Idioma: English Español
Mostrar/Ocultar Blogs / Diarios
Mostrar/Ocultar Fotos / Pics
Blogs 
KRABI - RAILAY

KRABI - RAILAY ✏️ Diarios de Viajes de Tailandia Tailandia

Nos levantamos a las seis y media. Tranquilos no nos habíamos vuelto locos. Esa misma mañana volábamos con destino a Krabi. A las siete menos cuarto salíamos del hotel sin desayunar. Nada más salir pillamos un atasco. Me entraron temblores por las...
Espitoni Autor:   Fecha creación:   Puntos: 0 (0 Votos)

Diario: 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA

Puntos: 4.9 (19 Votos)  Etapas: 17  Localización:Tailandia Tailandia

Nos levantamos a las seis y media. Tranquilos no nos habíamos vuelto locos. Esa misma mañana volábamos con destino a Krabi. A las siete menos cuarto salíamos del hotel sin desayunar. Nada más salir pillamos un atasco. Me entraron temblores por las piernas. Como fuese igual que el del día anterior, no llegábamos a tiempo al aeropuerto ni de coña. Por suerte lo del atasco fue solo un espejismo. La circulación se normalizó al poco tiempo y empezamos a circular de forma fluida. Paramos para llenar el depósito. 400 bth, a 36,48 bth el litro. Tardamos unos 20 minutos incluyendo la parada para repostar. Llegamos al aeropuerto sin problemas y con tiempo más que suficiente. Y menos mal, porque al llegar, no vimos el parking de los rent a car. Pasamos por delante del aeropuerto y nada. Salimos y volvimos a entrar. Y tampoco. Acabamos delante del parking normal. Antes de entrar mi mujer bajó del coche y le preguntó a un guarda que había en la entrada del parking. Su respuesta, si, si, si. Y nos metimos. Pero no, no, no. No era allí. Y es que esa es una de las peculiaridades de esa gente. Siempre dicen que sí, aunque no entiendan ni una sola palabra de los que les estés diciendo. Sonríen y dicen que si.
Salimos sin parar. Pero antes nos cobraron 25 bth solo por pasar por dentro. Lo del dinero me daba igual. Lo que empezaba a preocuparme era como íbamos a salir de esa. Porque lo de dejar el coche abandonado en una esquina no me parecía una buena idea. A grandes males, grandes soluciones. Nos dirigimos a llegadas, y paramos delante de la terminal. Dejé a mi mujer al cuidado del coche y me fui corriendo a buscar la oficina del rent a car. No me costó localizar la oficina de Sixt. Un chico salió de detrás del mostrador y me acompañó hasta el coche. Pues resulta que para devolver el coche en el aeropuerto de Suvarnabhumi hay que hacer precisamente eso, ir a la terminal de llegadas y avisar en el mostrador de la compañía correspondiente.
Él mismo nos acercó a la terminal de salidas, y sin ni siquiera mirar el coche nos dio el OK. Eso delante de la terminal de salidas. Como si no tuvieran un parking donde devolver el coche.
El proceso de facturación fue muy rápido lo que nos dejó tiempo más que suficiente para ir a la sala de espera de Bangkok Airways. Supongo que a estas alturas todo el mundo lo sabe ya, pero por si queda algún despistado por ahí, esta compañía tiene una sala de espera en la que pueden entrar todos los pasajeros que vuelan con ellos. Es una especie de sala VIP, pero sin que sea necesario volar en Bussines para acceder a ella. Antes de entrar comprobaron los billetes y nos apuntaron una clave para acceder a internet sobre los mismos. Pero lo mejor no fue el wifi, ni los sofás, ni las sillas con mesas. Lo mejor fue el bufete. Cuatro cosas para picar, o como en nuestro caso, para desayunar. Café, chocolate, mini sándwiches, bizcocho de chocolate, y alguna otra cosa que no recuerdo. Así que aprovechamos y desayunamos gratis por gentileza de Bangkok Airways. Todo un detallazo. Me puse las botas de bizcocho de chocolate. Estaba buenísimo.
Nuestro vuelo, el PG0222 salió puntual a las nueve y cuarto. Nos volvieron a servir el desayuno. Y como siempre hay sitio para un poco más, para adentro. El vuelo llegó puntual a las once menos veinte.
La predicción meteorológica que llevábamos vigilando desde hacía unos días no se equivocó. Nos recibió un tiempo terrible. Totalmente nublado y con una ligera llovizna. No hacía frío pero tampoco el calor bochornoso que nos había acompañado los días anteriores. Una lástima llegar a la playa y encontrar ese tiempo tan malo. Y eso que en teoría la temporada de lluvias ya había terminado.
