Bakersfield – Fresno: 2h
Fresno – Oakhurst: 55 min
Web del rancho: www.sierraskyranch.com/
Web Yosemite National Park (español): www.nps.gov/yose/espanol/index.htm
Nos esperaba una de las etapas más emocionantes del viaje. Me moría por ver este parque nacional de belleza infinita. Nos levantamos temprano (como no) y nos dirigimos hacia la parte sur del parque, que desde Bakersfield esta a unas 3h de distancia. Hicimos una pequeña parada en Fresno para comprar comida y continuamos hasta Oakhurst, donde teníamos nuestro hotel. Esta vez íbamos a dormir en un rancho. Pensé que sería una idea original y que el lugar estaría bien pero cuando llegamos todavía fue más alucinante. El lugar era de cuento, las habitaciones preciosas y el personal, aunque no hablaban español, de lo más atento. Me habría quedado a vivir allí, de verdad. Después del chek inn y de una detallada atención por parte de la propietaria, que se esforzó acuradamente en explicarnos la historia del rancho y las distintas rutas que hacer por Yosemite, emprendimos camino hacia el parque. Mientras conduces ves miles de abetos que te hacen intuir lo que esta por llegar. Como por tiempo no podíamos visitar el Sequoia NP, decidimos entrar por Mariposa Groove para ver las sequoias que hay en Yosemite. Como no podía ser de otra manera, no te deja indiferente. Al llegar puedes aparcar el coche e ir en autobús, que es lo que hicimos. Una vez allí y con tu mapa, vas siguiendo distintos senderos que te llevan a las sequoias y al famoso Grizzly Giant, que es enorme (el más grande en volumen es el General Sherman y se encuentra en Sequoia National Park). También podréis disfrutar del Fallen Monarch, otra sequoia impresionante caída en el suelo con unas raíces alucinantes.
El Grizzly Giant, en Mariposa Groove. Sus ramas son el doble de anchas que un tronco normal
Observad el tamaño de la sequoia en relación a la gente...
El Fallen Monarch, de 80 metros de largo
Después de hacer una hora de ruta, nos fuimos hacia Yosemite Valley. Antes de llegar, pasas por el Tunnel View, que te deja literalmente helado. El paisaje es tan absolutamente increíble que cuesta de creer lo que ves. Las vistas ofrecen unas vistas majestuosas del parque entero, con el valle, el Half Dome (monolito de piedra enorme) y El Capitán, otro monolito de casi 900 metros y uno de los más escalados del mundo. Si deseáis subir al Half Dome es posible, aunque debéis contar con tiempo.
Querría comentar algo acerca del Hantavirus, problema que se presentó el año pasado y que causó bastante revuelo por las redes debido a la inseguridad que causaba viajar al parque habiendo un virus contagioso circulando por el aire. Os comento que absolutamente todo el mundo hacía vida normal, incluso en el Curry Village, que se encontraba ya abierto. En el parque te informan muy bien, yo estuve hablando con una ranger que me explicó que el peligro ya había pasado y que tenían el virus bajo control al haber eliminado la plaga. Lo comento para aquellos que tengan dudas, ya que, a menos que la cosa se les vuelva a escapar de las manos, ya no existe ningún problema.
Tunnel View...sin palabras
El Half Dome, uno de los monolitos más espectaculares
El Capitán
Vistas generales de las praderas
Ciervos salvajes, una maravilla
Los ríos llevan agua cristalina...
Es recomendable acercarse al centro de visitantes (de 08:30h a 20:30h) para coger algún mapa e información para las rutas, sobretodo si no podéis estar muchas horas en el parque. Desde el centro de visitantes podéis acercaros a las Upper Yosemite Falls y las Lower Yosemite Falls.
El mejor momento para visitarlas es en primavera porque hay fase de deshielo, no obstante nosotros, que estuvimos en Octubre, las encontramos con bastante agua (yo esperaba que estuvieran vacías). Otro punto cercano es la Bridalveil Fall, catarata impresionante muy cercana al centro de visitantes. Como no disponíamos de muchas horas, vimos un poco lo justo, pero nos quedamos sin visitar Glacier Point y Toulumne Meadows. Glacier Point ofrece unas vistas espectaculares del parque, a una altura de casi 1000 metros pero solo es accesible en verano. En relación a Toulumne Meadows, nos quedaba bastante alejado porque entramos por la cara Oeste del parque y decidimos dejarlo para otra ocasión. Este verano volvemos a California y pasaremos dos días en el parque, de modo que podremos verlo adecuadamente.
