Esta etapa del viaje tiene un resumen fácil, carretera, y kilooooometros hasta llegar al Delta, lo que en este país significa un montón de hora de conducción, la suerte es que en esta zona encontramos muy pocas obras y el tráfico, aunque abundante, bastante tranquilo.
Sabíamos que sería una etapa larga y cansada, pero para eso están las vacaciones, ¿no?, el viaje fue tranquilo y aburrido, la única incidencia fue una jugarreta del GPS, ya casi llegando al Delta nos indicaba un puente por el que cruzar, lo que no contaba es que el puente está en construcción y el cruce hay que hacerlo en transbordador, después de un par de vueltas llegamos al sitio correcto, nos indicaron donde comprar los billetes y listo.
Nuestro alojamiento en el Delta estaba en Baltenii de sus, era Pensiunea 4 Salcii, 95€ con pensión completa. Tuvieron el detalle de mandarnos un mensaje para que eligiéramos pescado o carne para la cena y así tenerlo preparado cuando llegaremos.
El sitio es sencillo, pero encantador, tiene una pequeña piscina que en días de calor se hace más que agradable, se aparca dentro de la propiedad. El propietario es un autentico encanto, siempre dispuesto a ayudarte en todo lo que necesites, él se encargó de organizarnos la visita al Delta del día siguiente, todo genial.
La vista desde nuestra habitación era la que veis en las fotos, una gozada.


Tras una rica cena de pescado, nos vamos a la cama que el día ha sido duro.
