PALERMO 3ª PARTE ✏️ Diarios de Viajes de Italia

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Del PALACIO DE LOS NORMANDOS ya hablé un poco. Se trata de uno de los edificios más representativos de la ciudad de Palermo y que creo que deben ser visita obligatoria.


Si nos situamos en la Plaza del Parlamento (el edificio ahora es el Parlamento, como comenté), podemos ver claramente que tiene dos fachadas. A la derecha, de estilo árabe-normando, vemos la fachada del ala más antigua del palacio, construida durante el siglo XII.

A la izquierda de aquélla está la fachada de estilo barroco, de principios del siglo XVII. Detrás quedaría la Capilla Palatina.

Puede visitarse el interior y los precios varían dependiendo de lo que se quiera ver. Nosotros estábamos bastante supeditados a una visita guiada así que no pudimos escoger.

El ala más antigua del palacio fue creada por voluntad de Ruggero II, coronado rey de Sicilia en 1130. El nuevo rey escogió el emplazamiento del antiguo castillo árabe para construir su Palacio real.

Como suele pasar en estos casos, la Corte real empezó a crecer y la capilla original del palacio, hoy iglesia de Santa Maria delle Grazie, se quedó pequeña. Por eso a partir del 1131 comenzó la construcción de la Capilla Palatina. Una se construyó sobre otra.

Durante el virreinato se hicieron reformas significativas y con la llegada del siglo XVII se construyó la nueva fachada que esconde literalmente la Capilla Palatina.

La Capilla queda entre dos patios, el de Maqueda y el de la Fuente.

El Patio de Maqueda es un patio porticado de tres pisos que permite el acceso a la Capilla Palatina (en la primera planta) y a los Apartamentos reales (que nosotros no visitamos; en la segunda planta). Los tres pórticos (planta baja, primera y segunda), se comunican entre si con una monumental escalera, de peldaños bajos y anchos, llamada Scalone d'Onore (Escalera de Honor). Para los minusválidos hay un ascensor.

Entre la Capilla Palatina y el ala más antigua del palacio está el Patio de la Fuente, llamado así, claro, por la fuente que hay en el centro. Desde aquí también se accede a salas de los Apartamentos reales.

Aunque nosotros no visitáramos los Apartamentos reales, quiero hacer una breve mención. La sala más importante es, desde luego,la de Ruggero, decorada durante el reinado de su hijo, Guillermo I. Aunque la técnica sea la misma de la utilizada en la Capilla Palatina, los motivos decorativos ya no son de carácter religioso.

Destacan también la Sala de los Vientos o la de Hércules, donde se reúne el Parlamento. Esta sala fue construida entre 1560 y 1572 por voluntad de Carlos de Aragón y Tagliavia, Presidente del Virreino de Sicilia, al servicio del emperador Carlos I de España. Desde entonces ha sido Parlamento. Está decorada con unos frescos que reproducen los doce trabajos de Hércules, de ahí su nombre.

La maravillosa CAPILLA PALATINA fue construida por expreso deseo de Ruggero II a partir del año 1131y se supone que se terminó en 1140. La iglesia fue dedicada a San Pedro, primer Papa de la Iglesia católica, cuya representación puede verse en el mosaico de la semi-cúpula del ábside derecho de la capilla.


Ya comenté que se accede por un pórtico del Patio de Maqueda. Hay pinturas hechas durante el reinado de Fernando I de Borbón. Entre ellas sobresale una representación en mosaico del Genio de Palermo, el protector pagano de la ciudad de Palermo, cuya tradición se remonta a la época romana anterior a la llegada del Cristianismo a Sicilia. No puede faltar el águila, emblema de la municipalidad del Palermo.
Y seguimos con los mosaicos porque nos encontramos con unos de estilo árabe preciosos. Se solían usar como suelos o revestimientos de partes bajas de paredes. Ya hemos visto en otros edificios de Sicilia suelos similares.

