A las 7:35 cogimos el vuelo desde Madrid hacia Munich con la compañía Lufthansa. El vuelo transcurrió sin problemas y a las 10:00 de la mañana aterrizamos en Munich, donde estaba nublado y hacía fresquito.
Fuimos a los mostradores de Hertz para recoger el coche y tuvimos un pequeño problema que nos llevó un gran rato resolver; le habían dado nuestro coche a otra persona con el mismo apellido que el nuestro pues según ellos es un apellido muy común en España y se habían confundido

Nuestro primer destino era el castillo de nombre impronunciable Neuschwanstein o Castillo del Rey Loco. Está a unas dos horas desde el aeropuerto de Múnich. Comimos por el camino unos bocadillos que traiamos de España. No teniamos intención de verlo por dentro (más que nada porque nos quedamos sin entradas por despreocupados)

Aparcamos en el parking 4 y pagamos 6€, si, 6 € por estar allí poco más de una hora. La tarifa es para todo el día, no es problema de ellos que nosotros estuviesemos tan poco tiempo :lol:.
Subimos al puente en autobús, 2,60€ ida y vuelta. A mi la verdad es que me agobió un poco estar en el puente con tanta gente que empujaba, queria hacer fotos, salir, asiáticos que arrasan con todo por un selfie. Perdía un poco de encanto el lugar con tanta gente la verdad. Aún así el castillo y los alrededores son preciosos y creo que bien merece una visita, también por dentro y pasar el día en sus alrededores.

Dimos una vuelta también por los alrededores del castillo y nos fuimos a Fulpmes para que no se nos hiciese muy tarde. En Fulpmes fuimos a cenar a Dorfknug (cierran a las 9) y pedimos Tris ( dos mega raviolis de espinaca y queso) y ensalada completa con salchicha, pepinillos, queso... una cerveza y una botella pequeña de agua todo por 32€.