En mi segundo día en Yangón y tras haber disfrutado la noche anterior de la pagoda más famosa de Myanmar, empecé el día por la segunda más conocida, Sule Pagoda, que visto lo del día anterior me decepcionó mucho. La entrada me costó 3.000 Kyats y estuve como 15 minutos visitándola, muy poco.

Después y justo al lado estuve dando una vuelta por Maha Bandoola Gardens, donde se encuentra el monumento a la independecia, el tribunal supremo y el ayuntamiento de Yangón, aunque este último no pude verlo bien porque tenían puesto un escenario por el water festival.


De ahí y dando un paseo seguí descubriendo la ciudad y llegué a St. Mary Cathedral, preciosa tanto por fuera como por dentro.

Más al sur está la Botataung pagoda, que en ese momento estaba en obras y decidí no entrar porque tampoco me llamó mucho la atención y costaba 6.000 Kyats la entrada.
Comí por la zona del hotel y a eso de las 5.30 compartí taxi con 2 alemanas hasta la parada de autobuses para dirigirme a mi siguiente destino, Hpa-An.
Yangón fue lo que menos me gustó de Myanmar, tráfico caótica, miles de personas en todos los lados... y se nota que la gente está ya más acostumbrada a los turistas. Pero aún así recomiendo su visita, solo por Shwedagon Pagoda ya vale la pena.