Día despejado y tarjeta Stubai en nuestro poder; no necesitamos nada más! nos vamos directos a Neustift (a 4 kilómetros de Fulpmes) para coger el remonte Elferbahn y comenzar nuestra ruta de senderismo. Aparcamos sin problema, pasamos la tarjeta, nada de cola y en unos minutillos estábamos arriba. Emoción máxima pues era el primer teleférico que cogíamos y unas vistas increíbles.

Ibamos a hacer una rutita de senderimo hasta los refugios, primero de Autenalm y después Klamperberg, uno seguido del otro en la misma senda.
Nada más salir del teleférico hay varios carteles y en uno de ellos sale indicada la ruta, no tiene ninguna pérdida pues sólo hay que coger el camino de la derecha que va hacia el restaurante y una vez allí seguir todo recto. No hay opción de perderse pues está muy bien indicado.


La ruta tiene unos 10 kilómetros entre ida y vuelta y hasta el primer refugio es bajada muuy suave. Las risas vienen luego, cuando has llegado a Autenalm y continúas hasta Klamperberg. Todo lo que habías bajado lo subes ahora multiplicado por 3


Las vistas al valle son preciosas.

Al volver comimos en el restaurante del teleférico. Pedimos una cazuela con patatas, huevos y bacon, cordon bleu, dos cerevezas, una botella de agua y tarta sacher. Casi ná! Todo por 32€, muy recomendable!

Antes de bajar nos quedamos un rato largo viendo como se tiraba la gente en paracaídas.
Después nos fuimos a la piscina cubierta de Neustift (incluida en la Stubai Card), tirándonos por el tobogán de agua y dando una vuelta por el pueblo. No estuvo mal para ser el primer día, no?

Una vez abajo fuimos a la piscina-spa cubierta de Neustift (incluida en la Stubai Card) y disfrutamos del tobogán como dos enanos. Dimos una vuelta por el pueblo y su cementerio (muy curioso) y nos fuimos para el apartamento.