Bridalveil Falls, aunque era Octubre bajaba algo de agua
Un coyote!
Y vistas espectaculares...
Hay otros lugares de ensueño, como el Lago Tenaya, Mono Lake y Olmstead Point, pero nos los reservamos para este siguiente viaje, en el que además subiremos por el Tioga Pass, un puerto de montaña que cubre la cara este del parque y que ofrece vistas maravillosas.
Vimos animales de todo tipo, zorros, coyotes...aunque el que más me sorprendió fue este ciervo y su cornamenta. No vimos osos, esperamos poder verlos esta próxima vez.
Un precioso ciervo junto a la carretera
Antes de marchar hicimos una parada en el Wawona Hotel, un hotel de estilo colonial cuidado al detalle que prepara desayuno buffé gratuito a diario. En verano ofrece barbacoa cada Sabado por la noche. El hotel abre desde el 29 de Marzo al 1 de Diciembre y se encuentra a 6,5km de la entrada sur del parque.
Vistas del Wawona Hotel
El parque se puede visitar por tu cuenta o con el autobús, que pasa cada 10 minutos. Las entradas se encuentran en el Oeste y el Sur Oeste (las más razonables si venís desde Los Ángeles o San Francisco). Si venís desde Death Valley la entrada adecuada es la del Este, por el Tioga Pass. Nosotros no lo hicimos así porque dudamos sobre si en esa época podríamos pasar sin problemas y cuando vimos que si ya teníamos toda la ruta montada, motivo por el cual decidimos dejarlo tal y como estaba. Tened en cuenta que el Tioga Pass esta cerrado de Noviembre a Mayo por la nieve.
Si no disponéis de Anual Pass, la entrada cuesta 20 dólares por coche, con derecho a 7 días de visita. Recordad de llevar el depósito lleno, hay pocas gasolineras en el parque.
En relación a la seguridad, debéis tener en cuenta no dejar comida en vuestros coches, los osos pueden arrancar de cuajo las puertas para robar alimentos. El parque dispone de unas cajas especiales donde se puede guardar toda la comida.
Cuidado también con las alertas por incendios, sobretodo en verano. La página web oficial os mantendrá permanentemente informados: www.nps.gov/yose/index.htm
Nuestra ruta finalizó en el Wawona Hotel, donde descansamos un rato y disfrutamos del ambiente. Nos dirigimos hacia el rancho, pero antes paramos en Oakhurst para cenar una pizza ENORME (para ellos era la small!) que nos ayudó a recuperar fuerzas. Después de comer, nos fuimos a descansar a nuestra habitación, contentos por el maravilloso día que habíamos pasado.
Fresno – Oakhurst: 55 min
Web del rancho: www.sierraskyranch.com/
Web Yosemite National Park (español): www.nps.gov/yose/espanol/index.htm
Nos esperaba una de las etapas más emocionantes del viaje. Me moría por ver este parque nacional de belleza infinita. Nos levantamos temprano (como no) y nos dirigimos hacia la parte sur del parque, que desde Bakersfield esta a unas 3h de distancia. Hicimos una pequeña parada en Fresno para comprar comida y continuamos hasta Oakhurst, donde teníamos nuestro hotel. Esta vez íbamos a dormir en un rancho. Pensé que sería una idea original y que el lugar estaría bien pero cuando llegamos todavía fue más alucinante. El lugar era de cuento, las habitaciones preciosas y el personal, aunque no hablaban español, de lo más atento. Me habría quedado a vivir allí, de verdad. Después del chek inn y de una detallada atención por parte de la propietaria, que se esforzó acuradamente en explicarnos la historia del rancho y las distintas rutas que hacer por Yosemite, emprendimos camino hacia el parque. Mientras conduces ves miles de abetos que te hacen intuir lo que esta por llegar. Como por tiempo no podíamos visitar el Sequoia NP, decidimos entrar por Mariposa Groove para ver las sequoias que hay en Yosemite. Como no podía ser de otra manera, no te deja indiferente. Al llegar puedes aparcar el coche e ir en autobús, que es lo que hicimos. Una vez allí y con tu mapa, vas siguiendo distintos senderos que te llevan a las sequoias y al famoso Grizzly Giant, que es enorme (el más grande en volumen es el General Sherman y se encuentra en Sequoia National Park). También podréis disfrutar del Fallen Monarch, otra sequoia impresionante caída en el suelo con unas raíces alucinantes.