Recogimos las maletas y salimos a la terminal,. Sólo había un chiringuito donde ofrecían taxis. Nos pidieron 600 bth por un taxi que nos llevara a Aonang. Intenté negociar, pero se negaron en redondo. Precio fijo. Si lo quieres lo tomas y sino te jodes. Busqué algún otro sitio donde ofrecieran taxis, pero no lo había. Salimos a la calle y enseguida se nos acercó un joven que nos preguntó a dónde íbamos. A Aonang. OK, los tickets hay que comprarlos en el interior. Estábamos atrapados. No nos quedaba más remedio que pasar por el tubo. Entramos de nuevo en la terminal y nos dirigimos al mostrador. ¡Qué otra nos quedaba!. Sorprendentemente esta vez en lugar de un taxi, nos ofrecieron ir en autobús. 150 bth cada uno, la mitad que yendo en taxi. Venga pues, iremos en autobús. Nos sentamos dentro, y a esperar. No tardó en llenarse por lo que el autobús no tardó mucho en ponerse en marcha. Directos a Aonang. El autobús iba muy lento, le costaba bastante. Tardó cerca de una hora en llegar a Aonang. El mal tiempo no ayudaba mucho. Una vez en Aonang fue haciendo paradas en los hoteles que habían indicado los pasajeros.
No fuimos los primeros, pero tampoco los últimos. Nuestro hotel era el Mercure Deevana Krabi. Un hotel muy nuevo pero un poco alejado de la playa. La habitación estaba muy bien, nueva y grande. Y la piscina era espectacular. Estrecha pero larguísima. Recorría todo el complejo del hotel. Algunas habitaciones incluso tenían acceso directo a la piscina. Fue la piscina más bonita de todas las que vimos en el viaje. Y el precio inmejorable. 6.000 bth por cuatro noches. Supongo que el hecho de no estar en primera fila hace que los precios tengan ser más bajos que los de la competencia para atraer clientes.
Dejamos la maleta en la habitación y directos a la calle en dirección a la playa. De camino realizamos una pequeña prospección del precio de las excursiones. Preguntamos en cuatro sitios diferentes. Cada uno con un resultado diferente. Por cierto pedimos precio por tres excursiones para dos personas. Phi Phi Island; Four Islands; y Hong Islands.
De los cuatro sitios nos quedamos con dos. En uno nos pidieron más de 5.500 bth por las tres excursiones para dos personas. Casi sin regatear bajaron a 5.000 bth. En el otro sitio el precio de salida era el mismo, pero cuando empezamos a regatear nos las dejaron en 4.600 bth. De ahí no hubo manera de bajar. Ah, y los mayoristas eran los mismos en las dos agencias de viajes. Me gustó esta opción. Si hubiera bajado un poco más probablemente las habría comprado en ese momento. Pero al no hacer la última bajada preferí mirar un poco más. Pero la vendedora parecía muy confiada en su oferta, y nos dijo que comparáramos con otros sitios.
Al final de la calle nos encontramos con el muelle desde el que salían los barcos que iban a Railay. Ya teníamos plan para esa tarde. Pero antes teníamos que comer. Más vale prevenir que curar, y vete tú a saber que nos íbamos a encontrar en Railay.
Comimos en un restaurante que vimos al otro lado de la calle justo enfrente del muelle. Pedimos unas verduras salteadas, una tempura de gambas, unas gambas con verduras, un agua y un sprite. La comida simplemente pasable. El precio desorbitado, 670 bth. Un palo.
Y ahora sí, a Railey. Nada más entrar en le muelle vimos la taquilla en la que vendían los tickets. El precio era fijo, ni nos molestamos en regatear. Eran 100 bth por trayecto y persona. Con el billete en la mano nos dirigimos hacia la playa y en un extremo vimos la barca en la que nos teníamos que montar. Estaba varada sobre la arena, dentro del agua. Pues nada a mojarse toca. Agua hasta las rodillas con mucho cuidado de no mojarnos los pantalones, escalerilla metálica un poco inestable y alehop, ya estábamos en la barca. Fuimos los primeros en subir, pero a los cinco minutos la barca ya estaba llena. Casi todo gente cargada con maletas o con unas mochilas enormes. Me pareció muy incómodo eso de tener que cargar las maletas sobre la cabeza para poder subirlas a la barca. Todos acababan con los bajos mojados. Vamos, vamos, rapidito que ya tenemos ganas de llegar a la playa.
Por cierto, la última barca vuelve a las seis de la tarde. Detalle importante, si uno no quiere quedarse colgado en Railay. Aunque supongo que siempre se podrá encontrar a alguien con una barca dispuesto a devolveros a Aonang. Previo pago de una buena cantidad, evidentemente.
Antes de zarpar, durante los cinco minutos de espera, tuvimos tiempo de echarle un vistazo a la playa de Aonang. Una estrecha franja de arena, con los árboles sobre la orilla. El agua no se veía demasiado limpia; estaba un poco turbia. No era una playa paradisiaca, pero tampoco estaba tan mal como había leído. Sobre todo el entorno que si que tenía su punto. A mi me causó una buena impresión. Al menos en ese primer momento. Más tarde ya se verá.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (1)

