Podría decir sin duda que este era el objetivo básico de nuestro viaje al oasis de Dakhla, sin duda el Templo de Deir El-Haggar, bien vale la aventura.
El templo de Deir El Haggar
Este templo de arenisca se encuentra en el borde occidental del Oasis de Dakhla, apenas a 10 kilómetros de El Qasr, al sur de los campos de cultivo. Fue conocido en la antigüedad como Set-whe (Lugar del regreso a casa).
Hoy en día podemos ver al sur del templo una gigantesca duna que cubrió a este durante siglos, no hace mucho tiempo que fue rescatado, restaurado y reconstruido en la década de 1990, gracias al Proyecto Oasis de Dakhla del Consejo Supremo de Antigüedades egipcio, gracias a ello podemos visitarlo, contemplado uno de los monumentos romanos mas completos de los oasis egipcios.
Se interpreta que el templo, por su aislamiento, fue un lugar de celebraciones festivas, no de culto, pues los dedicados a esta actividad solían erigirse en el centro de las comunidades. Respecto a su advocación fue dedicado a la triada Tebana de Amón-re + Mut + Khonsu, y al dios Thoth, la construcción del templo comenzó́ durante el reinado del emperador Nerón (54-68 aC). Podemos ver la orla de Nerón en el santuario. Al parecer el templo se construyó para animar a los agricultores y colonos a establecerse en la zona. Situado junto a las obras de riego, los pueblos y las alquerías romanas de adobe. De hecho, todavía se ven en la zona que rodea el templo. Los sucesores de Nerón, Vespasiano (69-79 aC) y Tito (79-81 aC) agregaron decoraciones y demás partes al templo, en el que aun podemos ver los nombres de Nerón, Vespasiano, Tito, o Domiciano.
El edificio del templo de Deir El Hagar mide 7,3 metros por 16,2 metros. Además, el templo tiene un muro de cerramiento exterior de adobe bien conservado.
El santuario en sí estaba decorado con un magnifico techo astronómico que se remonta al gobierno de Adriano (117-138 dC.). Una de las características diferenciales de este techo astronómico es el relieve que muestra a la deidad en forma de esfinge, del dios Tutu. Hoy podemos contemplar este techo en la parte exterior del templo.
En sus muros podemos ver representados a diferentes deidades como la triada tebana de Amun-Re, Mut y Khonsu, además de Seth, Nephthys, Re-Horakhty, Osiris e Isis y Min-Re. También a los dioses creadores heliopolitanos, Geb, Nut, Shu y Tefnut. Y una de las mas importantes, la del dios de Dakhla Amun-Nakht.
La existencia de deidades locales, hace mas atractiva la visita a este alejado lugar, el citado dios del desierto Amun-Nakht y su consorte Hathor, o al mismo Thoth con su compañera local Nehmetaway.
Restos de otras estructuras todavía parcialmente enterradas rodean el templo. Bloques al oeste del recinto, en las inmediaciones, hay evidencia de agricultura de la época romana, palomares así como un cementerio donde se descubrieron toscos ataúdes de terracota con cabeza humana.
Reconstruccion del techo solar del templo de Deir El Haggar