Después de una horrible noche en el tren, preocupados por las cucarachas y por nuestra vida, porque el tren había tramos que parecía ir volando, llegamos a Hanoi. Cogimos un taxi de la compañía Mailin y nos dio una vuelta increíble (llevaba taxímetro).
Eran las 4.30h cuando llegamos, pero aun así nos abrieron en la recepción del hotel, nos dieron la habitación y pudimos ducharnos (fueron realmente amables con nosotros).
A las 8.20h nos recogieron para la excursión a Tam Coc en la oficina de Vega Travel, aunque la compañía que organizaba la excursión era otra. En una minivan con otras 8 personas, nos llevaron a un templo parecido al Templo de la Literatura. El viaje hasta allí son 2 horas y media, con la rutinaria parada en la tienda. No fue nada espectacular.


Tras esto nos llevaron a comer a un buffet libre, bastante cutre. Encima tuvieron un detalle muy feo y es que nuestra excursión la repartieron en dos mesas de 5 personas, y a nosotros nos tocó separados. La comida, de buffet malo, la verdad.
Al terminar de comer nos llevaron a lo bueno, la vueltecita por el río en barquita. El sol y el calor son insoportables, por lo que recomiendo llevar un paraguas o algo similar. Al rato se nubló un poco y el paseo fue mucho más agradable. Antes de subir, el guía nos advierte que está todo pagado, y que aunque nos insistan en que les compremos una bebida a los remeros o éstos nos pidan una propina, que no lo hagamos.


La excursión también incluye un paseo en bici, que nos confirma lo que ya sospechábamos, que lo mejor para conocer esta zona es pasar al menos una noche en la zona, coger una moto y perderse.
Tras otras tres horas de viaje en minivan, ya estábamos en Hanoi. Mi valoración personal de la excursión es que está bien para la gente que no tiene mucho tiempo y quiere ver Ninh Binh. Puedes hacerte una idea con lo que ves. Pero es una paliza de viaje, y creo que compensa más lo de pasar una noche allí.
Tanto nos cansó el viaje que en ese momento decidimos que no queríamos más horas de autobús, y que íbamos a sacar el billete para el avión HCMCity-Siem Reap. Dicho y hecho.
Con el avión comprado, salimos a cenar a la calle. Se nos había antojado algo de carne. En la calle Ma May, vemos unos puestos con unas pequeñas barbacoas caseras y decidimos probar. Error. El fulano que nos atendió nos echó un chorreón de aceite desmesurado que provocó que saltasen salpicaduras durante toda la cena. Cada vez que echábamos algo, saltaba todo el aceite y nos caía en las piernas, que estaban a la altura de la barbacoa (estábamos en banquitos diminutos típicos). La carne estaba buena, eso sí. Tenía un marinado curioso. Pedimos además dos arroces que llevaban algo sin identificar que no nos gustó nada. El precio total nos pareció caro para lo que realmente era y por lo incómodo que había sido todo.
Cambiamos dinero en una joyería distinta a la del primer día: 1 euro=28600 VND. Preguntamos antes en una agencia y nos dijeron que 1 euro= 28000 VND. Moraleja, no compréis VND en agencias.
Aquí las tiendas cierran muy pronto, así que lo que iba a ser una frenética noche de compras, se quedó en una única compra: una maqueta de un autobús antiguo para mi padre que los colecciona. ¿El precio? La mitad de lo que cuesta en Europa (lo he estado mirando en Ebay).

De vuelta al hotel pagamos la lavandería, esa noche y el taxi del día siguiente al aeropuerto. Y nos acostamos, porque al día siguiente salimos del hotel a las 5.15h.
GASTOS DEL DÍA
Taxi de la estación al hotel, 70.000 VND
Botella y cocacola, 35.000 VND
Vuelo HCMCity-Siem Reap, 138 euros/persona
Cena de barbacoa y 2 arroces, 300.000 VND
Maqueta de autobús, 460.000 VND
1 noche de hotel en el Tu Linh Palace II, lavandería y taxi para el día siguiente, 738.000 VND