El barco fue navegando a muy poca distancia de la costa. Las vistas eran preciosas. Sobre los acantilados costeros entre los que pudimos distinguir unas pocas playitas de arena. El paseo en barca no duró más de diez o quince minutos, pero resultó muy agradable. No me hubiera importado que nos hubieran dado una vuelta un poco más larga. Total, con el tiempo que hacía no es que apeteciese mucho tumbarse en la playa. Una primera parada en Tonsai y seguidamente a Railay.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (2)

Me había parecido leer que los barcos paraban en la parte mala de Railay. Que esa zona más que una playa era un manglar. Pero a mí aquella playa me parecía muy bonita. Mucho más que la de Aonang. En ese momento pensé, si esta es la playa de la que todo el mundo habla tan mal, la otra debe ser la ost…a
Para desembarcar se repitió el proceso; escalerilla metálica, salto al agua con cuidado de no mojarse; y con el agua hasta las rodillas, intentar llegar a la orilla sorteando las olas. Un procedimiento extraño, pero muy apropiado para mantener el entorno, ya que de esta manera no es necesario construir muelles ni puertos que alteren el paisaje. Además como la temperatura del agua era alta, tampoco pasaba nada si nos mojábamos.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (3)

La playita en cuestión era una pequeña franja de arena dorada. Con los árboles y la vegetación sobre la misma arena. Y enmarcando el conjunto unos bonitos acantilados de roca cubiertos de plantas. El único pero, los chiringuitos que habían construido en primera línea de la playa. Los chiringuitos le quitaban ese punto salvaje que esperábamos encontrar en este tipo de playas. Sin ellos el lugar hubiera sido casi perfecto. Lo que si que era una maravilla era el agua. No solo porque estuviera calentita, sino por lo transparente que era. Limpia a pesar de los barcos atracados en la arena.
No nos enredamos mucho, ya que si esa era la playa fea, mejor irnos a la otra. Tomamos un camino de arena que cruzaba lo que debía ser el pueblo. Nada, unos pocos bares / guesthouses con aire mochilero. El camino atravesaba la isla. Lo que podría ser un camino precioso, por la arena por la que se caminaba, por el entorno que lo rodeaba; quedaba muy desmejorado por toda la porquería que encontramos. Basura por todos los lados, con un aspecto muy descuidado. No salvaje, ni selvático, sino descuidado. Un poco de limpieza no le vendría mal a este lugar.
Como la península no era muy grande, no tardamos mucho en llegar a Railey West. Menuda decepción. Aquello no era una playa. Era un manglar; que no sé lo que es, pero si todo el mundo dice que lo es, por algo será. Así que en manglar en queda. Una playa horrorosa, que en vez de arena parecía ser de fango. Con el agua formando charcos por el fango, y unos arbustos horrorosos naciendo en el agua. Pero que cosa más ……., más …….. No apetecía nada quedarse allí. Y de bañarse ya ni hablo. ¡Qué horror!, ni bajamos a la arena.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (4)

Estaba claro nos habíamos equivocado totalmente. La playa buena era la otra, y ésta el manglar o churro de playa. Un pequeño fallo técnico que nos obligaba a seguir caminado para llegar a otro lugar que resultase un poco más interesante.
De todas formas no todo fue negativo en Railay West. Fotogénicamente si que resultaba muy atractiva. Los altos acantilados, las plantas sobre el agua, la ancha franja de ….¿arena?. Pudn conseguir unas fotos fantásticas. Pero de meterse en el agua nada de nada. De hecho no había nadie nadando. Ni una sola toalla en la arena. Como curiosidad, al fondo de la playa vimos a un grupo de gente haciendo escalada.
Buscando un lugar más apetecible para sentarnos en la arena tomamos el camino a Phra Nang. Un camino mucho más bonito que el anterior, y sobre todo mucho más limpio.
El camino avanzaba por debajo de la roca erosionada, dando la sensación de estar en una cueva. Las rocas tenían formas caprichosas. Algunas parecían colgar del techo y otras tenían la forma de columnas que parecían aguantar el techo. El lado derecho estaba abierto, quedando delimitado el camino en ese lado por una valla de bambú. Este camino si que era muy bonito. Y por si eso fuera poco, está lleno de monos. Los vimos sobre la valla de bambú. Pero no nos hicieron ni caso. Como no llevábamos comida en las manos pasaron de nosotros. Ese día pensé, ¡qué exagerada que es la gente!. Dos días más tarde, al pasar por ese mismo lugar cambié de opinión.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (5)

La playa de Phra Nang era la más bonita de las tres con diferencia. La franja de arena era un poco más ancha. Decir que el agua era transparente es quedarse corto. A la izquierda, la playa se encontraba limitada por una pared de roca. Un bonito acantilado gris y verde. Hacia la derecha, tres colores. El azul turquesa del mar, el tostado de la arena, y el verde de la jungla que marcaba el límite de la playa. Por ese lado la playa describía una curva, quedando oculta tras ella el acantilado que la limitaba por ese lado. Y enfrente varias rocas que salían del agua cubiertas totalmente de vegetación. Ese lugar es lo más parecido al paraíso de todas las playas que visitamos en Tailandia. Un lugar precioso, del que resulta fácil enamorarse. Sin duda alguna es la playa más bonita que vimos en los cuatro días que estuvimos en Krabi. Y eso que no hacía sol. Si hubiera hecho buen tiempo ya habría sido el no va más.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (6)