Y siguiendo con el gusto árabe, no faltan las muqarnas que decoran el techo de la nave central. A diferencia de otras, las de la Capilla Palatina tienen pinturas y algunas son de figuras humanas. En ellas se retratan escenas de la vida de corte y otras inspiradas en el paraíso del Corán pero nos resulta muy complicado distinguir nada.

Lo que ha hecho famosa a la Capilla Palatina son sus magníficos mosaicos de estilo bizantino. Datan desde el reinado de Ruggero II hasta el de su nieto Guillermo II. Se representan el Viejo y el Nuevo Testamento en las paredes de la nave central. En las paredes de las naves laterales se muestran escenas de la la vida de los Santos Pedro y Pablo mientras las decoraciones de los ábsides están dedicadas a la Sagrada Familia y al titular de esta iglesia, San Pedro.

La nave central de la Capilla Palatina se sustenta sobre ocho columnas de mármol, cuatro por cada lado, procedentes de distintos edificios de la antigüedad. Por eso son distintas.

La contra-fachada está decorada con un gran mosaico del Cristo Pantocrátor. Sobre una plataforma de mármol, puesta a mayor altura del piso de la iglesia, se halla el aposento real donde, en el pasado, se hallaba el trono. Sobre el aposento real se ven unos leones, emblema de la realeza. Mas arriba está el mosaico del Cristo Pantocrátor con San Pedro, San Pablo y los Arcángeles Miguel y Gabriel.


En la nave derecha se halla un monumental púlpito de mármol que se sustenta sobre unas macizas columnas.

En la cúpula del centro del transepto hay un hermoso Cristo Pantocrátor rodeado por 4 Ángeles y por 2 Arcángeles que sujetan el Orbe.

En toda la cornisa de la base cuadrada que sujeta el tambor de la cúpula hay unas inscripciones en griego y latín. Allí dicen que la fecha de construcción es 1143 "desde la encarnación de Cristo". La especificación del nacimiento de Cristo se debe a que en ese entonces estaba en uso, además del calendario juliano, también el calendario bizantino que contabilizaba los años desde la creación del mundo (5509 a.C.).

El ábside central muestra el Cristo Pantocrátor, uno de los tres que se representan en esta iglesia, que sujeta el Evangelio abierto en la página donde puede leerse, en griego y latín, el siguiente versículo (Juan 8:12): "Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, mas tendrá la luz de la vida".

Quizás nos suene y pensemos que ya lo hemos visto. Y, sí, es verdad. Es clavado a los de Monreale, Cefalù y Santa Maria dell'Ammiraglio. No por ello dejará de parecernos precioso.

Ya por libre nos dirigimos a la CATEDRAL para verla de nuevo.


Por la tarde nos vamos a ver la PLAYA DE MONDELLO. La línea 806 conecta Mondello con el centro ciudad a través del Parque de la Favorita (hay un autobús cada 10-15 minutos). Sale desde la terminal de la Piazza Sturzo, situada detrás del Politeama. El recorrido es un poco largo y el autobús, sobre todo al volver, va muy lleno. Demasiado.

Como pasa en la Costa Amalfitana, buena parte de la playa es de gestión privada. Vemos barcas y redes de pesca.

Llama poderosamente la atención un edificio de color crema. Se trata del Restaurante Balneario Charleston, un edificios de principios del siglo XX, modernista, el estilo preferido por la burguesía de la época. Ahora se llama Alle Terrazze y el chef es famoso por un programa de tv.


También hay una villa de pescadores con dos torres de vigía (para controlar el posible ataque de piratas).

De regreso a Palermo, vamos al GIARDINO GARIBALDI. También llamado Villa Garibaldi, es un jardín público construido por el arquitecto Giovan Battista Filippo Basile entre 1861 y 1864 en el centro histórico de Palermo.

Hay muchas plantas exóticas pero destaca un ficus, uno de las más antiguos y más grandes de Italia con una altura de 30 metros.


Entre las plantas presentes, también destaca la presencia de un espécimen de Podocarpus neriifolius (una especie nativa de Asia). En el jardín encontramos bustos escultóricos y fuentes.

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