El día ha amanecido un poco tapado, aunque las nubes no son muy espesas, por suerte, y la temperatura es agradable.
Hoy vamos a disfrutar de una excursión de un día por las Montañas de Wicklow y Glendalough.
El punto de reunión es junto al Trinity College y pronto iniciamos una excursión que nos llevará por el condado de Wicklow, situado al sur de Dublín, y que es conocido como “El Jardín de Irlanda” por sus cascadas, lagos y colinas.
La primera parada la hacemos en Glencree, donde se encuentra el Centro de la Paz y la Reconciliación y un Cementerio militar alemán, que vemos desde una parada en la carretera.
La verdad es que se trata de una parada técnica para tomarnos un cafetito para entonar el cuerpo, porque el calorcito que había en Dublín empieza a ser historia y nos acompaña la famosa bruma irlandesa.


Tenemos un poco de tiempo para disfrutar del paisaje verde, de las pequeñas cascadas, …
Seguimos nuestro camino hasta el Lough Tay o lago Guiness, mejor dicho, hasta un mirador desde donde disfrutar de la vista del lago.
Lough Tay es propiedad de uno de los miembros de la familia Guiness. Para crear esta playa de arena blanca trajeron la arena desde Francia. Así, con un poco de imaginación, el agua oscura del lago, debida a la alta concentración de hierro, con la arena clara de la playa, forman una pinta de Guiness.
Por cierto, esta es una zona muy cinematográfica, ya que aquí se filmaron las imágenes de la película Excalibur en las que una espada emerge de las aguas. También se rodaron algunas escenas de Braveheart.

De nuevo subimos al autocar para dirigirnos a Glendalough, que significa “valle de los lagos”, refiriéndose a los dos lagos de montaña, Upper and Lower Lake. Y el trayecto se hace corto, porque el guía, que ya se ve que posee una voz bonita, nos ameniza el viaje con varias canciones: definitivamente no tiene una voz bonita, sino magnífica.
En este lugar el legendario St. Kevin edificó, alrededor del año 600, su primera colonia, que fue sustituida poco después por una colonia de monjes. St. Kevin pertenecía a la casa real de Leinster y era conocido como místico y amante de los animales. La verdad es que se acepta comúnmente que pertenecía a esta casa real, aunque la mayoría de las historias que hay sobre él están llenos de mitos y leyendas. Seiscientos años después la colonia adquirió importancia en el movimiento religioso de Irlanda. Otro dato a tener en cuenta es que, aunque San Kevin vivió en el siglo VI, la mayoría de los edificios que componen Glendalough fueron levantados más tarde, sobre todo entre los siglos X y XI y fueron restaurados en el XIX.
Parece que el primitivo asentamiento de St. Kevin fue en la orilla sur del Lago Superior o Upper Lake, la de más difícil acceso, pero es en el Lago Inferior o Lower Lake, donde se encuentran los edificios más importantes, agrupados en el corazón de un antiguo centro monástico. Y en esta zona se va a centrar la visita.
Cuando se atraviesa el arco de la muralla de Glendalough te quedas con la boca abierta, ya que no solo parece que te trasladas a otra época, sino que además te encuentras rodeado por un impresionante entorno natural, lleno de belleza y donde se respira tranquilidad.
Nada más entrar en el recinto, lo primero que se ven son una serie de tumbas y cruces y, al fondo, la torre circular o Round Tower de 30 m de altura que parece seguirnos a todas partes. Esta torre fue construida entre los siglos X y XI. Tenía una función defensiva y de vigilancia y como se verá, la puerta de acceso a la misma está situado a unos 3 metros de altura, de forma que, si tenían que protegerse, una vez en el interior, subían la escalera de mano que les servía para subir y cerraban la puerta. La planta más alta tiene 4 ventanas, dirigidas a los distintos puntos cardinales.

Enseguida vemos la St. Kevin’s Church o Iglesia de San Kevin, de los siglos XI a XII. El oratorio tiene un tejado a dos aguas con tejas sueltas sobrepuestas, que recuerda a un barco invertido. La torre del campanario circular es posterior, del siglo XII, y, a partir de ese momento la iglesia fue conocida con el nombre de St. Kevin’s Kitchen (cocina de Kevin), ya que la torre parece una chimenea.

Al lado está la Catedral de San Pedro y San Pablo que es la más grande de las iglesias del recinto. Fue construido en varias épocas, empezando en el siglo XI y acabando en el siglo XIII.

Hay otros edificios como la [b]St. Mary’s Church, la Priest’s House, la iglesia románica St. Saviour…
Tenemos una hora libre para pasear por los senderos que llevan por la orilla del lago inferior hasta el inicio del lago superior: el paisaje es impresionante.



Hay que considerar que St Kevin no era tonto, no. Yo también hubiese escogido un lugar así para retirarme y meditar…
Volvemos a la carrera hasta el aparcamiento que hay junto al lago superior, donde se ha desplazado el autocar para recogernos.
Seguimos viaje hacia un paraje conocido como The meeting of The Waters, es el nombre que se le da a la confluencia de Avonmore (Abhainn Mhór, Río Grande) y Avonbeg (Abhainn Bheag, Río Pequeño) que se unen aquí para formar el río Avoca. Este nombre tan poético se debe a una composición de Thomas Moore, que escribió la letra mientras estaba sentado aquí bajo un árbol.
En un momento nos presentamos en la población Avoca, que si es conocido por algo es por ser la localización de una de las series más famosas de la BBC “Ballykissangel”. Además de la iglesia de Santa María y San Patricio, tiene un Pub, The Fitzgerald’s, donde nos sirvieron el Irish Stew (estofado típico) más caldoso que hemos comido. Curiosamente, el guía también comió estofado, pero el suyo con bastante más carne…

Y regresamos a Dublín después de disfrutar de uno de los paisajes más bellos de la isla esmeralda.