Aunque no lucía el sol no pude resistirme a tomar un primer baño. El agua estaba calientita. Así da gusto ir a la playa y no da nada de pereza tomar un baño. Pero como soy un culo de mal asiento no aguanté mucho tiempo en el agua. Mi mujer me esperaba tumbada en la arena. Me tumbé un rato junto a ella. Pero aquello era demasiado para mí. Me cuesta mucho quedarme parado en un sitio sin hacer nada, sabiendo que hay mil cosas por ver. Y que conste que me esforcé y aguanté todo lo que pude. Pero no fue suficiente. Elegí un objetivo y me lancé a por él.
A la izquierda de la playa, bajo el acantilado se han formado dos pequeñas cuevas. Aunque más que cuevas podríamos dejarlo en oquedades. En el interior clavados sobre la arena había un montón de falos, como si se tratara de dos altares. Los había de todos los tamaños y colores. Una curiosidad, pero poco más. Al final no era más es eso, unos cuantos palos pintados en forma de miembro sexual masculino clavados en la arena. Resultaba un poco raro ver todo eso allí delante. No sé si para los tailandeses ese lugar tendrá algún significado, pero a mí me pareció una frikada. Un sitio curioso para hacerse una foto. Pero de ahí a decir que es bonito hay un mundo.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (7)

Junto a las cuevas, una pequeña lengua de arena de no más de un metro de ancho permitía pasar a una zona llena de rocas. Era como si el techo de una cueva se hubiera derrumbado dejando el suelo lleno de mega rocas. Entre las rocas, un pequeño sendero de arena avanzaba haciendo eses hasta quedar cortado. Para pasar había dos opciones, o subirse por encima de unas rocas del tamaño de dos persona, o pasar a cuatro patas por un agujero que quedaba entre dos rocas. Opte por la primera vía. Pasar no resultó muy difícil. Y eso que iba con chanclas. El estrecho sendero de arena continuaba entre rocas enormes debajo de un techo de piedra. Eran unos pocos metros, pero el sitio era precioso. Diferente. Y finalizaba en la orilla junto a unas rocas. Un estrecho corte entre las paredes de roca. No había nada parecido a una playa, y las vistas tampoco merecían la pena. Solo se veía al agua. Si alguno tiene tiempo puede volver a la playa nadando bordeando la orilla. Para los menos atrevidos no queda otra opción que dar media vuelta y volver por donde se ha venido. A la vuelta opté por agacharme y pasar a cuatro patas bajo la roca. Resultó mucho más cómodo que saltar por encima. De vuelta a la playa, la pequeña lengua de arena por la que había pasado cuando entré en la cueva, había desaparecido. La marea había subido y se la había tragado. Y es que las mareas subían y bajan a una velocidad de vértigo. Me tomé otro baño y de nuevo a la arena con mi mujer, que aceptaba con resignación mis idas y venidas.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (8)

Pero la paz duró poco. Había una cosa que me apetecía muchísimo hacer. Ir hasta el mirador y la laguna interior. Convencí a mi mujer de que me daría prisa y salí casi a la carrera para aprovechar el tiempo al máximo. El inicio del camino al mirador estaba muy cerca de la playa. Y como estaba bien indicado no me costó localizarlo. De hecho ya me había fijado donde estaba cuando veníamos
Al llegar a la entrada del camino varios monos se habían adueñado de él. Y un grupo de curiosos los cosían a fotos. Esperé unos pocos minutos a que la situación se normalizara y me lancé a la aventura. Me crucé con una pareja de españoles que ya estaban de vuelta y les pregunté si era tan complicado como decían. Me contestaron que si, que la subida era bastante dura, pero que una vez arriba llegar al mirador resultaba sencillo. En cambio la laguna interior era otro cantar. Había que bajar dos paredes verticales descolgándose por una cuerda. No lograron desanimarme. Estaba decidido a subir hasta allí arriba. Hasta me había calzado unas zapatillas de trekking, que había llevado en la mochila expresamente para hacer esa mini excursión.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (9)