Después de hacer una hora de ruta, nos fuimos hacia Yosemite Valley. Antes de llegar, pasas por el Tunnel View, que te deja literalmente helado. El paisaje es tan absolutamente increíble que cuesta de creer lo que ves. Las vistas ofrecen unas vistas majestuosas del parque entero, con el valle, el Half Dome (monolito de piedra enorme) y El Capitán, otro monolito de casi 900 metros y uno de los más escalados del mundo. Si deseáis subir al Half Dome es posible, aunque debéis contar con tiempo.
Querría comentar algo acerca del Hantavirus, problema que se presentó el año pasado y que causó bastante revuelo por las redes debido a la inseguridad que causaba viajar al parque habiendo un virus contagioso circulando por el aire. Os comento que absolutamente todo el mundo hacía vida normal, incluso en el Curry Village, que se encontraba ya abierto. En el parque te informan muy bien, yo estuve hablando con una ranger que me explicó que el peligro ya había pasado y que tenían el virus bajo control al haber eliminado la plaga. Lo comento para aquellos que tengan dudas, ya que, a menos que la cosa se les vuelva a escapar de las manos, ya no existe ningún problema.
Es recomendable acercarse al centro de visitantes (de 08:30h a 20:30h) para coger algún mapa e información para las rutas, sobretodo si no podéis estar muchas horas en el parque. Desde el centro de visitantes podéis acercaros a las Upper Yosemite Falls y las Lower Yosemite Falls.
El mejor momento para visitarlas es en primavera porque hay fase de deshielo, no obstante nosotros, que estuvimos en Octubre, las encontramos con bastante agua (yo esperaba que estuvieran vacías). Otro punto cercano es la Bridalveil Fall, catarata impresionante muy cercana al centro de visitantes. Como no disponíamos de muchas horas, vimos un poco lo justo, pero nos quedamos sin visitar Glacier Point y Toulumne Meadows. Glacier Point ofrece unas vistas espectaculares del parque, a una altura de casi 1000 metros pero solo es accesible en verano. En relación a Toulumne Meadows, nos quedaba bastante alejado porque entramos por la cara Oeste del parque y decidimos dejarlo para otra ocasión. Este verano volvemos a California y pasaremos dos días en el parque, de modo que podremos verlo adecuadamente.
Hay otros lugares de ensueño, como el Lago Tenaya, Mono Lake y Olmstead Point, pero nos los reservamos para este siguiente viaje, en el que además subiremos por el Tioga Pass, un puerto de montaña que cubre la cara este del parque y que ofrece vistas maravillosas.
Vimos animales de todo tipo, zorros, coyotes...aunque el que más me sorprendió fue este ciervo y su cornamenta. No vimos osos, esperamos poder verlos esta próxima vez.
Antes de marchar hicimos una parada en el Wawona Hotel, un hotel de estilo colonial cuidado al detalle que prepara desayuno buffé gratuito a diario. En verano ofrece barbacoa cada Sabado por la noche. El hotel abre desde el 29 de Marzo al 1 de Diciembre y se encuentra a 6,5km de la entrada sur del parque.
El parque se puede visitar por tu cuenta o con el autobús, que pasa cada 10 minutos. Las entradas se encuentran en el Oeste y el Sur Oeste (las más razonables si venís desde Los Ángeles o San Francisco). Si venís desde Death Valley la entrada adecuada es la del Este, por el Tioga Pass. Nosotros no lo hicimos así porque dudamos sobre si en esa época podríamos pasar sin problemas y cuando vimos que si ya teníamos toda la ruta montada, motivo por el cual decidimos dejarlo tal y como estaba. Tened en cuenta que el Tioga Pass esta cerrado de Noviembre a Mayo por la nieve.
Si no disponéis de Anual Pass, la entrada cuesta 20 dólares por coche, con derecho a 7 días de visita. Recordad de llevar el depósito lleno, hay pocas gasolineras en el parque.
En relación a la seguridad, debéis tener en cuenta no dejar comida en vuestros coches, los osos pueden arrancar de cuajo las puertas para robar alimentos. El parque dispone de unas cajas especiales donde se puede guardar toda la comida.
Cuidado también con las alertas por incendios, sobretodo en verano. La página web oficial os mantendrá permanentemente informados: www.nps.gov/yose/index.htm
Nuestra ruta finalizó en el Wawona Hotel, donde descansamos un rato y disfrutamos del ambiente. Nos dirigimos hacia el rancho, pero antes paramos en Oakhurst para cenar una pizza ENORME (para ellos era la small!) que nos ayudó a recuperar fuerzas. Después de comer, nos fuimos a descansar a nuestra habitación, contentos por el maravilloso día que habíamos pasado.





