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Llegada a Cairo. Emprendemos camino. El-Alamein
Con mucha ilusión y los mismos nervios de siempre, emprendemos este viaje, desde el aeropuerto de Barcelona, Egyptair en 4 horas nos acerca a la capital, a la ciudad de los 1000 minaretes, a Al-Qahira (la victoriosa), la que nunca duerme, una conurbación de 20 millones de almas, ajenas a nuestro viaje por el desierto líbico que nos ha de llevar transitando por toda la costa mediterránea, desde el oasis de Siwa hasta Luxor, pasando por los oasis de Farafra, Dakhla y Kharga, serán al final mas de 4000 kilómetros, pues no todo es como se planea, aunque lo deseemos con el Inshallah de siempre. Pero no avanzo acontecimientos…..
Después de adquirir unas tarjetas sim para nuestros móviles y cambiar los primeros euros a libras egipcias, tomamos el vehículo del hotel que nos esta esperando afuera de la terminal 3.
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Nuestro alojamiento para esta noche será en el:
Hotel Barceló Cairo Pyramids
El hotel dispone de una calidad/precio bastante aceptable, sus habitaciones superiores permiten un buen aislamiento del ruido de los claxons tradicional en la ciudad cairota, su piscina tiene vistas de las pirámides, a pesar de ser de una cadena mallorquina, el castellano no es idioma que tengan sus empleados, aunque eso si, una de las mejores características del hotel es su localización, que permite al viajero estar en la ruta hacia el sur de las excursiones de Menphis y Saqqara tan habituales, su buena situación también es optima para las salidas hacia la autopista de Alejandría.
Dispone de servicios como oficina de cambio bancario, wifi, así como puede encargarse del transporte entre el hotel y el aeropuerto (23 euros por vehículo en 2019)
Por la tarde/noche anterior encargamos los desayunos tipo picnic para llevar.
Nuestro camino empezó la mañana del día siguiente frente al hotel, a las 5. Raafat nuestro conductor nos recoge en su 4x4, un Toyota Land Cruiser Full Time 4WD, con doble deposito de combustible, para emprender una primera etapa de 800 kilómetros y 12 horas. Con el vehículo ahora lleno de maletas y material, y con nuestro amigo Khalil, emprendemos con mucha ilusión el camino a nuestra primera escala, donde desayunaremos y visitaremos alguno de sus principales atractivos.
El camino por la autopista a Alejandría nos acerca al Mediterráneo, en árabe al Almoutawaset, aunque los egipcios lo abrevian llamándolo simplemente Albahr (mar), durante muchos kilómetros no lo dejaremos, bordearemos esa costa que baña el mismo mar que lo hace a mi tierra, justo hasta que nos adentremos en el desierto rumbo al sur hacia la meta del oasis de Siwa.
El-Alamein
Se vislumbra El Alamein o Al-Alamayn, pequeño lugar donde descubrimos que las aguas ya no están turbias como lo están las cercanas a Alejandría como consecuencia de la proximidad a la desembocadura del Nilo, aquí el azul turquesa es presente y junto con la arena fina de sus playas hace muy accesible el baño a cualquiera, sin necesidad de alojarse en ningún hotel con playa privada.
Parece mentira que en este lugar fuera el escenario de una de las batallas mas cruentas de la segunda guerra mundial, la batalla de el Alamein, donde perdieron la vida mas de 80.000 soldados, así es , en estas costas, en estas arenas dejaron su juventud miles de soldados en una batalla que enfrento a los llamados aliados contra las tropas del eje, es así que aun hay que tener precaución en no abordar pistas fuera de carreteras pues aun existen minas anti carro en aquellos parajes.
El lugar, la villa, a pesar de disponer de varias edificaciones de la época mameluca, con antiguas balconadas de madera y tener algo de encanto, no es un centro turístico, excepto para los propios egipcios que acuden a sus playas, ignorantes quizá de que a estas costas comprendidas entre Cyrene y Alejandría, en el año 48 aC., llego Pompeyo, derrotado por Julio Cesar en la decisiva batalla de Farsàlia, durante la segunda guerra civil de la republica Romana, aquí fue apresado por Ptolomeo XIII, siendo decapitado pensando que se congratularía Cesar, pero no fue así, este enfureció y lloro considerando esta muerte deshonesta, sin honor y en contra los usos de la republica y……. pero esa es otra historia.
Imágenes de los diferentes cementerios existentes; Alemán, Italiano y de la Commonwealth
Quizá para el viajero la parte mas interesante, y la mas triste, sea la visita a los cementerios de la segunda guerra mundial, resultado, apartando otras consideraciones de la guerra, miles de muchachos yacen hoy en estas modernas necrópolis, miles de cruces así como panteones y monumentos, les recuerdan. Nosotros abandonamos el lugar con tristeza y desazón, el silencio invadió el vehículo durante un buen trecho.
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Mirar las fechas………… sus edades…………
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