Esa subida fue una locura. Una pared casi vertical en la que tuve que ascender trepando, ayudándome de todo lo que quedaba al alcance de las manos. Raíces, ramas, rocas, y sobre todo unas cuerdas que habían colocado al efecto. En algún tramo se podía subir sin la ayuda de las cuerdas, pero en la mayor parte de la subida eran indispensables. Hay gente que dice que no son seguras, que cuanto menos se utilicen mejor. Pero a mí no me dieron esa impresión. Además tenían otra utilidad, iban marcando el camino, por lo que en todo momento resultaba muy sencillo saber por donde habái que subir. Para rematar la faena el camino estaba embarrado y patinaba un montón.
Una vez arriba el camino se volvió más suave. Pero a duras penas se distinguía. Había árboles, ramas, hojas por todas partes. Y olvidaros de encontrar cualquier tipo de señalización. Pero aún así resultó sencillo. Una vea arriba el camino se bifurcaba en dos. El de la izquierda conducía al mirador, el de la derecha a la laguna interior.
Yo opté por el camino del mirador, que una vez superada la ascensión inicial no presentó ninguna dificultad. Desde abajo hasta el mirador tardé unos veinte minutos. Pero que quede claro que subí como una moto. Ahora lo pienso y fui un inconsciente subiendo de esa manera. Todavía no entiendo como no acabé escalabrado.
Mientras subía, me preguntaba si aquello merecía la pena. Al llegar al mirador el cansancio desapareció de golpe. Las vistas eran espectaculares. De esas que quitan el hipo. Se veía gran parte de la península, con Railay West a un lado y Tonsai, al otro; y en medio un enorme palmeral que las separaba. Bueno creo que era la playa de Tonsai, pero no lo sé a ciencia cierta. Esas vistas eran realmente impactantes. El esfuerzo de subir hasta allí arriba había merecido la pena. Por cierto aunque se diga que es un mirador, yo no lo calificaría como tal. No había nada, ni una triste barandilla de madera. No era más que un pequeño claro al final del camino que se asomaba sobre un acantilado. Sin ningún tipo de protección. Pero no importa que no sea un mirador de verdad. Eso es lo de menos. Lo imp0ortante es lo que se veía desde allí, y eso no se paga con dinero.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (10)

Me quedé un rato disfrutando de las vistas. Estaba yo solo. ¡Que momentazo!. Fue lo mejor de los cuatro días que pasamos en la zona de Aonang.
Por desgracia no pude dedicarle todo el tiempo que me hubiera gustado. Le había dicho a mi mujer que me daría prisa, y eso significaba que no podía enredarme demasiado. Deshice un poco el camino y tomé el desvío hacia la laguna.
Primero una bajada sencilla, simplemente había que tener cuidado de no patinar. Pero no tardó mucho en complicarse. La bajada pasó a ser del estilo de la primera subida. Eso sí más corta. No sé si fue cosa mía o si por el efecto óptico de la bajada, pero me pareció incluso un poco más complicada que la subida. Menos mal que pude servirme de las cuerdas; sin ellas no creo que hubiera podido bajar esa rampa. Una vez abajo ya se veía la laguna interior por una grieta. Una pequeña parte, pero que ya permitía intuir la maravilla que se escondía al final de esa bajada. Solo con verla desde allí ya me maravilló. Pero a partir de ese punto la bajada se complicaba mucho. Ya no bastaba con bajar como una cabra, había que descolgarse por una cuerda como si se hiciera rappel. Y no una vez, sino dos, había dos tramos de pared en los que tendría que descolgarme. Pero lo peor es que a la vuelta había que subirlos. Me pareció demasiado lío para una persona sola. Si hubiera ido acompañado tal vez me hubiera lanzado. Que digo tal vez, seguro que hubiera bajado. Pero yendo solo me dio un poco de palo. Aquello me iba llevar bastante tiempo, ya que esas cosas no pueden hacerse a lo loco. Al menos un poco de cuidado hay que tener y eso se traduce en tiempo. Me quedé con las ganas de ver la laguna de cerca. Otra vez será.
Media vuelta y de nuevo hacia arriba. Subir este tramo me pareció más sencillo que bajarlo. Y al contrario, bajar el tramo que acababa en el camino de la playa me pareció mucho más complicado de lo que me había parecido subirlo. Es por la sensación que produce mirar hacia abajo y darte cuenta de que si echas mal un pie o pegas un patinazo no vas a parar de rodar hasta que llegues al fondo. Por suerte no pasó nada de eso y llegué abajo, sano y salvo. Hecho un guarro, sudado y embarrado; pero de una pieza.
Al llegar a la playa la cara de susto de mi mujer ya me dejó claro que no hacia falta que me acercará. Directo al agua. Un chocolate espeso me rodeo en un instante. Llevaba barro hasta en las orejas. Vaya guarrería. Pero que divertido. No sé porqué, pero muchas veces el nivel de diversión que uno puede alcanzar está íntimamente ligado a lo que se está dispuesto a ensuciarse.
Una vez recuperado mi aspecto normal, recogimos los trastos y nos fuimos paseando hasta el final de la playa. Un agradable paseo por la orilla sobre la arena. Ya empezaba a hacerse tarde y la mayoría de la gente ya se había ido. Con el día tan horrible que hacía no apetecía mucho estar en la playa. La verdad es que la parte izquierda, por donde se entraba en la playa, era más bonita, con el acantilado, y las cuevas. Pero desde la derecha también se tenían unas vistas muy buenas.
Por ese lado la playa no tenía salida. Alguno dirá que él salió por ese lado nadando. Y otro que él se encaramó por las rocas. Pero eso no es una salida para gente normal. ¡Raros, que sois unos raros!
Al no haber salida volvimos caminando por la orilla. Podría haber sido un paseo romántico con una bonita puesta de sol de fondo. Eso si las nubes nos hubieran dejado ver algo. Nos consolamos disfrutando de la belleza del lugar. De repente se nos acercó un barquero y nos preguntó a donde íbamos. A Aonang. ¿Y cuando habéis pagado para venir?. 100 bth. ¿Puedo ver el ticket?. Si, míralo. Lo discutió con otro chico que lo acompañaba y nos dijo que ellos nos llevaban por ese mismo precio. Desde allí, sin necesidad de ir caminando hasta Railay East. Venga pues. Pero tenía truco. Nos dijo que esperáramos a que buscara más gente para llenar la barca. ¡Llenar la barca!. Pero si no queda nadie. No, no, no. Y si no la llenas, qué, nos quedamos aquí tirados. Nos giramos y seguimos caminando hacia la salida de la playa. No era un farol, ni tan siquiera lo hicimos para obtener un precio más barato. Simplemente no queríamos quedarnos a pasar la noche en la playa. Pero ellos no quisieron perder unos clientes tan fácilmente. Salieron corriendo detrás de nosotros, y nos dijeron que de acuerdo, que salíamos enseguida. Pagamos, nos mojamos los pies y subimos a bordo.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (11)

