domme.
Por cierto, tanto en el Carrefour, como en el Casino que se encuentra en la entrada sur, se puede llenar el depósito con tranquilidad, porque los precios son idénticos a los de aquí. En las gasolineras de carretera son más elevados.
Domme no te deja indiferente. Había leído que no merece la pena, pero no estoy de acuerdo. Desde luego el mirador es por si solo un atractivo suficiente. pero el pueblo tiene además algunos edificios que son unas perlitas, un aire a añejo que gusta, y es de paseo facil.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos abandonamos un poco en el jardin público de la parte sur, con el perro, si!!, llevamos un saco de huesos de 4 kg y antes de atardecer volvemos a nuestro añorado bosque en Sarlat. En esta etapa todo está muy a mano y permite cómodos desplazamientos.
Para rematar el día, que ajetreo!! , y tras picar un poco en la cabaña, bajamos a Sarlat para la visita guiada nocturna.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Lydia, la guia francesa se desenvuelve en castellano con facilidad, y hace muy amena la hora y cuarto que dura la visita. Contratadla sin dudarlo. Si por el día es fabulosa, Sarlat de noche es un lujo. Un contrapunto muy especial.