Al llegar de Luxor, nos llevan a cenar nuevamente al Restaurante en el río Nilo el Alsaraya. por la mañana nos recogen en el Ramsés Hilton y vamos a tener todo el día con numerosas visitas.
Empezamos visitando el Museo Egipcio de El Cairo. Se encuentra en el centro de El Cairo, en la plaza Tahrir. Estábamos en la sala de las joyas (2a. planta) halladas en la tumba de Tutankamón, cuando al salir, veo un set de televisión, y allí veo al famoso Dr.Zahi Hawass, el famoso arqueólogo egipcio que sale en múltiples documentales y ex ministro de Antigüedades, le están haciendo una entrevista.

Tras la visita del Museo, nos trasladan a la Ciudadela de Saladino, residencia de los gobernantes egipcios durante casi 700 años, desde el siglo XIII al XIX. Su ubicación en un promontorio cerca del centro de El Cairo domina una posición estratégica con vista a la ciudad y dominando su horizonte, lugar perfecto para obtener bonitas fotografías, siempre y cuando la polución de la gran urbe que es el gran Cairo lo permita.
Allí mismo nos encontramos con la Mezquita de Alabastro.En 1830, Mehmet Alí, entonces valí del sultán turco en El Cairo, mandó erigir la mezquita en recuerdo de su hijo Tusun, caído en combate. Para ese fin hizo venir desde Estambul a Yusif Bushnak, un reconocido arquitecto de la época, quien se inspiró en la Mezquita Azul para construir el monumento.

Tras las visitas y fotos del lugar, traslado al Barrio Copto.
Los coptos eran los egipcios autóctonos, es decir, los que vivían en El Cairo antiguo antes de la llegada de los árabes. Más tarde el término "copto" pasó a tener un significado religioso que designa a los egipcios cristianos, quienes aún viven mayormente en esta parte de la ciudad.
El Barrio Copto de El Cairo es, además, un sitio de peregrinación porque, según el Nuevo Testamento, allí se refugió la familia de Jesús durante algunas semanas cuando huyó a Egipto. En la cueva donde se dice que vivieron se construyó en el siglo V la iglesia de San Sergio y San Baco. También visitamos la Iglesia Colgante. Es la iglesia del barrio más famosa y también es la iglesia cristiana más antigua de la ciudad. También se la conoce como Iglesia de Santa María y data del siglo IV. Recibe el nombre de «colgante» ya que hay que subir una escalinata para acceder a ella y está elevada sobre el suelo. Se puede visitar todos los días desde el amanecer hasta las 16h siendo su entrada gratuita.

Ya se acercaban las 15:00 horas y el hambre apretaba, nos llevaron a un restaurante cercano, donde en buffet te repusimos fuerzas, a base de arroz y pollo, algo que a lo largo del viaje fue recurrente.
Tras esa comida, subida al bus, y ahora sí al famoso Mercado Khan El Khalili. Entramos por la Plaza Al Eman al Houssein. El mercado se encuentra en el corazón de El Cairo islámico, en una zona amurallada con un aire medieval en la que se respira la magnificencia de la arquitectura mameluca.
Allí se encuentran:
Artesanías, joyas, especias, perfumes, instrumentos musicales, lámparas de colores y, cómo no, souvenirs y regalos egipcios… en las estrechas callejuelas que forman el mercado de Jan El Jalili es posible encontrar literalmente todo tipo de tiendas. Se dice que hay más de 900 puestos. En la mayoría de los puestos hablan español, al menos el necesario para llamar la atención del visitante y regatear el precio.
A modo de ejemplo por una camiseta turística nos inician el regateo en 1.200 libras, 66 €, algo de locos, y al final nos la llevamos por 100 liras turcas, 5,50€. Iban algo subiditos. En Giza habíamos cambiado 200 euros a 18,13 liras por 1€. En el banco del Hotel Marriott. Suficiente para los días de viaje, para pagar las bebidas, comprar regalos, propinas y algún capricho. Las entradas a Templos, Pirámides y la casi totalidad de las comidas las teníamos incluidas en un pack aparte del viaje.
Dando vueltas por el Mercado, tropezamos con una tienda a nivel de calle, la del famoso Jordi. Pero en esta no habían demasiado artículos el vendedor nos indico que había que subir unas escaleras allí al lado, para encontrar a Jordi. Ventajas que tiene, precios fijos con etiqueta, te envuelve cuidadosamente los souvenirs, te obsequia con agua, te o refresco, los artículos de que dispone son: magnetos, pirámides, imágenes de dioses y faraones, etc. En local aparte vimos que vendía artículos textiles y camisetas.
No nos esforzamos en regatear ni en muchas compras, preferimos sentarnos en un café esperando al guía y al resto del grupo para iniciar la visita de El Cairo nocturno.