Nos ahorramos tener que atravesar andando toda la isla, y además fuimos con una barca para nosotros solos. Nos sentamos debajo del toldo, para resguardarnos del aire, nos tapamos con una toalla, y a disfrutar del paseo. Si la ida me había gustado, la vuelta fue todavía mejor. En una barca más pequeña, con mejor visibilidad, y nosotros solos, lo que quieras que no, hace que te sientas más cómodo. Las vistas sobre los acantilados cortaban el aliento. Lástima que solo fueran quince minutitos de nada. Si el tipo aquel me llega a decir que primero tenía que pararse el algún sitio o que teníamos que dar un rodeo, le hubiera dicho que sí sin pensarlo. Cualquier cosa con tal de dar un paseo más largo. No hubo suerte.

KRABI - RAILAY - 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA (12)

Nos dejó en la playa de Aonang, en el mismo sitio donde habíamos cogido la barca al mediodía. Pero parecía otro lugar. La marea había bajado mucho y la playa se había convertido en un lodazal. Ya no parecía una playa. La franja de arena era mucho más amplia. Pero tampoco parecía arena, era una especie de pasta grisácea. Y al pisarla era como un limo en el que se hundían los pies al caminar. En ese momento entendí las críticas que había leído sobre esa playa. Con la marea baja perdía mucho.
De camino al hotel paramos en la agencia que nos había ofrecido el mejor precio con la intención de cerrar el trato y contratar las excursiones para los próximos tres días. Pero la chica no estaba. El chiringuito estaba abierto, con las luces encendidas, pero no había nadie. Esperamos un rato, pero seguía sin aparecer nadie. No quería pasarme la tarde allí esperando como un pasmarote, así que continuamos el camino hacia el hotel. Ya volveríamos más tarde.
Antes quise hacer otro intentó, y paré en otra agencia. Resultó que la chica que la atendía era una de a las que había preguntado por la mañana. Y me reconoció. Al darme cuenta intenté escapar, pero me siguió y no me dejó hasta que acepté ir con ella a otra agencia. Sí, no me llevó a la suya, sino a otra diferente, en la que había un chico. Hay cosas que se escapan a nuestro entendimiento, y vale más aceptarlas sin preguntarse el por qué. No queríamos volver a empezar con regateos, así que le dijimos que no queríamos regatear, que nos diera el precio final, y que si nos convencía se lo compraríamos. Nos pidió 4.800 bth. Casi. Le dije que un poco más abajo nos habían ofrecido lo mismo por 4.500 bth. Era una mentirijilla sin maldad, el mejor precio que teníamos eran 4.600 bth, pero contaba que no aceptaría mi oferta e intentaría subir algo. Pero al hacerle la oferta, el tipo se hizo el ofendido y nos dijo que no. Ni contraoferta ni narices, que nos fuéramos a otro sitio. Como tú quieras. Nos levantamos y nos fuimos. Yo alucinaba, no me esperaba esa respuesta.
Volvimos a la agencia que nos había dado el mejor precio, pasando por delante de la chica que nos había atrapado por la mañana. Allí seguía sin haber nadie. ¿Pero dónde se ha metido esta tía?. Mientras esperábamos, pregunté en otra agencia que había enfrente. 6.000 bth. Se iba de precio y no tenía ganas de iniciar el regateo de nuevo.
En la agencia que nos interesaba seguía sin aparecer nadie. ¿Pero dónde están?. Vámonos al hotel, pero ahora sin paradas. Hay que ser duros. ¡Qué te crees tú eso!. Al pasar por delante de la otra chica, nos volvió a parar. Es que somos unos flojos de espíritu. La cosa fue más o menos así.
- Mi amigo me ha dicho que queréis pagar 4.500 bth.
- Así es.
- Si os consigo el mismo precio me las compráis a mí.
- Si claro.
- No hay más que hablar, trato hecho.
La única condición que nos puso fue que la excursión del día siguiente fuese la de Phi Phi Island.
Las tres excursiones eran Phi Phi Island con barca rápida (Aonang Spead Boat Tour); Four Islands en long tail (Andaman Krabi) y Hong Islands en long tail (Barracudas Tour). No prestamos mucha atención a quienes eran los mayoristas, aunque me había cansado de leer que eso era lo realmente importante. El problema es que cuando alguien escribe bien de una agencia, enseguida salé otro contestándole que tuvo una mala experiencia con esa agencia. Y al final no sabes cuales son las buenas y cuales la malas.
Con los deberes hechos, ya nos podíamos ir a descansar un rato al hotel. Cuando llegamos al hotel ya eran casi las siete.
Un poco antes de las nueve salimos a cenar. Recorrimos toda la calle del hotel. Pasamos por delante de varios restaurantes pero no teníamos prisa por lo que no nos paramos. Al llegar al final de la calle, surgió la duda, hacia la derecha o hacia la izquierda. Nos decidimos por girar a la izquierda. Porque sí. Y cuando nos cansamos de pasear, pues a cenar. Nos metimos en un restaurante que no era más que una terraza. Estaba lleno. Nos dijeron que esperáramos un poco, que enseguida nos podríamos sentar. Y así fue, al poco rato se vació una mesa y pudimos sentamos. Cenamos un plato de calamar con noodles gigantes, otro de gambas con ajo, un agua y un sprite. Nos cobraron 300 bth. Un precio razonable para Aonang, donde por regla general los precios suelen ser un poco más elevados que en el norte. De postre, sin pedirlo, a todo el mundo le servían una rodaja de piña y una de sandía. La cena no estuvo mal, y el precio ya lo he dicho, razonable.
Al salir del restaurante nos metimos entre pecho y espalda dos crepes. Una de nutela y la otra de plátano con chocolate, regadas con un batido de sandía. 80 bth. Delicioso.
Y a dormir, que a lo tonto se nos había hecho tarde.



