3 MARZO 2024
Pero aún no estábamos en casa. Nos esperaban 7 horas de escala en Londres e íbamos como zombis por el cansancio acumulado. Nos sentamos a desayunar a precio de oro y estuvimos allí un rato haciendo tiempo y después fuimos a pasar el control de policía. Cuando escaneé la primera tarjeta de embarque, en la pantalla apareció el mensaje de “terminal equivocada”.

Es lo que tiene hacer las cosas sin mirar. Estábamos en la Terminal Sur y debíamos ir a la Norte. Un chico del aeropuerto nos indicó el camino ya que había que coger un tren, pero por lo menos teníamos tiempo suficiente, así que llegamos sin agobios.

El control de policía lo pasamos por uno especial para familias. Ana perdió un zapato en el escáner (que recuperó luego) y nos pararon la maleta y la bolsa de líquidos. La primera, la pasaron de nuevo y solucionado, pero de la segunda, nos hicieron tirar el Dalsy que nos habíamos llevado y que ya había pasado por tres controles anteriores sin problemas. Nos dijeron que sin receta no se podía (por tamaño).
Para almorzar, volvimos a recurrir a Shake Shack porque todavía no nos habíamos hartado de las hamburguesas.
A las 16:45 salía nuestro último vuelo que aterrizó en Málaga a las 20:30.

Recogimos nuestro coche y salimos en dirección a casa.

