Salimos de Encarnación por la mañana bajo una intensa lluvia, lluvia que nos acompañará durante todo el camino hasta llegar a Ciudad del Este.
Pasaremos la noche en Ciudad del Este, pero antes de llegar vamos a acercarnos hasta la presa de Itaipu y al Museo Tierra Guaraní de Itaipu.
El museo se encuentra semicerrado, se están haciendo obras de reacondicionamiento y solo tienen una pequeña sala como resumen de todo los que se podrá ver en este museo, por lo que nos dicen, las obras tienen una duración estimada de algo más de un año, así que hasta el 2025 dudo que se pueda visitar.
A continuación vamos hasta el centro de visitantes de la presa de Itaipu, donde después de un video de presentación, nos montamos en un autobús que nos acercará a la presa que hasta la inauguración de la presa de las tres gargantas en China, era la mayor del mundo. La obra de ingeniería es espectacular, lástima que un cielo plomizo, con rachas de lluvia no nos deja disfrutar del todo de la visita.
18 turbinas generando electricidad, 9 para Paraguay y 9 para Brasil. Las 9 turbinas del lado paraguayo producen suficiente electricidad para sostener todas las necesidades del Paraguay y aun permiten vender a Brasil el sobrante.

Presa de Itaipú
Finalmente, nos dirigimos hacia nuestro hotel en Ciudad del Este, que dicho sea de paso, conducir por esta ciudad en un día de lluvia, con un tráfico totalmente loco es una experiencia que pone a prueba las dotes de conducción.
Dormiremos aquí, mañana por la mañana devolvemos el coche que alquilamos en Asunción y un taxi nos llevará hasta nuestro próximo destino. El Hotel Belmond Das Cataratas, en pleno parque nacional de Iguazú.

Cataratas de Iguazú. Vista frente al hotel, Incio del camino (Lado Brasil)
¿Qué decir de las cataratas de Iguazú?
Seleccionadas como una de las 7 maravillas del mundo moderno, todo lo que se pueda decir de esta paraíso natural es poco.
Esta será mi segunda vez aquí, la primera fue hace ya 35 años. Y básicamente, venimos porque la primera vez que estuve, solo pude estar un día aquí y siempre me quedó la sensación de que había perdido la ocasión de ver algo aún más fantástico y de que tenía que volver, que un día no es suficiente para poder disfrutar de este lugar como se merece.

Desde Mirador Tarobá (Brasil)
Así, que cuando decidimos hacer este viaje, tuve clarísimo que volvía ahí y que esta vez iba a hacerlo bien, costará lo que costará.
Y en efecto, barato no es, pero doy por bueno cada euro gastado en esta ocasión.
Para poder disfrutar de Iguazú como se merece, lo ideal, a mi parecer, es disponer de tres días ahí. Pero solo si puedes alojarte en el hotel Das Cataratas.

Hotel das Cataratas (Brasil)
Él porque es fácil de explicar. Las cataratas de Iguazú se encuentran rodeadas de un parque natural como área de protección de todo el lugar, este parque abre desde las 9 de la mañana hasta las cinco de la tarde, por lo tanto, desde las 4:45 de la tarde, en que salen los últimos autobuses que devuelven a la gente hacia la entrada del parque y hasta las 9:30 de la mañana siguiente, cuando llegan los primeros autobuses con turistas, las cataratas van a poder ser disfrutadas única y exclusivamente por aquellos que tengan la suerte de alojarse en este hotel.
Porque el Belmond Das Cataratas, se encuentra ubicado dentro del parque nacional, justo delante de las cataratas. De hecho, el camino que va recorriendo todos los saltos, parte justo de delante del hotel. Así pues, a partir de las cinco y hasta la puesta de sol y desde que el sol vuelve a salir hasta las 9:30 puedes transitar prácticamente solo, pararte en los distintos miradores, disfrutar del espectáculo natural sin prisas y escuchando solo el tronar del agua al caer por los diferentes saltos. Lo dicho, algo así no tiene precio. Y más si lo comparas con las aglomeraciones que se forman en este camino y las colas para acceder a los distintos miradores, los gritos, los empujones, durante el horario de apertura del parque.

Salto Santa Maria, parte superior (Brasil)
Nosotros llegamos a mediodía, con lo que tuvimos aquella tarde, más dos días enteros y al final, unas horas a primera hora de la mañana del ultimo día antes de dirigirnos al aeropuerto.
¿Y no te aburres dos días enteros viendo cataratas?

Salto Santa Maria, vista inferior ( Brasil)
Pues no, en absoluto. Un día lo puedes dedicar a hacer el recorrido por el lado argentino, otro día puedes tomar las barcas que remontan el rio pasando justo por debajo de varios de los saltos de agua o puedes subirte a un helicóptero y ver las cataratas desde el aire, o puedes hacer treks por la zona y además, si te aburres, siempre puedes tomar alguno de los microbuses que tiene el hotel y te acercarán a la ciudad de Foz de Iguazú si es que añoras el bullicio de la gente y los coches.

Mirador de la Garganta do Diablo ( Brasil)
Y aquí aparece otras de las discusiones eternas. ¿Qué lado es mejor para ver las cataratas, el brasileño o el argentino?
Para mí, el brasileño, sin duda. Por el lado argentino vas a estar ENCIMA de las cataratas, desde luego, estar en la pasarela sobre la Garganta del Diablo es algo espectacular y a la vez, sobrecogedor, pero para disfrutar de las vistas, yo al menos, prefiero la visión que tienes desde el lado brasileño, desde donde las ves justo frente a ti, dibujando unas imágenes que difícilmente puedas llegar a olvidar.

Sobre la Garganta del Diablo (Argentina)
Obviamente, hay que hacer ambos lados, estes donde estes alojado, un día hacer el circuito por el lado brasileño y otro por el lado argentino, pero como he dicho, para mi gusto, si solo vas a poder verlas de un lado, mejor verlas del lado brasileño.

Garganta del Diablo (Brasil)
Tal como he dicho, poder estar en el Das Cataratas no es barato. A nosotros, estar 3 noches ahí, dos personas, nos costó, incluyéndolo todo, hotel, comidas, excursiones, traslado al aeropuerto, unos 600 € diarios, es decir 1.800 euros en total por tres dias. Pero lo dicho, valen la pena hasta el último céntimo.
Y aquello de que mas vale una imagen que mil palabras, pues en pocos lugares puede parecer más acertado que aquí.