📊 Estadísticas de Etapa ⭐ 0 (0 Votos)
  Puntos Votos Media Visitas
Actual 0 0 Media 2
Anterior 0 0 Media 2
Total 0 0 Media 2408

05 Puntos
04 Puntos
03 Puntos
02 Puntos
01 Puntos
Para votar necesitas conectarte como usuario registrado.
Te puedes registrar gratis haciendo click aquí

comment_icon  Últimos comentarios al diario: 17 DIAS DE NOVIEMBRE DE 2013 POR TAILANDIA
Total comentarios: 9  Visualizar todos los comentarios
Ricardillo  ricardillo  08/01/2015 01:44
Muy buen relato,lo unico que para gustos colores , a mi la comida si me gusto y mira que yo aqui soy tikis mikis con la comida y por suerte he probado muy buenos sitios ,pero lo dicho ,sobre gustos,,,,,, Felicidades por el relato
Marimerpa  marimerpa  21/01/2015 18:53   📚 Diarios de marimerpa
¿Qué ha pasado con las fotos? Trist
Neska-viajera  neska-viajera  08/06/2015 14:13
Comentario sobre la etapa: CHIANG MAI - TREKKING, RAFTING Y ELEFANTES
Sé que es hace tiempo, pero me ha encantado la excursión de trekking y rafting que has contado que hiciste en Chiang MAi. He leído por ahí que la contrataste en el mercado nocturno, ¿te acordarías del nombre de la agencia o de dónde estaba? Muchas gracias!
Iskrenub  iskrenub  26/06/2015 13:29   📚 Diarios de iskrenub
Buenísimo el diario, con mucha parrafada y muchos datos, como a mi me gusta porque puedes obtener mucha ayuda. Solo voy por la mitad pero ya me parece magnífico. Lástima que no se vean las fotos. A ver si puedes colgarlas.
Iskrenub  iskrenub  27/06/2015 12:15   📚 Diarios de iskrenub
Comentario sobre la etapa: BANGKOK - CHATUCHAK MARKET Y MBK
!Ay...! Pero le falta algún epilogo final o alguna coletilla o resumen. Termina sin mas ni mas. Te quedas con las ganas, como si ya estuvieras harto de escribir. Lastima.
CREAR COMENTARIO EN LA ETAPA


👉 Registrate AQUÍ

Diarios relacionados
TAILANDIA POR LIBRE: TEMPLOS, ISLAS Y PLAYASTAILANDIA POR LIBRE: TEMPLOS, ISLAS Y PLAYAS Dos semanas visitando Bangkok, Ayutthaya y las playas del Mar de Andamán (zona de... ⭐ Puntos 4.76 (25 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 479
23 días en Tailandia con niños23 días en Tailandia con niños Gran aventura familiar del año 2023 con nuestros hijos de 9 y 6 años. ⭐ Puntos 4.95 (20 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 428
EN EL REINO DE SIAM: TAILANDIA 2017EN EL REINO DE SIAM: TAILANDIA 2017 Diario práctico de nuestro viaje de 16 días a Tailandia visitando Bangkok, Ayutthaya, Chiang... ⭐ Puntos 4.74 (34 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 314
TAILANDIA y CAMBOYA: cumpliendo el sueño asiáticoTAILANDIA y CAMBOYA: cumpliendo el sueño asiático 3 semanas en Mayo-Junio 2014 a través de Tailandia y Camboya por libre. ⭐ Puntos 4.88 (43 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 258
FIN DE AÑO EN EL NORTE DE TAILANDIAFIN DE AÑO EN EL NORTE DE TAILANDIA Dos semanas en Tailandia visitando: Chiang Mai, Lamphun, Mae Hong Son y Pai, con un par de... ⭐ Puntos 5.00 (35 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 249


forum_icon Foros de Viajes
Pais Tema: Ayuda viaje a Tailandia
Foro Tailandia Foro Tailandia: Foro de viajes a Tailandia: Bangkok, Chiang Mai, Koh Samui, Phuket, Phi Phi, Pattaya...
Ir a tema del foro Ir a tema del foro
Últimos 5 Mensajes de 1081
1712859 Lecturas
AutorMensaje
KuMpLY
KuMpLY
Experto
Experto
25-02-2019
Mensajes: 223

Fecha: Jue Mar 21, 2024 02:19 pm    Título: Re: Ayuda viaje a Tailandia

Suscribo a Jordi, que se nota que controla un monton, todo un lujo tenerle por aquí....

Khao Sok, fue mi espinita en el viaje que yo hice, que lo planteamos, y al final por ir mas tranquilos, y disfrutar de todo mas despacito, no lo conocimos.... Por si te sirve de consuelo.
esm1974
Esm1974
Travel Addict
Travel Addict
20-09-2010
Mensajes: 80

Fecha: Jue Mar 21, 2024 02:41 pm    Título: Re: Ayuda viaje a Tailandia

Muchas gracias Jordi. Echaré un vistazo a Pai aunque lo de las curvas es una faena porque mi marido se marea muchísimo Muy feliz . Entiendo que con Mae te refieres a Mae Hong Song. Lo de Ao Nang lo había descartado porque ya hemos estado en Krabi antes, estuvimos en el Sheraton pero ibamos allí a coger los ferries y prefería conocer algo nuevo. Koh Lipe lo había descartado porque o yo no lo se mirar bien o el traslado hasta allí es bastante largo (he visto que se tardan unas 3 o 4 horas desde el aeropuerto de Hat Yai) y nosotros somos un poco comodones, la verdad. Koh Samui la descarto porque...  Leer más ...
esm1974
Esm1974
Travel Addict
Travel Addict
20-09-2010
Mensajes: 80

Fecha: Jue Mar 21, 2024 02:45 pm    Título: Re: Ayuda viaje a Tailandia

Gracias por responder KuMpLY.

Khao Sok me apetecía mucho pero he leído que hay que tomar profilaxis para la malaria y a mi los bichos me pican a pesar de usar Relec extrafuerte a litros y también leí que muchas de las cuevas aún están inundadas en noviembre y la verdad es que me ha echado para atrás. Pero no se si estoy equivocada. A veces cuanto más lees, más te lias
JordiM
JordiM
Dr. Livingstone
Dr. Livingstone
11-04-2007
Mensajes: 6348

Fecha: Jue Mar 21, 2024 03:54 pm    Título: Re: Ayuda viaje a Tailandia

Vamos a ver ;

- Si se marea con las curvas , olvidalo. Pero Mae Hong Son , en avión es una delicia de naturaleza poco explotado turisticamente.

- Koh lanta , es muy recomendable , tranquila , tranquila , pero muy tranquila y de acceso mas facil que Lipe.

Saludos
B377sy
B377sy
Silver Traveller
Silver Traveller
18-08-2009
Mensajes: 22

Fecha: Dom Abr 07, 2024 07:46 am    Título: Trat, Koh Chang

Hola viajeros,
Alguien on información fresca sobre Trat, la isla Koh Chang?
Gracias
Respuesta Rápida en el Foro

¡Regístrate Aquí para escribir en el Foro!


Mostrar/Ocultar Galería de Fotos
Tailandia
Campos de arroz en Nan - Tailandia
Oficinas-...
Tailandia
Parque Nacional de Phu Kradueng, Loei - Tailandia
Oficinas-...
Tailandia
Parque Histórico de Phanom Rung, Buriram - Tailandia
Oficinas-...
Tailandia
Wat Ming Mueang, Nan - Tailandia
Oficinas-...
All the content and photo-galleries in this Portal are property of LosViajeros.com or our Users. Aviso Legal - Privacidad - Publicidad
Nosotros en Redes Sociales: Pag. de Facebook Twitter instagram Canal de Youtube